Estudios científicos han demostrado que caminar es un increíble hábito. No es solo actividad física, sino que también trabaja al cerebro, ayudándolo a reducir el estrés, mejorar la memoria y la concentración. Incorporar la caminata en una rutina diaria mejorará tu salud mental.
Este estudio ha revelado que caminar es una excelente estrategia para mejorar la productividad y reducir el estrés. Para aquellas personas que no están acostumbradas al hábito les puede resultar difícil empezar, pero a continuación les dejamos ciertos consejos para que sea más llevadero.
Trucos para incorporar el hábito de caminar
1. Reserva tiempo en tu agenda
Es importante darle prioridad a la actividad. Dedicar al menos 30 minutos al día es suficiente para separar tu tiempo de trabajo y de ocio.
2. Varía tu ruta
Cambiar de vistas y escenario es clave para mantener el hábito. Se puede alternar entre entornos urbanos y naturales para proporcionar diferentes estímulos al cerebro.
3. Momentos de reflexión
Si bien es fácil usar ese tiempo de caminata para escuchar música o un podcast, también es importante caminar en silencio. Este tiempo puede ser utilizado para ordenar pensamientos, ser más consciente del entorno y concentrarse en la respiración.
4. Caminar en compañía
Esta actividad también puede ser una oportunidad social. Caminar con amigos o unirte a un grupo puede añadir una dimensión social al ejercicio, lo que a su vez potencia sus beneficios cognitivos.
Fuente: Ámbito