Fueron varios los vecinos que dedicaron varias horas a «reparar» el daño ocasionado por quienes pintaron los carteles. (Foto: Peter Byrne/PA Wire/dpa)
Debe haber pocas calles en el mundo tan famosas como Penny Lane, inmortalizada de manera magistral por The Beatles, a tal punto que uno sin haber estado allí siente que la conoce como si fuera la de la esquina de su casa. Y que uno aprendió a querer a la distancia como si se tratara del barrio de uno.
Sin embargo, parece que hay vecinos -o no tanto- de Liverpool para los que ese nombre no resulta tan agradable como para quienes disfrutan de la canción, que cada tanto aún sigue sonando en las presentaciones de Paul McCartney. Y durante la madrugada de este viernes se dedicaron a vandalizar varios de sus carteles indicadores con el argumento de que su nombre homenajea a un traficante de esclavos.
Fueron exactamente cuatro los carteles con el nombre de la calle que aparecieron cubiertos con pintura en aerosol negra, y junto a uno de ellos, sobre el muro, alguien escribió la palabra «racista». Los vecinos de la zona se encargaron, unas horas más tarde de limpiarlos. Pero nada asegura que no vuelva a ocurrir algo por el estilo en los próximos días.
«Penny fue un comerciante de esclavos», escribieron con aerosol en una pared, haciendo referencia a James Penny, cuyo vínculo con el origen del nombre de la calle no está probado. (Photo by Oli SCARFF / AFP)
Por lo pronto, lo que sí pudo constatar la publicación The Huffington Post es que entre los que se salvaron de la pintura en aerosol se encuentra el que McCartney, autor de la maravillosa Blackbird, que reivindica los derechos de la comunidad negra, autografió durante su gira a bordo del Carpool Karaoke de James Corden, en 2018.
En 2018, Paul McCartney recorrió la zona junto a James Corden, en un itinerario que pasó por varios lugares de la infancia del beatle y de la historia de la banda. (Foto: Craig Sugden/CBS via AP)
Dos vecinos de la zona, Emmett O’Neill y Lucy Comerford, quienes pusieron manos a la obra para limpiar los grafitis, dispararon contra quienes arruinaron las señales. «Penny Lane es definitivamente una comunidad, y esto es realmente desagradable. Está mal», señaló Comeford. En tanto, O’Neil aseguró que desfigurar las señales no va a cambiar mucho las cosas. «Creo que es una manera errada de encarar el tema», concluyó.
La muerte del afroamericano George Floyd a manos de un policía blanco en Estados Unidos provocó una reacción que trascendió por mucho las fronteras del país, y la indignación y el rechazo a la violencia racial crece no sólo allí sino también en el Reino Unido, como en otros países, y alienta un movimiento de protesta contra las referencias a la herencia colonial.
El debate de hecho llegó en los últimos días hasta los niveles institucionales y políticos de Liverpool, en el noroeste de Inglaterra, pero su alcalde, Joe Anderson, asegura que no está claro si la calle fue nombrada en honor al comerciante de esclavos James Penny, como lo sugieren quienes vandalizaron las señales.
Y hasta el Museo de la Esclavitud que tiene sede en la ciudad dio su opinión acerca del tema. «Hay un debate sobre si Penny Lane fue nombrada en honor a James Penny, pero las pruebas no son concluyentes», dijo un portavoz de la institución, que está investigando sus orígenes.
La limpieza después de un enchastre que seguramente no tiene demasiado efecto en eso de cambiar el mundo para mejor. (Photo by Oli SCARFF / AFP)
En tanto, un político local, Richard Hemp, afirmó que el nombre del esclavista se escribía Penney y que la calle existe «desde hace más de 500 años, antes de Penney, antes de la esclavitud».
Fuente: Clarín