“Se creyó que la Vía Láctea era el universo / Un cosmos que salió del caos / y una creación que no ha cesado todavía”, escribió en “Estamos en el firmamento” el poeta y sacerdote nicaragüense Ernesto Cardenal. En el blog de fotografía y viajes Capture the Atlas, que reúne una comunidad de veinte mil fotógrafos y está a cargo del español Dan Zafra, se comparten poéticas imágenes de esa creación ininterrumpida. Días atrás, se publicó la quinta edición de la colección anual Milky Way Photographer of the Year con las veinticinco mejores imágenes de la Vía Láctea seleccionadas por Zafra. Esta galería estelar se presenta durante esta época del año, ideal para observar, capturar y compartir la belleza de la galaxia.
La colección incluye imágenes tomadas en doce países: España, Chile, la Argentina, Francia, Estados Unidos, Australia, Nueva Zelanda, Japón, China, Egipto, Eslovenia y Eslovaquia por veinticinco fotógrafos de catorce nacionalidades, entre los que figuran el australiano Trevor Dobson, el francés Benjamin Barakat, el chileno Alexis Trigo, los españoles Efrén Yanes y José Manuel Galván Rangel, el neocelandés Evan McKay y el argentino Gonzalo Javier Santile. Este año, Santile fue uno de los ganadores del Sony World Photography con una imagen de la Vía Láctea tomada en Cafayate.
La calidad de la imagen, la historia detrás de la toma -que los fotógrafos narran en primera persona en el blog- y la capacidad de inspirar de las fotografías son los principales factores que se tienen en cuenta para seleccionar las imágenes de cada año.
En el blog se informa que la mejor temporada para fotografíar la Vía Láctea en el hemisferio norte va de febrero a octubre, y de enero a noviembre en el hemisferio sur, entre la medianoche y las cinco de la madrugada, en noches de luna nueva. “El mejor momento para verla y fotografiarla es entre mayo y junio, coincidiendo con el máximo número de horas de visibilidad en ambos hemisferios”, agrega Zafra.
Además del calendario, otro requisito para ver la Vía Láctea son cielos oscuros y sin contaminación lumínica. Por ello, siempre se recomienda alejarse de las ciudades y otros centros de contaminación y visitar áreas con una mayor elevación.
“Este año, la Argentina está representada con una espectacular imagen capturada en la provincia de La Rioja por el fotógrafo argentino Gonzalo Javier Santile”, dice Zafra a LA NACION. “Cuando capturé esta foto, me estaba quedando en la pequeña ciudad argentina de Vinchina -cuenta Santile en el blog-. Me quedé allí durante cinco días para tener tiempo suficiente para explorar esta maravilla natural”. Hizo su foto en el área conocida como la “Pirámide”, que se halla al pie de una montaña de 4600 metros de altura, donde está la Laguna Brava.
“Hay géiseres y una laguna llena de flamencos rosados que llegan durante la temporada año tras año -cuenta el fotógrafo argentino-. El hito más espectacular aquí es el cráter ‘Corona del Inca’, que para escalarlo es necesario oxígeno. Lo intenté la primera noche y fue frustrante porque la ubicación no tenía contaminación lumínica, por lo que la foto salió extremadamente oscura, incluso con ISO 6400. Regresé al día siguiente al atardecer y durante la hora azul, tomé una foto de el primer plano. Luego, esperé a que saliese la Vía Láctea en la misma posición con el trípode e hice la foto del cielo”.
El editor de Capture the Atlas está al cuidado de la galería de fotos. No solo selecciona imágenes tomadas por algunos de los fotógrafos más reconocidos del mundo, sino que también busca nuevos talentos y lugares donde la Vía Láctea no se haya fotografiado antes, como las imágenes del Tíbet y el desierto de Xinjiang en la edición de 2022, tomadas por Alvin Wu y Jinyi He, respectivamente. En su blog, además, se publican propuestas de viajes y cursos de fotografía de paisajes y astrofotografía, y se incluyen artículos con guías y tutoriales.
Fuente: Daniel Gigena, La Nación