Turistas descansan al borde de un pozón, camino al Cajón del Azul. Mariana Eliano

Los incendios en la zona de El Bolsón son graves desde la semana pasada, y el fuego consumió muchísimas hectáreas de bosque. Locales y muchos turistas debieron ser evacuadas a raíz del incendio que se desató en la zona de Confluencia, cerca de Mallín Ahogado. Los visitantes que estaban en los refugios de montaña de la zona del Anprale (Área Natural Protegida Río Azul y Lago Escondido) fueron evacuados de a poco y todos los accesos al área natural protegida fueron cerrados hasta nuevo aviso por los incendios del área y de las zonas aledañas. Es ahí donde se encuentra el famoso Cajón del Azul, el destino de trekking preferido de caminantes aficionados que todas las temporadas se lanzan a la montaña para descubrirlo.

Cómo es el trekking al Cajón
La caminata al Cajón es uno de los principales atractivos turísticos de la zona. Fuimos en otoño: los locales dicen que la mejor opción es hacerlo fuera de la temporada alta por ser una época más tranquila, ya que en verano son demasiados los que suben. Esto se constata apenas se llega a la chacra Wharton para emprender las caminatas (el punto de inicio a 14 kilómetros de El Bolsón) y donde hay enormes estacionamientos que en el mes de abril están poco ocupados. También, por el ancho considerable de la senda por la que se camina- al principio se comparte incluso un tramo corto con camionetas- y la cantidad de servicios que se ofrecen, en especial en el primer sector.

Por seguridad es obligatorio registrarse previamente en la web de Anprale (www.anprale.com). Allí advierten por supuesto también sobre la prohibición de hacer fuego dentro del área natural salvo en los fogones habilitados de campings y refugios, y que se debe usar calentador a gas cuando se acampa. Tampoco arrojar fósforos ni colillas de cigarrillos porque pueden provocar incendios.

Como posee una red extensa de circuitos de distinta duración y dificultad que se conectan entre sí, en la página web dan también indicaciones súper precisas de distancias, desvíos y tiempos de caminata promedio de cada uno. También su nivel de dificultad según sea de dificultad media, alta o extrema. El Troncal es el que lleva hacia el Cajón del Azul, y se describe como de dificultad media: requiere de un esfuerzo físico para poder realizarlo, el tipo de terreno es fácil de transitar y sin muchos obstáculos, pero presenta pendientes pronunciadas y o distancias intermedias que demandan su tiempo de realización.

Anprale forma parte del Sistema Provincial de Áreas Naturales Protegidas de Río Negro, y comprende una superficie aproximada de 65000 hectáreas de bosque andino patagónico. Se extiende desde el valle del Río Manso al norte hasta el límite con la provincia de Chubut al sur, y desde el río Azul al este hasta la frontera con Chile al oeste. Los circuitos de trekking se internan en valles y cerros y atraviesas bosques de lenga, coihue, ñires y cipreses.

Al sendero se ingresa mediante el acceso conocido como la Confluencia. De allí serán unos 9 kilómetros de caminata hasta el cajón. La expectativa es vivir la caminata con tranquilidad aunque con esfuerzo ya que vamos y volvemos en el mismo día y los días son cortos. En el otoño la hora máxima para emprender la vuelta son las cuatro de la tarde para caminar con luz. Hay quienes hacen el sendero a caballo o en bicicleta.

El camino está delicadamente tapizado de mini hojitas de coihue. A las dos horas y media de caminar se llega al primer refugio (La Playita), ubicado sobre la margen sur del río Azul. Desde él se accede a varios pozones de agua verde-azulada, y a una playita de piedras que se usa como balneario. Si se continúa por el circuito troncal, unos 30 minutos después una pasarela cruza el río Azul al refugio La Tronconada, que se encuentra dentro de un tupido bosque de coihues al pie del faldeo del Cerro Dedo Gordo. A este refugio se llega por una espectacular pasarela colgante que atraviesa el río Azul y donde un cartel advierte que solo se suba si se va al refugio, no para la foto por favor.

A los pozones de color turquesa del Azul -que tan instagrameables son- y que suelen ser el objetivo del trekking, se llega luego de un tramo de una media hora más. Aunque otra pasarela que atraviesa el río conduce desde allí hacia el Refugio Cajón del Azul, la mayor parte de los caminantes se queda en los espectaculares pozones de agua. Pocos saben que los pozones no son el cajón propiamente dicho.

De los preciosos pozones sale un sendero que, después del refugio lleva al verdadero cajón y al nacimiento del río, y uno de los atractivos más icónicos de la zona. Son solo veinte minutos más y es el lugar donde el río está encajonado: la fractura o falla de la roca se ve desde una altura que da vértigo por la presencia de precipicios. “La mayor parte de la gente llega a los pozones a los que extrañamente llaman cajón”, explican en el refugio. Y se pierden del verdadero encajonamiento, un cañón de pocos metros de ancho y 40 de profundidad. A pocos minutos del refugio también es posible recorrer el tramo del río donde comienza el encajonamiento, conocido como el nacimiento del Cajón del Azul.

¿Querés ayudar?
Diversas organizaciones y personas de la comunidad de la Comarca Andina están trabajando incansablemente para hacer frente a los incendios, ya sea juntando fondos para comprar insumos y asistir a los damnificados y hasta poniéndole al cuerpo a las tareas para frenar los focos activos de fuego. A continuación, una lista de las cuentas fiables donde se puede colaborar:
- Asociación de Amigos de la Patagonia
Alias: amigos.patagonia
- Circuito verde (Bariloche)
Alias de MP: circuitoverdebari
IG: circuito_verde
- Asociación civil Centro cultural Antuquillen
IG: @ccantuquillen
Alias : antuquillen
Fuente: La Nacion