La noche más aterradora del año viene acompañada de caras monstruosas, miradas siniestras, bocas espeluznantes, todo por obra y gracia de un buen maquillaje.
El coronavirus transformó muchos miedos en realidad. Pero en la Ciudad, hubo opciones para divertirse en la Noche de Brujas tanto en casa como en locales gastronómicos.