Vinicius de Moraes y el fin de un mito hecho de sol, arena y cerveza: revelan el secreto de Garota de Ipanema

Nunca es triste la verdad. Abren el acceso a 11 mil archivos que documentan la historia creativa del genial poeta y compositor brasileño.

Dice la leyenda que Vinicius de Moraes y Tom Jobim crearon Garota de Ipanema, la canción brasileña más interpretada en el mundo, en una tarde, cuando bebían en un bar y vieron a una hermosa joven camino a la playa. Y, por cierto, la escena le agregaba poesía a superhit de la bossa nova.

Pero desde este jueves 27 de mayo, con la apertura del Acervo Digital Vinicius de Moraes, aquella imagen idílica que presentaba a ambos compositores en el Bar do Veloso, de la antigua calle Montenegro de Ipanema (hoy Vinicius de Moraes), en Río de Janeiro, quedará en la memoria de un pasado que, en verdad, no tuvo tanto que ver con la realidad.

Y tal vez será cuestión de admitir que no haya sido tan cierto eso de que Vinicius y Tom escribieron el tema mientras espiaban el «dulce balanceo» de las caderas de una joven Heloísa Eneida Menezes Paes Pinto cuando iba a la playa o hacía mandados para sus padres.

Heloísa Eneida Menezes Paes Pinto, la musa que inspiró Garota de Ipanema, una de las canciones emblemáticas de la bossa nova y de la música popular brasileña.

Heloísa Eneida Menezes Paes Pinto, la musa que inspiró Garota de Ipanema, una de las canciones emblemáticas de la bossa nova y de la música popular brasileña.

Al fin de cuentas, como canta Serrat desde hace muchos años, nunca es triste la verdad, pero lo que no tiene es remedio. Y los más de 11.000 archivos que documentan la historia creativa del poeta, compositor, diplomático y dramaturgo brasileño parecen demostrar que no todo fue como lo creímos hasta ahora.

Es que el material «desclasificado» revela que De Moraes, considerado uno de los padres de la «bossa nova», no era de esos que te escriben un hit en una servilleta, y que, al contrario, acostumbraba revisar, rehacer, editar y corregir toda su producción literaria y musical varias veces antes de ofrecer la versión final.

«En los archivos sobre su producción intelectual podemos ver que Vinicius era un hombre que era un trabajador de la palabra. Y por eso un poema o una canción podían demorar años antes de ser concluidos», explicó a EFE Julia Moraes, nieta del compositor, responsable de la iniciativa y directora de VM Cultural, la empresa creada por los herederos del artista.

«Muchos creen que compuso Garota de Ipanema sentado en un bar, bebiendo su cerveza en una tarde de sol y conversando con Tom Jobim. Pero en realidad no fue así. La canción tiene varias versiones en las que es posible ver una búsqueda intensa por palabras y rimas. Él cambia varias palabras, se cuestiona y va perfeccionando su voz lírica mediante un trabajo constante y prolongado», afirmó.

La imagen de Vincius acompañado de una copa es sólo una parte de la vida un personaje central en la cultura musical de América. EFE/ARCHIVO

La imagen de Vincius acompañado de una copa es sólo una parte de la vida un personaje central en la cultura musical de América. EFE/ARCHIVO

Un poema que exigió diez años de trabajo

Julia Moraes destaca el caso emblemático del poema O avesso (El opuesto), que Vinicius tardó diez años en concluir, y detalla que entre los documentos hay proyectos de libros que nunca llegaron a publicarse y en los que trabajó por mucho tiempo.

El Acervo Digital Vinicius de Moraes (http://acervo.viniciusdemoraes.com.br), que incluye manuscritos, poemas, textos, letras de canciones, discursos, obras de teatro, guiones de cine, cartas, telegramas, entrevistas y fotografías del diplomático (1913-1980), estaba disponible desde 1992 y hasta ahora sólo para especialistas, pero a partir de este jueves puede ser consultado en internet por cualquier persona en el mundo.

La digitalización de cerca de 35.000 páginas que componían el acervo fue una iniciativa de la VM Cultural y de la Fundación Casa de Rui Barbosa, una institución pública con sede en Río de Janeiro responsable por el llamado Archivo-Museo de la Literatura Brasileña.

«Lo que hicimos fue escanear los documentos para preservarlos y crear un portal en internet que tiene un sistema de búsqueda que puede atender tanto a investigadores como al público no especializado», según la coordinadora del proyecto.

Vinicius publicó su primer libro de poemas a los 19 años. Allí estaba la influencia de los grandes nombres de la poesía francesa: Baudelaire, Verlaine y sobre todo Rimbaud. Eso y mucho más aparece en los archivos ahora accesibles para todos.

Vinicius publicó su primer libro de poemas a los 19 años. Allí estaba la influencia de los grandes nombres de la poesía francesa: Baudelaire, Verlaine y sobre todo Rimbaud. Eso y mucho más aparece en los archivos ahora accesibles para todos.

Preservar el acervo y democratizar su acceso

«Nuestro objetivo fue preservar el archivo, democratizar el acceso a su obra e incentivar la investigación sobre su obra y su memoria», agregó Julia Moraes, quien recordó que toda la documentación fue donada en la década de 1980 por la familia a la fundación, responsable por la preservación física de los originales.

Los diferentes documentos permiten distinguir particularidades en el proceso de creación de Vinicius de Moraes durante casi 50 años y las cartas facilitan la comprensión del contexto histórico del momento y muestran a un artista atento a lo que ocurría en Brasil y en el mundo.

Por su trayectoria como diplomático es posible ver su paso por los más diversos ambientes culturales e intelectuales, desde los templos de religiones afrobrasileñas en Salvador de Bahía hasta encuentros con personalidades como Orson Welles, Pablo Neruda o Gabriela Mistral en ciudades como Río de Janeiro, Sao Paulo, Montevideo, Buenos Aires, París, Oxford y Los Ángeles.

En el acervo digital es posible consultar, con las respectivas anotaciones, el guión que escribió para el filme Orfeu Negro, dirigida por el cineasta francés Marcel Camus y que obtuvo el Óscar a la mejor película extranjera en 1959; la versión francesa del texto y hasta una entrevista en la que revela que adaptó la pieza Orfeu da Conceicao para cine en apenas 15 días.

En cuanto a la producción intelectual destacan las letras de 260 canciones, muchas con sus varias versiones, como Canción del Amanecer (nueve versiones) o Canto de Ossanha (cuatro versiones), y todos sus libros de poesía, de los que hay manuscritos, versiones dactilografiadas, pruebas tipográficas, enmiendas, correcciones y textos con más de una versión.

De Moraes exploró, además de los terrenos de la música, el cine, el teatro, la literatura y la política.

De Moraes exploró, además de los terrenos de la música, el cine, el teatro, la literatura y la política.

Entre los documentos curiosos figura su primer poema, que escribió a los 8 años, y una carta en la que Tom Jobim le comenta la presión de un productor para que aceleren la composición de unas canciones, a lo que el poeta responde con un «ja ja ja ja».

Fuente: Clarín