Las rivalidades entre las estrellas suelen calar hondo y muchas veces los egos hacen que una reconciliación no sea algo factible. La mala relación entre Tina Turner y Aretha Franklin era algo conocido por todos en el ambiente, y la disputa llegó tan lejos, que incluso los funerales de ambas habrían entrado dentro de la competencia.
Según el sitio norteamericano Radar Online, Turner planeó su propio funeral mientras luchaba contra las complicaciones que le generó un trasplante de riñón. ¿El motivo? Quería que el suyo fuera más grande que el de Franklin. “¡Eran fervientes rivales en vida, y Tina no va a dejar que Aretha la eclipse en la muerte!”, reveló una fuente cercana a las artistas en 2018. En ese momento, Tina estaba lidiando con problemas de salud meses después de que su esposo Erwin le donara su riñón.
“No me importa la idea de morir”, decía Turner según esta fuente, aunque la diva estaba decidida a despedirse con estilo y con un último adiós que “eclipsara el de Aretha”.
Franklin murió en 2018, unos años después de que su recelo con Turner quedara expuesto: luego de que en los Premios Grammy de 2008 Beyoncé presentara a Turner como “La Reina”, la intérprete “I Say A Little Prayer” hizo que su publicista emitiera un comunicado tachando el comentario de “golpe bajo”. Lejos de llamarse al silencio, Tina replicó y dijo de Aretha: “¡Su ego debe de ser muy grande para pensar que era la única!”.
La disputa entre ambas, según revelaron personas que las conocían, comenzó con rumores de que Aretha había tenido una aventura con Ike Turner, el maltratador marido de Tina, antes de que la pareja se divorciara en 1978. Al parecer, Aretha e Ike siguieron saliendo en los 80, cuando el álbum de regreso de Tina, Private Dancer, eliminó a Aretha de las listas de éxitos.
A pesar de esto, el funeral de Turner no será grande. Si bien aún no se han hecho públicos los planes para la despedida final de la Reina del Rock ‘n’ Roll, un portavoz de la familia confirmó que será algo íntimo. “Habrá una ceremonia fúnebre privada a la que asistirán los amigos más íntimos y la familia”, confirmó esta persona.
Mientras tanto, tras conocerse la noticia de su fallecimiento, la industria de la música y otros círculos se han volcado en homenajes a la estrella. Además, sus fans han acudido en masa a su casa en Küsnacht, Suiza, para depositar flores y encender velas.
Una herencia millonaria
Según el sitio especializado Celebrity Net Worth, se estima que la fortuna de la artista ascendía -hasta el momento de su fallecimiento- a una cifra de 250 millones de dólares. Por otro lado, informaron que en el 2021 se supo que vendió sus derechos de música e imagen a BMG Rights Management por alrededor de 50 millones de dólares.
Además del dinero que recaudó en su trayectoria profesional, también se encuentran sus respectivos bienes personales. Entre los mismos, además de las propiedades y joyas, se localizan una serie de vehículos de alta gama que Tina mostró en más de una ocasión.
Según establecieron, la herencia total de los autos quedaría a repartir entre sus hijos adoptivos y los nietos de Tina, con un monto aproximado de 317 mil dólares. Se espera para que estos días se estipule con detalle cada uno de los bienes personales, y como serán distribuidos entre los hijos de la estrella y sus nietos.
Entre las propiedades que entrarán en juego se encuentra el castillo con vista al agua donde transitó sus últimos días, por el que desembolsó la desopilante cifra de 76 millones de dólares. La propiedad está compuesta por 10 edificaciones, un estanque, una piscina, un muelle en el Lago Zúrich y es atravesada por un riachuelo. “Aquí me siento como en casa. Si estoy en el lago de Zúrich, en la casa que tengo, me siento serena. Realmente tengo todo aquí”, había dicho la celebrada artista de rock en declaraciones para el New York Times, en su cumpleaños número 80.
Fuente: La Nación