A cara lavada, en jeans y camiseta blanca, Lady Gaga parece una chica común. Cuando tiene fiaca y se hecha en el sillón, también. Así se la vio en el documental Gaga: Five Foot Two, donde hace un par de años expuso su fibromialgia (que se manifiesta a través de fuertes dolores en los músculos, ligamentos y tendones) y sus sentimientos más profundos: la ruptura con su pareja de entonces, la ansiedad por cantar en el Super Bowl, la angustia por la muerte de su tía Joanne, a la que nunca conoció, pero que le sirvió como musa para su disco más sentido. El tiempo curó algunas heridas y reabrió otras que, lejos de debilitarla la hicieron más fuerte. Lady Gaga parece una chica común, aunque no lo sea.
Hace unos días, la periodista Lindsay Crouse escribió en The New York Times un artículo en el que se preguntaba “¿Cómo te comparas con una de las mujeres más famosas del mundo?”. Crouse salió durante siete años con el actual novio de Lady Gaga y describió en esa nota lo raro que se sintió haber visto a su ex, acompañando a una diva. Con altura y mucho sentido del humor, Lindsay expuso: “Lady Gaga es asombrosa. Compararte con ella es increíblemente motivador, y te recomiendo que lo pruebes, independientemente de cómo te relaciones con quién está saliendo con ella”. La reportera no se equivoca, Gaga es asombrosa y le sobran motivos para probarlo.
Por empezar, este año logró un objetivo que la perseguía hace tiempo, pudo dejar de fumar tabaco. Entrevistada por el programa de Nueva Zelanda, New Music Daily with Zane Lowe, de Apple Music, contó que abandonó el cigarrillo. “He parado por completo, llegaba a fumar 40 cigarrillos al día. Lo he dejado de golpe, pero ha sido muy duro. No volveré a fumar nunca, creo que vi a Jesucristo durante una semana. Fue terrible», contó describiendo la abstinencia. Superar esta adicción fue solo la primera de las novedades que Stefani Joanne Angelina Germanotta tenía para sus fans en 2020.
Superarse es parte de su naturaleza, y así como en aquel documental autobiográfico la artista mostró su costado más vulnerable, el de un cuerpo dolorido y el cansancio extremo, también se permitió una apertura total para contar el origen emocional de la enfermedad que la aquejaba. Sentada frente a la presentadora de TV estadounidense Oprah Winfrey, la cantante recordó: “De repente me convertí en una estrella y estaba viajando por el mundo, yendo de la habitación del hotel al garaje, de la limusina al escenario, y nunca lo enfrenté, y de repente comencé a experimentar este increíble dolor intenso en todo mi cuerpo. Eso imitaba la enfermedad que sentí después de ser violada”.
Sin muchos rodeos, la camaleónica estrella se sinceró sobre un tema que la aquejaba psicológica y físicamente, y del que se va sanando. Aunque las secuelas de aquel ataque sean inevitables, resetear está en su ADN y, con 33 años (cumple 34 este 28 de marzo), Lady Gaga sigue siendo un ejemplo de superación y evolución. Los cambios personales traen consigo nuevos aires musicales y su nuevo estado se transforma en canciones.
Chromatica, su nuevo disco
La cantante estrena material después de mucho tiempo, aunque estuvo activa como actriz en el exitoso film del que fue protagonista, A Star Is Born. Chromatica sale el 10 de abril y es el álbum que llega, después del adelanto en forma de single, “Stupid Love”. Este es su sexto disco de estudio y contó con la producción de BloodPop, un joven talento de 29 años, que ya trabajó con Gaga anteriormente y que es uno de los favoritos de Madonna, Justin Bieber y Beyoncé, entre otros.
LG-6, acrónimo que le pusieron sus “monsters” (así se denominan sus fans) a este LP, llega después de cuatro años casi en stand by. Tampoco es que estuvo inactiva: fue nominada al Oscar, ganó un Globo de Oro y también compuso la banda sonora de A Star Is Born, que protagonizó junto a Bradley Cooper. A pesar del éxito en el cine, “Stupid Love” es la primera canción original que la artista lanza desde Joanne (2016). A diferencia de aquel disco, este se presenta como mucho menos íntimo y más pop.
Con trajes espaciales, máscaras y colores estridentes, la estética de “Stupid Love” atrapa de entrada. Los estribillos y la coreografía terminan de hacer el trabajo. En la entrevista para el medio neozelandés, Germanotta explicó que este álbum “es sobre sanar y también sobre ser valiente”. Y de vuelta se mezcla lo personal con los artístico: “Cuando hablamos de amor creo que es muy importante incluir también el hecho de que amar a alguien requiere de mucha valentía”.
Michael Polansky, su nuevo amor
Mientras quién sabe qué pasaba en su intimidad, la maniobra de distracción de Lady Gaga resultó exitosa. Así fue como, después de separarse de su novio y representante, Cristian Carino, la cantante avivó con caras sugerentes y una postura corporal analizada hasta el hartazgo, los rumores que alimentaban un romance (nunca probado) con su compañero en la ficción, Bradley Cooper. Un año después, justo cuando está saliendo su nueva canción y se prepara para estrenar su larga duración, el desconocido Michael Polansky llega a las concurridas redes sociales de Lady Gaga, que lo presenta en sociedad como su actual pareja.
El empresario de 41 años, dedicado a las finanzas y la tecnología, es quien acompaña en esta nueva etapa a la mega estrella del pop. “Nos lo pasamos muy bien en Miami”, puso ella en un posteo de Instagram, en la semana del Super Bowl, donde fueron juntos. Esta vez ella no cantaba (como lo había hecho en 2007) e iba en plan “chica común”, un lugar en el que se siente cómoda. Sentada en la falda de Polansky para la foto de Instagram, a Lady Gaga se la vio enamorada, vulnerable, querida. Aunque se pinte el pelo de rosa y se ponga cristales en la cara, ella es una chica más y así le gusta mostrarse.
El empresario está muy lejos del show business y, según trascendió, se habrían conocido en una fiesta privada, hace pocos meses. Las relaciones de Gaga son noticia, como todo en su vida. El año pasado, la artista había estado saliendo con Dan Horton, un ingeniero de sonido de su entorno. Mucho antes, uno de los primeros novios que se le conocieron fue Rob Fusari, el primer productor con el que trabajó y quien fue parte responsable del éxito de Poker Face (2008). Las cosas terminaron raras y años después de haberse alejado, Fusari la demandó por más de 20 millones de dólares. Incluso llegó a decir que el nombre “Lady Gaga”, le pertenecía.
Los amores de Germanotta siempre llaman la atención, al igual que todo lo que la rodea a ella. Luc Carl fue su novio por seis años, se conocían desde antes de que fuera muy famosa y llegaron a comprometerse, pero en 2011 cortaron todo tipo de vínculo. Otro con el que llegó a comprometerse fue con el actor y modelo Taylor Kinney, pero tampoco prosperó. Polansky no tiene nada que ver con el mundo del espectáculo, ni con su carrera, de modo que quizá ahora sí pueda terminar siendo una chica común. Aunque ella sea una estrella con millones fanáticos en todo el mundo y él un poderoso e influyente empresario con una ex novia muy buena onda que escribe sobre él y su nueva pareja en el New York Times.