«Pueden creer que soy tan tonta que me cuesta decir el año 2000, me sale 1900… eso es la vejez», comenzó diciendo Amelita Baltar (78) en el inicio de su programa, El nuevo rumbo (La 2×4, FM 92,7, jueves a las 21,00 horas). Fue el preludio de unos minutos angustiantes para la conductora, quien intentó sacar adelante su ciclo luchando al aire contra los síntomas de lo que terminó siendo un ACV.
«Estoy mal yo, estoy mal de… de cosas que…», intentaba decirle a la cantante uruguaya Olga Delgrossi, su entrevistada, quien del otro lado del teléfono le daba ánimo y trataba de transmitirle calma.
El motivo de la charla con Delgrossi, conocida también como La Dama del Tango, era el reconocimiento que tuvo la artista, galardonada con el Premio Graffiti por sus 75 años con el tango. Sin embargo, Amelita no lograba expresarse con normalidad.
Amelita Baltar en el Campeonato Mundial de Tango, en el Luna Park, en agosto de 2018.
Con serias dificultades para hilvanar sus frases, olvidando palabras, quejándose de los achaques de la edad y notablemente molesta por la situación, Amelita pidió disculpas una y otra vez hasta que terminó el reportaje de manera abrupta para dar paso a una tanda musical. Y Amelita ya no volvió al aire.
Una ambulancia trasladó a la cantante desde la radio, ubicada en el microcentro, hasta el sanatorio Finochietto donde la esperaba su hijo Mariano, preocupado por lo que estaba pasando con su madre.
Amelita en una gráfica de «El Nuevo Rumbo», su ciclo en La 2×4.
La genial artista, famosa por su interpretación del tango Balada para un loco, es dueña de una amplísima y consagrada trayectoria, mérito que le valió distinciones y premios a lo largo de toda su carrera.
Las últimas informaciones aseguran que se encontraba en el sanatorio realizándose estudios y a la espera de un diagnóstico para ver de qué manera continúa su tratamiento. El ambiente del tango y todo el espectáculo en general se mantiene a la expectativa por su pronta recuperación.
Fuente: Clarín