Por primera vez en su historia, el Museo del Louvre permanecerá abierto las noches del 21, 22 y 23 de febrero para acompañar los tres últimos días de la exposición temporal de Leonardo Da Vinci, la mayor del pintor renacentista, e imprimirle al cierre un tono de celebración.
El máximo templo francés de arte permanecerá abierto desde las 21.30 hasta las 8.30 de la mañana, con una entrada gratuita que habrá que reservar previamente a partir del martes 11 de febrero en la web del museo.
«Una exposición excepcional requiere un dispositivo excepcional. Para los visitantes es una ocasión única de ver y de volver a ver todas estas obras reunidas del genio del renacimiento», anunció su presidente, Jean-Luc Martinez, en la revistas Journal du Dimanche.
Según el directivo, se ofrecerán cerca de 30 mil entradas para estas tres nuevas franjas, una oportunidad para quienes se quedaron sin ver la muestra pues todas las entradas pagas ya estaban agotadas hasta su cierre, el 24 de febrero.
La exposición abrió sus puertas el 24 de octubre pasado y fue vista por miles de personas. AFP
«Es una forma de decirle a todo el mundo que el museo es para todos, es una ocasión para venir», añadió Martinez, que recordó que de sus 9,6 millones de visitantes en 2019, un 40 por ciento tuvo acceso gratuito al museo por ser menor de 18 años o menor de 26 y ciudadano de la Unión Europea.
La institución quiere mostrar un espíritu abierto y festivo en esta ocasión, por lo que ofrecerá café, té y magdalenas durante esas noches. Un modo de «desarrollar la hospitalidad», otro de los objetivos del presidente, y de celebrar el fin de la «aventura» que supuso reunir más de un decena de sus lienzos y un centenar de dibujos de Da Vinci para celebrar el 500° aniversario de su muerte en Amboise (Francia) en 1519.
De las 20 pinturas que se conservan del artista, el Louvre considera haber reunido prácticamente la totalidad de lo que se podía juntar, teniendo en cuenta que «La adoración de los magos» o el fresco de «La última cena» no pueden ser desplazados por su fragilidad.
La exposición, que abrió sus puertas el 24 de octubre, contó durante los primeros dos meses con el delicadísimo «Hombre de Vitruvio», un préstamo que estuvo momentáneamente bloqueado por la Justicia italiana.
Fuente: Clarín