Silencio en las salas y descanso de fotos para uno de los cuadros más famosos del mundo: La última cena, pintado por Leonardo Da Vinci no puede ser visitado. La obra está colgada en el convento de Santa María de la Gracia, en Milán. Y los museos del norte de Italia cerraron su puertas por precaución. El coronavirus está al acecho.
El aislamiento que afecta a ese país obedece a que ya se contabilizan 219 infectados y 7 muertos. Las autoridades temen que la situación empeore.
Completo. «La última cena», de Leonardo da VInci. Una de las obras de las que el público se ve privado a causa del coronavirus.
Claro que La última cena no está solo. En el norte de esa región italiana es donde se registra actualmente el mayor foco del brote por fuera de Asia: Lombardía, Véneto, Piamonte, Emilia Romaña y Lacio son algunos de los puntos del mapa que activan estrictos protocolos de salud y medidas extraordinarias para evitar el contagio.
Incluso el tradicional Carnaval de Venecia, que por estas fechas congrega a decanas de miles de turistas de todo el mundo, se suspendió para proteger a la población: en lugar de extenderse hasta el 25 de este mes, como marca la tradición, finalizó el domingo 23. En ese contexto -que empieza a parecerse a una temible distopía- también los museos evitan convertirse en sedes de propagación del virus que salió de China a fines de diciembre (allí hay 77 mil personas afectadas y se contabilizan unos 2.600 muertos).
Todos los museos e instituciones culturales en las regiones afectadas se han cerrado en estos días, incluido el Museo Correr, el Palazzo Ducale y la Colección Peggy Guggenheim en Venecia, así como el convento de la Fondazione Prada.
Los museos de las varias ciudades de Véneto y Lombardía recibieron incluso indicaciones puntuales de parte del gobierno italiano sobre cómo deben manejarse, y por tiempo indeterminado, en la medida que la ciencia no encuentre vacuna o antídoto contra el coronavirus. En la Argentina, entre tanto, se activan nuevos protocolos para los vuelos que llegan desde Italia.
En Italia. Todos los museos e instituciones culturales en las regiones afectadas se han cerrado, incluido el Museo Correr, el Palazzo Ducale y la Colección Peggy Guggenheim en Venecia, así como el convento de la Fondazione Prada y Santa Maria delle Grazie, que alberga La última cena de Leonardo Da Vinci, en Milán.
También en Francia, donde ya se registran doce casos de personas infectadas y los turistas chinos se encuentran en cuarentena, los grandes museos evalúan la posibilidad de suspender sus actividades y evitar el ingreso de público.
Abierto. El Louvre por ahora se puede visitar. / AP
Consultado por el diario Le Monde, el Museo del Louvre anticipó que no adoptó aún un protocolo ante el problema, aunque el Palacio de Versalles informó que, si bien aún no se han registrado cancelaciones firmes, sí fueron aplazadas las visitas grupales de las agencias de viajes para regular el flujo de visitantes: los turistas ahora tienen que inscribirse para integrarse a visitas guiadas.
Mientras que en Corea del Sur, que suma 833 infectados, los eventos políticos y culturales previstos para esta semana han sido cancelados, y el ministerio de Cultura anticipó el pasado lunes que los museos y bibliotecas nacionales cerrarán temporalmente.
La enfermedad provocada por el coronavirus también es la responsable del cierre del museo Studio Ghibli, uno de los más icónicos de Japón. La institución anunció en esta horas que ofrecerá un reembolso completo a aquellos que tengan reservas de entradas en febrero y marzo. En ese país se detectaron 93 casos, además de los 634 infectados a bordo del crucero Diamond Princess, atracado en el puerto de Yokohama.
Fuente: Clarín