Tampoco la alta concentración de estudios de animación, centros expositivos y ciclos formativos dedicados al cómic. El Festival Internacional de Banda Diseñada de este pequeño enclave medieval, evento cumbre de la ilustración en Europa y de los de mayor tradición en el mundo, transforma con arte el pulso de la villa, a la cual han viajado estos días artistas y editores argentinos para enseñar sus creaciones.
«Llegamos desde París en tren y nos encontramos con la estación llena de muñecos: Astérix y Obélix, Kid Paddle, superhéroes», cuenta Marcos Vergara, ilustrador y representante de Loco Rabia Editora. Calles, negocios, galerías, museos, librerías y edificios institucionales se han poblado un año más de muestras, afiches y personajes de viñeta en la edición número 47 del evento, que inauguró hoy el presidente francés, Emmanuel Macron -el Gobierno declaró el 2020 como el año de la Banda Diseñada en Francia-, y que finaliza el domingo.
El recinto del festival abarca varios pabellones: de venta de derechos de autor, grandes editoriales, sellos independientes y BD alternativa, jóvenes talentos, venta de originales y Manga City. Desde 1974, Angoulême congrega a los referentes mundiales del sector y sus 40.000 habitantes se quintuplican para estas fechas. La cita decana del género en Europa, que desde sus inicios ha contado con los más célebres historietistas: Meobius, Will Eisner, Jacques Tardi y un largo etcétera, es el lugar donde se engrana la maquinaria editorial, se generan contactos y ventas, acuden los más prestigiosos autores y se recompensa a los mejores trabajos del año editados en Francia con varios reconocimientos, entre los que destacan el Grand Prix, concedido a un autor por su trayectoria, y el Fauve d’Or, a la mejor publicación.
Thomas Dassance, editor de iLatina, sello especializado en historieta argentina y latinoamericana, comenta: «El festival genera mucha ebullición, recibe a miles de autores y editores del mundo porque es básicamente la mayor feria de venta de Europa y un lugar cada vez más importante en venta de derechos y relaciones con otras editoriales y actores de la industria del cine de animación y la televisión. Todo eso copa la ciudad transformándola por un rato en una especie de megalópolis de la historieta».
El contingente argentino que viajó a Francia comparte con LA NACIÓN sus expectativas y propuestas para los próximos días, en los que tendrán lugar mesas redondas, talleres de autor, firmas, conciertos dibujados, exposiciones y charlas magistrales en los pabellones y en distintos puntos de la ciudad. Para los editores y autores nacionales, Angoulême es una puerta para insertarse sobre todo en el próspero mercado francófono.
Ignacio Minaverry, nominado en la Selección Oficial. La publicación Dora. Amsel, Vogel, Hahn (Hotel de las Ideas), relato gráfico sobre el nazismo y la Segunda Guerra Mundial, de Ignacio Minaverry, fue elegida en su edición francesa como candidata en la Selección Oficial del festival. Sobre la nominación, el autor señala: «Me emocionó mucho porque es un reconocimiento al trabajo que le dedico a cada libro y, más en general, a la industria de la historieta argentina, que aguantó como pudo estos últimos cuatro años». Diego Rey, uno de los fundadores de Hotel de las Ideas, añade: «Minaverry está este año entre los grandes nombres de la BD y de la historieta mundial. Es muy importante este reconocimiento para él para seguir insertado en el mercado francés, que vende millones de ejemplares».
Sole Otero, residente en ‘La Maison des Auteurs’. La prolífica historietista argentina Sole Otero, reciente ganadora del Premio Internacional de Novela Gráfica Fnac-Salamandra Graphic por Naftalina -de próxima publicación- y autora de los títulos Poncho Fue, Intensa y Pangea, firmará ejemplares en el stand de Editorial Moebius. Otero fue dos veces residente en ‘La Maison des Auteurs de Angoulême’, casa donde una selección de dibujantes desarrollan proyectos a lo largo de un año y donde volverá a residir en 2020. «Angoulême tiene una gran concentración de dibujantes, un Museo de la Historieta, muchos estudios de animación y una universidad donde se estudia historieta y animación. Hay mucha gente joven con esos intereses y, como la ciudad es chica, eso sirve para concentrarse y trabajar. Es como un retiro», señala. Sobre el festival, añade: «Sirve para exhibir tus trabajos y supone un reencuentro para quienes compartimos las residencias, ya que todos vuelven para esta fecha».
Serigrafías de Liniers, José Muñoz y María Luque. Editorial Moebius, también galería de arte referencial especializada, lleva varios años acudiendo al festival. En su stand, exhibe los títulos de su catálogo, con algunos traducidos al inglés, como Amo el lugar donde vivo, Buenos Aires (Chikismiqui), The Tenebrae (Patricio Oliver) y Novela Gráfica (Sima, Isol), así como los de una exclusiva colección limitada de cuadernillos impresos en serigrafía, firmados y numerados por autores de la talla de Liniers (con la obra Crímenes Ejemplares), José Muñoz ( Tintas Negras), Lucas Varela ( Diablura) y María Luque ( Chamamé). «Angoulême es, desde hace dos o tres décadas, el festival más importante y prestigioso de la industria del cómic europeo y representa un acceso directo a posibles relaciones comerciales con los protagonistas más importantes del sector», opina Martín Ramón, director general de la casa.
Lucas Varela y la ciencia ficción. El dibujante argentino Lucas Varela, que reside en Francia, y el guionista Diego Agrimbau, presentarán su último libro L’Humain ( El Humano, que Hotel de las ideas publicará en abril en español) y firmarán dedicatorias en el stand de su editora francesa, la emblemática Dargaud. El festival también invitó a ambos autores a impartir una conferencia mañana sobre ciencia ficción en la banda diseñada. «Hablaremos del libro y de otros que hicimos en los que, a través de la ciencia ficción, proponemos indirectamente reflexiones sobre el presente», señala Varela.
Diego Agrimbau, Tumburus y Gato Gutiérrez. Diego Agrimbau también es coautor, junto a Ippóliti, de Planeta Extra, imaginario gráfico sobre las clases sociales en el futuro, que se presentará en el festival. A través de entrevistas acordadas, buscarán editores para sus propuestas, señala el guionista, a quien acompañan Juan Manuel Tumburus, con quien trabajó en Los ojos perdidos, suerte de fábula de terror gótico pseudoinfantil ambientada en la Primera Guerra Mundial, y Hernán Gato Gutiérrez, con quien editó años atrás El Campito (Loco Rabia) y con quien presenta ahora Canción de Amor Irónica, una historia sobre los problemas de pareja con tinte policial. Para Agrimbau, Angoulême es la posibilidad de extender la difusión de sus obras y de estar cerca por unos días de los creadores más destacados. «Hay muchísimas actividades, charlas, muestras y salidas nocturnas con los autores, que para muchos es de lo más interesante del festival», apunta.
Clásicos argentinos, en francés. iLatina es una editorial creada en 2019 con sede en Francia por Thomas Dassance -francés radicado en Argentina-, que edita material latinoamericano para ese mercado. Sus publicaciones se remiten principalmente a grandes clásicos. Con stand propio en el festival, exhibe títulos de prestigiosos artistas de este lado del océano, como Cacho Mandrafina y Quique Alcatena, novelas gráficas de jóvenes autores como Notas al pie (2019), de Nacha Vollenweider, y otros títulos como Evaristo, de Francisco Solano López y Carlos Sampayo, y Crónicas amerindias, de Quique Alcatena y Gustavo Schimpp. En marzo publicará el primer recopilatorio de las aventuras de Alvar Mayor, de Carlos Trillo y Enrique Breccia, y, en mayo, un libro de ensayos gráficos y relatos periodísticos de Jorge González. «ILatina busca darse a conocer y Angoulême es el primer paso para conectarse, negociar derechos y generar ventas», señala Dassance.
Once años de Loco Rabia. Creada por el guionista Alejandro Farias y el dibujante Marcos Vergara, la editorial Loco Rabia lleva al papel la producción de autores contemporáneos, consagrados e independientes de historietas. Vergara dibujará en vivo y firmará ejemplares en el stand de ILatina y prevé conversaciones con colegas de varios países para mostrar el frondoso catálogo de Loco Rabia. «Tras once años de vida, la editorial tiene la satisfacción de tener una mayor presencia en el mercado local y de haber llamado la atención en el internacional, razón por la que nos han contactado varias editoriales europeas para mantener reuniones. Además, nuestro catálogo de títulos, más de 130, tendrá la chance de ser observado de cerca en una oportunidad hermosa para seguir creciendo», señala el dibujante.
Estudio Haus. Fundadores del sello La Productora, Carlos Aón, Gervasio y Jok crearon en 2001 un espacio profesional dedicado a la ilustración y la historieta, Estudio Haus. En Angoulême, firmarán ejemplares y se proponen cimentar contactos con los editores franceses, daneses y chinos con los que trabajaron recientemente, abrir puertas y ofrecer el talento local para el mercado francés. Jok se reunirá con un editor de la prestigiosa Editions Mosquito, que lanzó al mercado en 2019 su libro 40 Cajones, ya traducido a diversos idiomas, y tendrá encuentros con editoras chinas y francesas por el lanzamiento internacional de su novela gráfica Sea of Dreams, y Gervasio negociará la compilación de la serie erótica Bathory. «Nuestro cronograma incluye más de 25 citas para difundir nuestros proyectos», señala Jok.
«El noveno arte, hoy: cambio de paradigmas». Con este título, el director artístico de Angoulême, Stéphane Beaujean, analiza en la carta de presentación del festival el lugar que ocupa hoy la historieta. «En los últimos quince años, el cómic se llevó al cine y hay explosión de focos emergentes, multiplicación de géneros, estilos y audiencias. Angoulême se presenta como el único lugar donde se cruza toda la producción internacional, pasada, presente y futura, y Francia ocupa un lugar único, con 700 publicaciones en 1995 a más de 5.000 en 2005. Con veinte años de crecimiento extraordinario hasta hoy, los cómics son la excepción del sector del libro gracias a una nueva escena editorial y artística. ¿Y si la historieta estuviera en fase con el siglo XXI? Nadie puede decir aún qué arte encarnará la era digital (¿el videojuego?) o si está por inventarse, pero parece seguro que la imagen es el verbo de estos tiempos y la historieta podría encarnar brillantemente la adaptación a estas nuevas interacciones humanas».
Programa de Angoulême. La mangaka japonesa Rumiko Takahasi, ganadora del Grand Prix de 2019, preside este año el festival, edición que tiene entre sus artistas invitados a Catherine Meurisse y Charles Burns, con exposiciones dedicadas a Lewis Trondheim, Pierre Christin (co creador de Valerian), Robert Kirkman (creador de The Walking Dead), Jean Frisano, el manga de culto Gunnm, Wallace Wood y, entre otros, a Edmond-François Calvo, maestro de la fábula.
José Muñoz, el único argentino ‘Grand Prix’. Solo un argentino ganó el Gran Premio de Angoulême: José Muñoz (en 2007), ilustrador de Alack Sinner, clásico del género policíaco gráfico con el que el autor también obtuvo en dos ocasiones, en 1978 y 1983, el Fauve d’Or. Carlos Nine recibió asimismo este último reconocimiento por ‘ Le canard quit amait les poules’ en 2001. Entre las publicaciones premiadas en casi medio siglo de historia del festival figuran Corto Maltés (Hugo Pratt), en 1976; Mauss (Art Spiegelman), en 1988; V de Vendetta (David Lloyd), en 1990; Ibicus (Pascal Abaté), en 2000; Pollo con ciruelas (de la iraní Marjane Satrapi), en 2005; y Aquí, historia en la que el estadounidense Richard McGuire imagina lo que ha ocurrido en el espacio de una habitación a lo largo de cientos de miles de años. En 2014, Argentina contó con un stand institucional propio en el festival por los 60 años de carrera de Quino y el 50 cumpleaños de Mafalda. En esa ocasión, Liniers compitió con Macanudo en la Selección Oficial.
Fuente: Cecilia Martínez, La Nación