En su “librito”, como él lo menciona, se puede volar a la altura de los cielos de Iruya, donde se “emerge de las grietas del llanto”, o escuchar sin verlo al canto del crespín, adentrándonos a la leyenda del amado o, simplemente, volar bajito y sentir “el palmoteo de sábanas danzantes” que, en su imaginario, eran aquellas siestas de verano interminables con el alambre infinito susurrando con el viento y los aromas de naranjos y moras y pisingallos.
No faltan sus alusiones comprometidas a problemáticas arraigadas en él, como son la inclusión; los niños víctimas del holocausto y toda injusticia mundana; su pasaje de gratitud infinita a la Mujer (madre y maestra) y a los postergados jornaleros y marginados de siempre.
Reivindica su fe en Cristo, pero desclavado y justiciero; se cuestiona y proclama su deseo de un mundo mejor, en todos sus aspectos, aludiendo a la autodestrucción humana.
«Tiempos de Hojalata», de Mauricio Passadore, tendrá su presentación oficial el sábado 18 de enero, en el Museo “Carlos Anadón“, en Victoria, Entre Ríos.