En su edición digital, la Real Academia Española (RAE) anunció una nueva modernización del diccionario que incluye en esta ocasión 4.074 novedades, entre palabras nuevas y actualizaciones de acepciones. Espóiler, dana, barista y rapear son algunos de los conceptos que ingresaron este martes al listado consultado por millones de hispanohablantes.
De «machirulo» a «no binario», las nuevas palabras en el Diccionario de Lengua Española
Una de las palabras que ingresó en esta ocasión fue dana, que designa a la depresión aislada en niveles altos, un fenómeno que deja torrenciales inundaciones como las que a finales de octubre provocaron 230 muertos en España, casi todos ellos en la región de Valencia.
En esa línea, la RAE añadió palabras provenientes del mundo del cine y la televisión, como espóiler y temporada, en su acepción de conjunto de episodios de una serie, y del deporte, como bicicross, fitness y capoeira.
También agregó bastantes conceptos provenientes de la gastronomía, como barista, frapé, umami y wasabi, y de la música, como blusero, rapear y funk.
Como las actualizaciones se trabajan con las academias de la lengua latinoamericanas, se incluyen palabras comunes en esos países, como azotehuela, patio interior de una vivienda en México; posnet, como se conoce en varios países al aparato que permite pagos con tarjeta; y parrillar, como en Chile se le dice a asar algún alimento en una parrilla.
Otros términos que se añadieron son teletrabajar, macroencuesta y humanizador, entre otros tantos.
El español de América cobra un protagonismo especial con la incorporación de regionalismos como “parrillar” o «posnet» y extranjerismos como “sulky”, utilizados en el Río de la Plata. Este enfoque refuerza el carácter panhispánico del DLE, adaptándose a los lectores de todo el continente.
Santiago Muñoz Machado, director de la RAE y presidente de ASALE, lideró la presentación realizada ayer martes, mientras que Dolores Corbella destacó los aportes del español de América. Además, Elena Zamora, responsable del Instituto de Lexicografía, profundizó en las mejoras técnicas para hacer más intuitiva la navegación por esta obra fundamental.
Cabe recordar que, en su versión electrónica, el diccionario no solo amplía su contenido, sino que también rediseña su aspecto para facilitar la consulta. Con un buscador más visible, accesos rápidos y un diseño optimizado, la herramienta se convierte en un aliado indispensable para estudiantes, docentes y amantes del idioma. Además, las aplicaciones móviles permiten explorar este recurso desde cualquier dispositivo, manteniendo siempre la riqueza y versatilidad del idioma español. Y las duda suelen ser despejadas con consultas de los lectores en las redes sociales de la RAE.
El detalle sobre las palabras que entran en el ‘Diccionario de la lengua española’
La RAE explicó las novedades de la actualización 23.8, entre las que están las expresiones unidad móvil, zona de confort y voto de castigo, así como la adición en el término chorreo del significado como bronca o rapapolvo
Como ya es tradición por estas fechas navideñas, la Real Academia Española (RAE) presentó las novedades del Diccionario de la lengua española (DLE), en su versión electrónica 23.8. Entre las palabras que entran en el Diccionario destacan espóiler (del inglés spoiler), dana, sérum y teletrabajar. A otras se les añaden significados, como chorreo, que agrega el de “bronca, reprimenda o rapapolvo”. Además, se incorporan expresiones, como centro de salud, unidad móvil, zona de confort y voto de castigo, entre otras. El director de la RAE y presidente de la Asociación de Academias de la Lengua Española (Asale) —son 23 en todo el mundo—, Santiago Muñoz Machado, ha informado de que en total son 4.074 las modificaciones, “que no son novedades absolutas, sino que incluyen también variaciones, rectificaciones o supresiones de artículos”. “Las adiciones son 609, mientras que las enmiendas o ratificaciones, 1.304″, ha explicado.Más información
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Muñoz Machado ha anunciado que “el próximo año se empezará a preparar la 24ª edición del Diccionario, que se presentará en 2026, la versión electrónica será la 24.0″. La voluntad del director es que “también se publique en papel, aunque lógicamente en una versión más reducida”. En el Diccionario actual hay 94.000 entradas y cuando se anuncie la siguiente edición, en otoño de 2026, “esta permitirá navegar por todo la versión web, sin las limitaciones que hay actualmente”, ha indicado la académica Dolores Corbella.
Entre las novedades se destaca espóiler, la “revelación de detalles importantes de la trama o desenlace de una obra de ficción, que reduce o anula el interés de quien aún no los conoce”. ¿Una definición que excluye las obras de no ficción? En el ámbito televisivo hay otro cambio, que se añade a la palabra temporada la acepción como “conjunto de episodios de una serie o programa”.
Un término por desgracia muy usado en las últimas semanas, dana, se fija como “la depresión en niveles altos de la atmósfera que se mueve de forma independiente y puede producir grandes perturbaciones con precipitaciones muy intensas”. Esta voz, que se debe escribir en minúscula, surge como acrónimo de “depresión aislada en niveles altos”.
Entre las expresiones, ya muy conocidas, se incorporan: unidad móvil, que es el vehículo que, provisto del equipo necesario, se utiliza para prestar servicios especializados; puede ser una unidad móvil sanitaria, de radio, de televisión. Zona de confort se refiere al estado mental o situación en que prevalece la sensación de seguridad y de comodidad con lo conocido; mientras que voto de castigo es el que se concede a una opción con el propósito preferente de perjudicar a otra.
Algo tan habitual ya en las vidas de las personas como teletrabajar se añade también, con el significado lógico de “trabajar en régimen de teletrabajo”. Mientras que sérum se introduce como “líquido más o menos denso, de efecto reparador, revitalizador, hidratante, usado como cosmético”.
La responsable del Instituto de Lexicografía de la RAE, Elena Zamora, ha subrayado que el desarrollo tecnológico aporta un importante número de palabras, como aerotermia (tecnología que aprovecha la energía contenida en la atmósfera para proporcionar calefacción). También, granularidad, usada en varios ámbitos, como grado de detalle de una información. Sobre las ciencias de la salud, odontología incorpora la noción de “salud bucal”, que va más allá de padecer un dolor de muelas. Siguiendo con la tecnología, entran a formar parte del Diccionario desarrollador, el que concibe o implementa programas informáticos; o escalabilidad, un polisílabo usado en economía e informática como cualidad de escalable, es decir, que tiene capacidad para crecer y desarrollarse.
La gastronomía es otro de los ámbitos en los que cada año suele haber noticias. Esta vez se añaden: barista (persona experta en preparar café o la que atiende en un bar), frapé (bebida que se prepara con hielo picado o se sirve muy fría), infusionar (como reposar en agua hervida ciertos frutos o hierbas aromáticas), tabulé (el plato de Oriente Próximo a base de sémola de trigo, tomate, cebolla, perejil…) o wasabi (la raíz comestible de sabor muy picante, originaria de Japón).
El mundo de la música, igualmente, suma voces, como blusero, relativo al blues, que lo compone o interpreta; rapear, que es cantar o interpretar a ritmo de rap. En cursiva se incorpora el anglicismo groupie, para el o la fan que acompaña a un cantante o grupo de manera incondicional en sus actuaciones; e indie, sobre el cine o música independiente, producido al margen de grandes estudios y compañías. Y si hablamos de deporte, nos encontramos con bicicross (así, con dos eses y sin tilde) o capoeira, el arte marcial brasileña. También entran, pero en cursiva, palabras como fitness o full contact.
Asimismo, hay un grupo de polisílabos que se unen, relacionados con distintas áreas, como desendeudamiento, o sea, liberarse de las deudas; dramaturgista, la persona que colabora con el director en el análisis y realización de un espectáculo; musealizar, el verbo que se usa cuando hablamos de transformar en museo un lugar de interés cultural o, también, convertir algo en pieza de museo. La voz humanizador no estaba en el Diccionario. Ahora llega como “que humaniza”, por tanto, hacer humano o afable algo.
Dolores Corbella ha subrayado en su intervención que este es “un diccionario panhispánico”, por lo que ha enumerado ejemplos aportados por las academias americanas. Así, la chilena solicitó que se añadiese parrillar, con el significado de asar en una parrilla un alimento. Y aunque el tango Cambalache tiene noventa años y en él se decía que siempre ha habido “chorros”, ahora se suma esta voz con el significado de ladrón y estafador. La azotehuela, como se llama en México al patio interior de una vivienda, también entra.
Por último, Zamora ha presentado la nueva imagen de la web del Diccionario, “más moderna y con sus contenidos mejor estructurados; se ha buscado mayor atractivo visual”, en el que destaca un aumento del tamaño de letra. El buscador de palabras encabeza la página y se mantienen varias funcionalidades, como la búsqueda por expresiones, pero más destacada. También sigue, pero resaltada, la palabra del día para la RAE. Una novedad es un apartado con enlaces a aplicaciones móviles para que los usuarios puedan descargarse en sus dispositivos el Diccionario.
Fuente: El País.