En el discurso de la recepción del premio, Oates se mostró agradecida, al tiempo que aseguró que implica «obligaciones» en su tarea como escritora, como «hablar por aquellos que no pueden hablar por si mismos», por «aquellos que han sido silenciados» o «por los perdedores y no ganadores, aquellos que no han tenido suerte».
Autora de libros como «La hija del sepulturero», «Memorias de una viuda» o «Ave del paraíso», Oates (Lockport, Nueva York, 1938) tiene obra de poesía, ensayos y más de 50 novelas, y es considerada una de las grandes figuras de la literatura contemporánea estadounidense.
El jurado le otorgó el galardón por su «voz inconfundible» y por un trabajo literario que «dicta nuevos horizontes creativos y denota una ruptura continua de los límites», según señaló el texto del jurado, de acuerdo a la información de la agencia de noticias Efe.
Desde 1963, el Foro Internacional del Libro de Jerusalén distinguió a destacados escritores como los argentinos Jorge Luis Borges y Ernesto Sabato, además de Mario Vargas Llosa, Simone de Beauvoir, JM Coetzee, Eugene Ionesco, Bertrand Russell y Arthur Miller, entre otros.