Esta obra lo convirtió en el primer autor francés en ganar este premio que distingue a las mejores ficciones traducidas al inglés, entre cuyas finalistas estaba la argentina Mariana Enriquez.
«Esta historia de guerra, amor y locura tiene un poder aterrador. El protagonista es acusado de brujería y hay algo extraño en la forma en que la narrativa funciona en el lector», dijo la historiadora Lucy Hughes-Hallett, presidenta del jurado que eligió el libro de Diop entre las seis que integraban la lista corta anunciada el 22 de abril y con Enriquez como una de las integrantes.
«Los peligros de fumar en la cama», el libro de cuentos de Enriquez en el que presenta una docena de relatos que abordan el terror contemporáneo a partir de un trabajo con problemáticas sociales, llegó a esta instancia final con la traducción de Megan McDowell y la edición de Granta Books.
Esta lista corta estuvo integrada también por Maria Stepanova por «En memoria de la memoria», traducido del ruso por Sasha Dugdale (Ediciones Fitzcarraldo); Éric Vuillard por «La guerra de los pobres» traducido del francés por Mark Polizzotti (Pan Macmillan, Picador); Olga Ravn por «Los empleados», traducido del danés por Martin Aitken (Lolli Editions) y el escritor chileno Benjamín Labatut por «Cuando dejamos de entender el mundo», traducido del español por Adrian Nathan West (Pushkin Press).
El anuncio realizado por Zoom, se pudo seguir por la cuenta de YouTube de la entidad que otorga el premio desde las 14 y contó con una breve presentación de cada trabajo seleccionado a cargo de los autores y traductores y la lectura de fragmentos de las obras a cargo de tres actores: Fiona Shaw, Lucy Phelsp y Ken Nwosu.
El International Booker Prize se otorga cada año a una obra que se traduce al inglés y se publica en el Reino Unido o Irlanda y busca fomentar más publicaciones y lecturas de ficción de calidad de todo el mundo y promover el trabajo de los traductores.
Se trata de un premio dotado de 50.000 libras (unos 68.000 dólares) que se reparten equitativamente entre el escritor y el traductor del libro ganador, mientras que cada uno de los autores que llegaron a esta instancia finalistas recibirán 1.000 libras (unos 1.300 dólares).
Este año el jurado estuvo integrado por Hughes-Hallett, la periodista y escritora Aida Edemariam; la escritora Neel Mukherjee, nominada al Premio Booker en 2014, con The Lives of Others; la profesora de Historia de la Esclavitud, Olivette Otele; y el poeta, traductor y biógrafo George Szirtes.
En su fallo destacaron la «prosa encantada y la visión oscura y brillante» de un libro que dijeron que sacudió sus emociones y los dejó sorprendidos. «Nos había hechizado», destacó Hughes-Hallett al informar el fallo.
Es el segundo año consecutivo que se incluyen autoras argentinos entre los nominados, ya que el año pasado estuvo Gabriela Cabezón Cámara por «The Adventures Of China Iron» («Las aventuras de la China Iron») y Samanta Schweblin por «Little Eyes», como se tradujo su novela «Kentukis». Mientras que en 2018, Ariana Harwicz fue seleccionada por su ópera prima, «Matate amor».