La RAE develó el misterio: según explicó en su sitio web oficial y más tarde con un video en TikTok, ese símbolo se denomina como tilde o virgulilla. Es un trazo distintivo y único del español que indica la entonación con la que se debe pronunciar cuando integra una palabra.
El origen de la virgulilla
Los inicios de este símbolo se remontan a la Edad Media, cuando los monjes copistas (personas que se dedicaban a copiar manuscritos en la Europa Medieval) solían utilizar abreviaturas para ahorrar tiempo y pergamino, ya que era demasiado costoso. Entonces, para representar el sonido nasal comenzaron a aplicar la doble “n” (nn) en los textos que transcribían.
Lo cierto es que esta conversión resultaba engorrosa y muchas veces confundía a otros hablantes, por lo tanto, se decidió incluir una tilde sobre esa letra para simplificar la lectura. Es así como nació la Ñ, según se definió en un artículo del medio español El Confidencial.
Recién en el siglo XIII, durante el reinado de Alfonso X el Sabio, se establecieron las primeras reglas ortográficas del castellano, en donde se mencionó la utilización de la Ñ. Sin embargo, no fue hasta 1492 que Antonio de Nebrija la incluyó de manera oficial en el abecedario español.
Con la obligatoriedad e incorporación en las palabras y el idioma, se extendió en los tiempos de la conquista en América y los pueblos indígenas la adoptaron para sí. Al igual que en otros territorios que pertenecieron al Imperio español como Filipinas, donde su existencia también influyó en el habla y la escritura.
Por lo tanto, la virgulilla es un símbolo que identifica a los hispanohablantes, con una historia detrás que se remonta hace varios siglos, en la que surgió como una respuesta ante una carencia y dificultad en el momento de la escritura.
Por qué es importante el uso del diccionario de la RAE
Del mismo modo que la Real Academia Española explicó el uso y origen de la virgulilla, lo replica con otras cuestiones vinculadas al idioma. Es por este motivo que permite a los hablantes hispanos y estudiantes de la lengua castellana, aprender y aplicar de forma correcta cada palabra para evitar confusiones o mensajes mal formulados.
Fuente: La Nación