Peter Pan: pesadilla en la tierra de Nunca Jamás (Peter Pan’s Neverland Nightmare, Estados Unidos/2025).
Sí, es lo primero que uno piensa: otra película más de terror con personajes clásicos popularizados por Disney. Como ya hemos dicho varias veces, esto de aprovechar que los derechos de estos pasan a dominio público para convertir a íconos infantiles en asesinos despiadados, ya es prácticamente un subgénero dentro del terror.
Dirección: Scott Chambers. Guion: Scott Chambers. Fotografía: Vince Knight. Música: Greg Birkumshaw. Edición: Dan Allen. Elenco: Martin Portlock, Megan Placito, Kit Green, Peter De Souza-Feighoney, Teresa Banham, Olumide Olorunfemi, Campbell Wallace, Nicholas Woodeson, Hardy Yusuf. Duración: 89 minutos. Calificación: apta para mayores de 16 años. Distribuidora: BF Paris. Nuestra opinión: buena.
Presencia (Presence, Estados Unidos/2025).
Dirección, edición y fotografía: Steven Soderbergh. Guion: David Koepp. Música: Zack Ryan. Elenco: Lucy Liu, Chris Sullivan, Callina Liang, Eddy Maday y West Mulholland. Duración: 84 minutos. Calificación: apta para mayores de 13 años. Nuestra opinión: muy buena.
En 1947, el actor y director Robert Montgomery rodó una adaptación de la novela de Raymond Chandler, La dama del lago, enteramente en plano subjetivo. Es decir, cuando la cámara toma el punto de vista de un personaje, generalmente el protagonista, que en ese caso era el detective Philip Marlowe. Este procedimiento buscaba volcar a la gramática cinematográfica la conspicua primera persona de Marlowe en las novelas de Chandler. Aunque el recurso se haría muy popular algunas décadas después en los videojuegos conocidos como “First person shooter”, muy rara vez el cine volvió a usarlo por el metraje completo de un film. La razón es evidente: deja atada a la película a un conjunto de obstrucciones (los personajes deben mirar a la lente, no puede haber cortes dentro de una secuencia, los movimientos de la cámara quedan encadenados a la limitada movilidad de un cuerpo humano) que lentifican, complican y rarifican innecesariamente el relato en nombre del subrayado de un punto de vista que puede ser alcanzado de modos más sutiles.
Novocaine: sin dolor (Estados Unidos/2025).
Cuando parecía que el universo de los superhéroes estaba agotado en sus infinitas desviaciones -incluyendo el anunciado regreso de Marvel a sus viejas estrellas, la saga de villanos reformados como el Guasón o el Pingüino, y las impredecibles aventuras de Deadpool y otras figuras lindantes con la autoparodia-, el derrotero heroico de Nathan Caine (Jack Quaid) llega para darle una posible vuelta de tuerca. “Novocaine” -en referencia a la propiedad anestésica de la novocaína- es el apodo burlón de Nathan desde su adolescencia, cuando sus padres descubrieron que padecía un trastorno genético que lo hacía insensible al dolor. Desde entonces fue el blanco de los golpes de sus compañeros de clase y el frágil tesoro de sus preocupados progenitores. A sus 30 años, Nathan ha sobrevivido a los peores pronósticos y es subgerente de un pequeño banco en San Diego. Es solitario e introvertido y su metódica rutina de alarmas y amortiguaciones lo preserva de un accidente sin dolor, pero fatal.
Dirección: Dan Berk, Robert Olsen. Guion: Lars Jacobson. Fotografía: Jacques Jouffret. Edición: Christian Wagner. Elenco: Jack Quaid, Amber Midthunter, Ray Nicholson, Jacob Batalon, Conrad Kemp, Evan Hengst. Calificación: Apta para mayores de 16 años. Distribuidora: UIP. Duración: 110 minutos. Nuestra opinión: buena.