Después de años de idas y vueltas, la Cámara de Apelaciones validó el convenio urbanístico entre el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y la empresa en bienes raíces Inversiones y Representaciones S.A. (IRSA). Con este visto bueno, la compañía podrá finalmente llevar a cabo su proyecto que sumará a la Costanera Sur nuevas viviendas, oficinas, comercios, escuelas, sanatorio y un parque público.
Conforme a lo acordado, el Gobierno porteño modificó la normativa para habilitar la construcción de edificios frente al Río de la Plata a cambio de que la empresa entregue al dominio público 48 de las 71 hectáreas para la realización de un espacio verde público.
Cómo será el proyecto
Según había anunciado el presidente de la desarrolladora, Eduardo Elsztain, el emprendimiento contempla una inversión total de US$1800 millones en un plazo de entre 15 y 20 años.
En detalle, el plan implica laconstrucción de 6000 unidades de vivienda por un lado y, además, se realizarán oficinas, locales comerciales, escuelas, sanatorio y un paseo peatonal costero. Las construcciones estarán emplazadas en un terreno de 71,61 hectáreas, de las cuales se puede construir en aproximadamente 895.000 m².
“Apuntamos al público que hoy vive en Buenos Aires. Estamos pensando en un desarrollo de 15.000 o 20.000 habitantes. No es un target triple A, sino que va a estar dirigido a la clase media de la ciudad”, señaló el presidente de la empresa dueña de los principales shoppings del país.
Idas y vueltas
Si bien la empresa es dueña del terreno desde 1997, una serie de impedimentos habían paralizado los planes para realizar el desarrollo. Allí se iba a llevar a cabo originalmente la Ciudad Deportiva de Boca Juniors en la Costanera Sur, proyecto que nunca llegó a buen término y dejó por más de 20 años las tierras en desuso. Para 1991, la sociedad Santa María del Plata le compró el predio a Boca por US$22 millones y no fue hasta 1995 que se realizó un concurso para diseñar un plan maestro. Dos años después, IRSA se hizo de los terrenos y el plan por US$51 millones.
Pero el masterplan de la empresa no cuadraba con los permisos de la zonificación en ese lugar. Fue por eso que la ciudad le concedió un convenio urbanístico para modificarla. Estas son herramientas de gestión urbana que formalizan un acuerdo y definen compromisos entre actores del sector privado y el Estado para realizar, dentro de un determinado plazo, intervenciones en la ciudad que generen beneficios mutuos. Se trata de un instrumento que se implementa en toda la Argentina y en distintas partes del mundo.
A fines del 2021 se había publicado en el Boletín Oficial la ley con que la Legislatura porteña aprobó la normativa para el desarrollo de “Costa Urbana”. Sin embargo, distintas entidades pidieron la nulidad del convenio a través de la presentación de un recurso de amparo ante el fuero Contravencional de la Ciudad por “la falta de participación ciudadana de forma previa a la firma del Convenio Urbanístico y la ausencia de la elaboración del Estudio Diagnóstico y la Evaluación de Impacto Final” en torno al emprendimiento. Eso frenó el proyecto hasta ahora, que la Cámara de Apelaciones anuló el recurso de amparo y lo habilitó.
Por ley, el anteproyecto para el espacio verde público lo define un concurso. “El amparo no suspendió los plazos del concurso sino que mientras estaba en la Justicia, seguimos avanzando. El fallo llega justo en un momento donde en pocos días se va a conocer el proyecto ganador. Mientras tanto, se alineó todo para que se pueda comenzar la obra en etapa cero″, dijo Álvaro García Resta, Secretario de Desarrollo Urbano de la Ciudad de Buenos Aires.
El año pasado, la empresa publicó un comunicado en el que informaba que destinará cerca del 70% de la superficie total del predio al desarrollo de espacios verdes públicos y aportaría tres parcelas adicionales, dos para el Fondo de Desarrollo Urbano Sostenible (FODUS) y uno para el Fideicomiso de Innovación, Ciencia y Tecnología del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, al cual también aportará la suma de US$2 millones en efectivo y la cantidad de tres millones de bonos soberanos (AL35).
Asimismo, la empresa se encargará de las obras de infraestructura y vialidades en el predio y realizará las creación del espacio público aportando hasta un total de US$40 millones junto con el mantenimiento cedido por 10 años o hasta completar la suma adicional de US$10 millones.
Fuente: La Nación