Después de muchos días de abstinencia algo te lleva a agarrar el teléfono y chatear con él o ella. Es tu ex o esa persona con la que saliste algunas veces y no te habló más. Sabés que no tenés que hacerlo, pero no podés evitarlo y ahí vas a chocarte contra la pared otra vez. Para evitarlo, la usuaria de Twitter Mica Baigun, encontró una divertida solución: cambiar el nombre con el que lo agendó en su teléfono y guardarlo con una advertencia: «No le hables».
La tuitera publicó una captura de pantalla de su teléfono mostrando esto y poco a poco se sumaron decenas de otros usuarios que contaron sus experiencias. Así se armó un exitoso hilo con las maneras más divertidas con que se agendaban a esas personas a las que no conviene escribirle.
Rata de vecindad, fue uno de los apodos más duros al momento de agendar a un exnovio
