A diferencia de lo que ocurría antes cuando los famosos deseaban esquivar las cámaras, evitar los paparazzis y mantenerse lo más alejado posible de la exposición y la opinión pública, en la era de las redes nadie quiere quedarse afuera de publicar sus mejores fotos, contar a dónde se fueron de vacaciones, mostrar qué tomaron el fin de semana y deleitar a sus seguidores con el plato que cenaron.
Las figuras del mundo del espectáculo lo hacen, por un lado, para mantenerse cerca de sus fans, aunque, también, avivan a base de publicaciones su contador de seguidores para atraer marcas y hacerles publicidad. Están en todo su derecho, por supuesto. Es un trabajo más. Sin embargo, el accionar de los haters, que escudados en el anonimato reparten impunemente su odio y su envidia, ha generado que muchos famosos decidieran alejarse de las redes sociales.
El último caso en el ámbito local es el de Sofía Morandi. A pesar de tener muchos seguidores fieles y clubs de fans, los haters ganaron la pulseada. «No voy a usar más Twitter, me saturó en un montón de aspectos. Este año tengo muchísimos proyectos y necesito estar con buenas vibras. Sé que si quieren seguir hablando podemos hacerlo por Instagram, les juro por Dios que voy a estar más activa y que vamos a hablar. Me voy a poner las pilas para que no perdamos contacto, es lo que menos quiero», dijo la ganadora del Bailando.
Otro ejemplo es el de Oriana Sabatini, que se cansó de las críticas en las redes. «Me harté de Twitter y me fui. Las redes sociales cuestan mucho, más si estoy pasando un momento difícil porque ahí todo el mundo comenta. Es re lindo no tener la presión de que te van a comentar todo lo que ponga, es bastante liberador», confesó la hija de Catherine Fulop en diálogo con El Espectador, el ciclo de CNN Radio Argentina. Aunque, bueno, solo duró unos días: ya volvió a publicar mensajes con regularidad.
En Instagram, por su parte, en muchas ocasiones los famosos no llegan a cerrar sus cuentas pero hacen uso de una de sus herramientas: prohibir los comentarios. Una decisión que fue adoptada en algún momento por Cande Tinelli, Eugenia la China Suárez y Wanda Nara, entre otras figuras.
«Perdón que saque los comentarios, sobre todo porque hay gente muy amorosa y se lo agradezco de corazón. Pero soy muy humana y tengo un límite de tolerancia a la agresión gratuita. Respeto las opiniones pero no la agresividad de la gente afectada. La agresividad genera más agresividad entre todos», les dijo la hija de Marcelo Tinelli a sus followers al tomar la decisión.
Por su parte, hay varias personalidades destacadas del espectáculo argentino que nunca tuvieron redes sociales. O, por lo menos, no usan su nombre para evitar ser reconocidos: ¿cómo saber si utilizan un alias si, precisamente, lo que desean es permanecer en el anonimato?
Uno de ellos es Guillermo Francella, quien al ser consultado al respecto en una ocasión por la revista Gente, razonó: «Estoy conectado, uso aplicaciones de mensajería instantánea, leo por internet, pero lo que no comulgo es con compartir mi vida privada y mi privacidad a través de las redes. Hacer un relato de mi vida, desde el desayuno hasta el momento de ir a la cama. Me pregunto a veces qué tendrá que ver eso conmigo».
Si bien es un usuario habitual de Instagram, Mario Pergolini siempre se rehusó a Twitter y Facebook. «La gran mayoría de gente que usa internet en Latinoamérica es para el Facebook, que tiene una gran ventaja para ellos y un gran problema para las audiencias: está basada en un algoritmo que dice ‘me gusta’ o ‘no me gusta’. Facebook nunca hará nada que no te guste, por lo tanto sacará lo que te moleste. Lo mismo en las noticias. En gran parte de Latinoamérica nos informamos según cosas que nos conforman. Las noticias que nos llegan a Facebook son las que nos agradan, por eso vivimos en dos mundos muy distintos», dijo el periodista en una nota con Luis Novaresio.
Pablo Echarri no tiene redes sociales y Nancy Dupláa solo usa Instagram. Durante el éxito de Graduados, la actriz salió a declarar con una foto con una inscripción que decía «no tengo Twitter«, cansada de los falsos usuarios que se hacían pasa por ella.
Marcela Kloosterboer, al igual que su colega, solo tiene Instagram. Y Natalia Oreiro, a pesar del pedido de sus fanáticos, siempre se mostró alejada de las redes sociales: «No creo ni que esté mal ni que esté bien, es algo que me sucede a mí. Es que en mi trabajo mis personajes hablan por mí, y en un punto terminás siendo medio esclavo cuando tenés una red social y no subís cosas. Al menos me pasa con los colegas. Es como que no logro entenderlo».
En una nota que brindó por este tema con Teleshow, Marina Calabró, que a pesar de su valor periodístico tampoco tiene cuenta en Twitter, manifestó: «A veces se torna demasiado cruel, duro, injuriante. A esta altura no te vas a espantar por una crítica o un comentario que marque un disenso o señale un error, pero hay tanto odio, tanta infamia, tanto insulto que no me resulta un terreno agradable. No tengo por qué exponerme a la agresión gratuita». Hablando de periodistas, Jorge Lanata es otro de los que no tiene cuenta en las redes sociales.
En el lado opuesto, hay figuras que, en lugar de evitar las redes sociales, redoblan la apuesta y enfrentan las críticas. Uno de ellos es Esteban Lamothe, quien no tiene problemas en contestarles a los odiadores seriales. «Les quiero decir al ejército de haters de Twitter que lo que opinan acerca de mi trabajo como actor y de mi nivel de belleza me chupa mucho los dos huevos. Dejen el celu, bobos, salgan de su casa. Paren de fracasar. Posta, se puede», dijo, en una ocasión. «Instagram es más del amor, Twitter es del odio», sostuvo el actor en una entrevista, explicando, de cierta manera, por qué muchos famosos prefieren una red social por encima de la otra.
Los casos internacionales
Millie Bobby Brown, la estrella de Stranger Things decidió irse a los 14 años de Twitter, cansada de las críticas. Sí, tan solo tenía 14 años. Dejó su cuenta en diciembre de 2017 y recién volvió a escribir en la red social el 27 de enero de este año. «Hola, los extrañé», publicó. Pero, tal vez, no estaba del todo convencida de esta decisión, ya que no volvió a aparecer.
Salma Hayek, por su parte, tampoco escribe en Twitter desde finales de 2017 y solo se quedó con su cuenta en Instagram, donde llega a casi 10 millones de seguidores.
La figura de Hollywood Kristen Stewart no tiene redes sociales. «Representan una forma de pisotear la vida de alguien sin darse cuenta», dijo al respecto.
A pesar de las innumerables cuentas que figuran a su nombre, Sandra Bullock tampoco tiene redes sociales y en una entrevista explicó su decisión: «No son una representación de nuestras vidas».
Brad Pitt, Angelina Jolie, Jennifer Aniston, George Clooney y Scarlett Johansson son otras de las grandes figuras de Hollywood que aún hoy se rehúsan a tener sus propias cuentas en las redes sociales.
Fuente: Infobae.