La mansión donde Leonardo DiCaprio filmó El lobo de Wall Street se vende y dejará de tener una curiosa función

Dinero, despilfarre y corrupción llenan las casi tres horas que dura El Lobo de Wall Street, la película protagonizada por Leonardo DiCaprio que en 2014 le valió una nominación el premio Oscar. La historia cuenta la vida de un corredor de bolsa estadounidense quien a su corta edad funda una exitosa agencia bursátil pero el juego sucio y las estafas lo llevan lejos de un buen puerto.

Durante su filmación, la producción paseó por varios lugares del mundo. Entre ellos, aterrizó a casi una hora en auto de Mahattan, Estados Unidos, en una propiedad que hoy en día está a la venta por US$10 millones. Más allá del paso del icónico actor, quien protagonizó allí una escena con Jon Favreau y Rob Reiner, este no fue el debut de la mansión en los sets en Hollywood. En el pasado, la propiedad había sido usada para rodajes cinematográficos, como por ejemplo para la serie La voz más alta protagonizada por Russell Crowe, Seth McFarlane, Sienna Miller y Naomi Watts.

Sin embargo, alquilar temporalmente el lugar para filmaciones no es su función principal. En realidad, hace muchos años que aprovecha sus extensos jardines para criar caballos de carrera y la cuenta ya lleva más de 100 entrenados en sus registros. Para llevar a cabo dicho entrenamiento, la propiedad cuenta con potreros, una pista de equitación, un establo con capacidad para 10 animales y una choza para almacenar herramientas. Por otro lado, ofrece diversos amenities destinados al entretenimiento y el relax, como por ejemplo una misma sala donde hay un spa alfombrado con camilla de masajes, sillón con televisión y una mesa para comer.

Además, para disfrutar de la naturaleza dispone de senderos ecuestres para pasear con los caballos y un jardín con huerta. En el exterior también hay una pileta de agua salada climatizada rodeada por un patio con sillones y sombrillas para disfrutar de un día de calor al aire libre. El paisajismo del espacio exterior -que se extiende por dos hectáreas- se completa con un estanque rodeado de piedras, plantas y árboles a un costado de la piscina.

La mansión principal tiene casi 1400 metros cuadrados y fue construida en 2010. Además de los seis dormitorios con pisos de madera y nueve baños revestidos con mármol, se pueden destacar la cocina gourmet, con isla integrada y banquetas un comedor formal y otro informal donde desayunar, varias salas de estar con diferentes estéticas, una suite de invitados, una oficina con televisión y un sótano con equipos de hidromasajes.

Para transportarse entre el primer y segundo piso de la casa, los invitados pueden optar por las escaleras o, si tienen alguna incapacidad en su movilidad, también pueden elegir el ascensor. Un detalle distintivo es que en toda la casa hay distribuidas seis chimeneas, preparadas para las bajas temperaturas que caracteriza a esa zona del país norteamericano en invierno.

Fuente: La Nación