La firma Mars One presentó este martes ante el Tribunal de Apelaciones de la ciudad suiza de Basilea -donde tiene su sede- un concurso de acreedores por no poder hacer frente a sus deudas.
La empresa reconoció que acumula una deuda de 1,1 millones de francos suizos (un poco más de un millón de dólares) y expresó su intención de alcanzar un acuerdo con sus acreedores para hacer frente a ella.
Así mismo, explicaron que la parte de la firma -Mars One Foundation- dedicada a las actividades sin fines de lucro, no se verá afectada por la quiebra, ni tampoco su proyecto de viajar a Marte en un futuro no demasiado lejano.
La empresa tiene un mes para revertir la bancarrota declarada ante el tribunal suizo. El procedimiento se inició formalmente el 5 de febrero.
La parte involucrada, Mars One Ventures, había suspendido su cotización en la Bolsa de Fráncfort (Alemania) en 2017, acusada de no cumplir con las regulaciones de ese mercado de valores cuando incrementó el número de sus acciones.
Los voceros de Mars One, sin embargo, aclararon que seguirán los contactos con distintas compañías y organizaciones con el fin de seguir preparando el viaje a Marte. Además prometieron profundizar en sus trabajos de divulgación para que el público masivo pueda acceder a nuevos conocimientos sobre el planeta rojo.
Hasta los Reyes de España, Felipe y Letizia, habían mostrado interés en el proyecto de ‘Mars One’ que prometía una recreación fidedigna de cómo será la primera colonia humana permanente en Marte. Este acercamiento al proyecto se dio en el marco de la última Feria internacional del Turismo en Madrid el pasado 23 de enero, en un stand donde se mostraba una cápsula espacial y llevaba por lema “De Cantabria a Marte”.
Desde sus inicios, la empresa no se ha vinculado nunca al sector aeroespacial sino más bien a la comunicación y la mercadotecnia, principalmente elaborando y vendiendo documentales sobre la selección de futuros viajeros a Marte y su paso por programas de entrenamiento y colonización.
Mars One fue creada por el ingeniero Bas Lansdorp, quien en 2013 abrió un proceso de selección abierto a todo el mundo que quisiera viajar a Marte y al que se presentaron 200.000 personas, incluso cuando no estaba garantizado el retorno de los elegidos a la Tierra una vez alcanzaran el planeta rojo.
Una de las principales vías de financiación del proyecto sería a través de ingresos publicitarios. En ese momento,Motomel, el fundador, Bas Lansdorp, aseguró que tenía un acuerdo con la productora de Gran Hermano para hacer un programa de televisión sobre el proceso de selección, en 2015 esa productora abandonó el proyecto.
“Tres años después la compañía aseguraba haber recaudado casi 800.000 dólares a través de cuotas y aportaciones de los candidatos. La viabilidad económica y técnica del proyecto siempre estuvo en duda. Lansdorp siguió adelante con el proyecto prometiendo nuevas rondas de selección para participantes mientras retrasaba la fecha de aterrizaje en Marte y sin que apenas hubiera detalles sobre cómo pretendía conseguirlo” informó ayer el diario español el País.
Fuente: Clarín