La japonesa Kane Tanaka celebrará este 2 de enero 119 años, ratificando su lugar según el libro Guinness de los récords como la persona más longeva del mundo, lugar que ocupa desde la muerte de su compatriota Chiyo Miyako, en 2018.
Tanaka sobrevivió a tres epidemias, la española (1918-1920), la del SARS (2004) y la actual del Covid-19. Invencible, Kane también superó airosa dos guerras mundiales, los efectos de la bomba atómica de Nagasaki e incluso un tumor a sus 103 años.
La mujer, que nació en 1903, fue, de hecho, un bebé prematuro. Fue la séptima hija del matrimonio formado por Kumakichi y Kuma Ota. El 6 de enero de 1922, cuatro días después de cumplir los 19, se casó con Hideo Tanaka, al que no llegó a conocer hasta el mismo día de la boda. El matrimonio tuvo cuatro hijos y adoptó a un quinto.
Tanaka reside en un asilo de ancianos en Higashi-ku, en la ciudad de Fukuoka (sudoeste), y goza de buena salud. El año pasado renunció a participar en los relevos de la antorcha olímpica de los Juegos de Tokio 2020 debido al incremento de los casos de Covid-19 en su país.
Lejos de renunciar a la vida social y a los desafíos intelectuales, tiene como pasatiempos el juego de mesa Othello, la caligrafía y el cálculo. También se mantiene en forma dando pequeños paseos por los pasillos de la instalación donde reside.
“Desde que llegué aquí, no tengo más remedio que trabajar duro, ¡haré lo mejor que pueda!”, dijo en una entrevista con una televisión japonesa.
Pese a gozar de una salud formidable que le permitió superar largamente el centenario, Tane se impuso a los 112 años seguir una dieta a base de arroz, pescado y sopa, además de beber mucha agua.
Aunque no por eso deja de darse sus gustos. Todavía tiene un gran apetito, le encantan los dulces y bebe tres latas al día de café, bebidas nutritivas y refrescos.
Tane nunca se cansa de repetir que su familia significa todo para ella. Y el secreto de su longevidad, asegura la mujer del récord, es dormir profundamente.
Fuente: La Nación