Espíritu olímpico: la mejor nueva música francesa para celebrar los juegos de París 2024

Una selección de rock alternativo, psicodelia, synth pop, nueva canción francesa y mucho más para musicalizar el inicio de los Juegos Olímpicos

Panache!, Mauvais Sang y Ofé

Para celebrar el inicio de los Juegos Olímpicos París 2024Nueva Música Ahora!, la playlist de novedades de Rolling Stone, llega con el mejor soundtrack de novedades, lanzamientos y artistas emergentes franceses, del rock alternativo a la psicodelia, pasando por la nueva canción francesa y hasta la respuesta continental al brit pop. Si estás buscando nueva música y si ya estás en mood olímpico, necesitás escuchar esta selección.

Mauvais Sang. El riff de guitarras distorsionadas en el comienzo, las intrigantes voces femeninas y el break de cuerdas neoclásicas, todo en apenas los primeros segundos de “Seine”, avisan que a Mauvais Sang no le faltan recursos ni desprejuicio a la hora de articularlos. El nombre del grupo, tomado de la gran película de Leos Carax de 1986, es otra pista acerca de las inquietudes y el tono del proyecto. ¿Canción Extraoficial del Lado B de estos Juegos 2024 junto al Sena?

Ofé. Entre el indie-synth-pop y la canción francesa, Ofé es una de esas voces a las que regresar con frecuencia. Para muestra, “Monde Imaginaire”, el single en el que logran convivir en curiosa armonía ecos de drum & bass y de Jane Birkin. Hay influencias de Radiohead y también de Alain Bashung, con letras y voces etéreas, pero bases que de pronto adquieren una intensidad no precisamente para shoegazing (o quedarse mirando el piso…).

Panache! “J’pleure” es una canción con múltiples pliegues, producto de una operación tan ingeniosa como la banda que la interpreta, los siempre imprevisibles Panache!, en este caso en colaboración con los italianos Melancholia. A primera escucha, todo suena a una apelación más bien directa a la emotividad. Y esa es precisamente la idea: emular los momentos de “lágrimas de felicidad” de las comedias dramáticas en el cine. El genial video que acompaña el single no es menos elocuente.

Sasha Dansant. Pop estilizado y retrofuturista, voz andrógina y letras de desamor y noches confusas, Sasha Dansant lanzó apenas su EP debut en el primer semestre de este año, pero sus tracks dan cuenta de una madurez artística notoria. “Même Pas Mal” es de algún modo su canción emblema y recrea la escena lastimosa en la que una chica elige a otro, en algún club parisino donde probablemente están sonando Tame Impala y Nino Ferrer.

Kwoon

Kwoon. Una de las bandas más decididamente originales de la escena francesa. Dueños de un sonido entre la neosicodelia, el space-rock y algo que acaso podríamos llamar post-alternativo, luego de un largo break de inactividad, Kwoon se propuso brindar conciertos en locaciones únicas: una montaña de 4.000 metros sobre el nivel del mar, un antiguo faro, la cima de un volcán. Sus temas no desentonan con esas ideas: climáticos, espaciales, oníricos, deudores de Pink Floyd y cierto rock progresivo, pero sin cerrarse en lo genérico. “White Angels” es su single más reciente, pero vale la pena buscar también “Interstellar”, en particular su versión en vivo, un viaje aparte.

bESS. Ecos del mejor Brit-pop al otro lado del Canal. Con más de diez años de trayectora, bESS (“brit Essence”) pronuncia en claro inglés su amor por el rock británico y le agrega su propio talento para resolver canciones de esas a las que tendemos a tildar de “perfectas”. Habitués en festivales por toda Francia, “Never See Me Down” es el segundo single de su próximo álbum, donde Blur, Suede, The Kinks y todo el glam-rock aprueban con más de un guiño cómplice.

Petite-Vallée. Yoann Marra (voz y guitarra), Martin Lefebvre (teclados) y Pierre Elgrishi (bajo) son un trío inspirado en el folk norteamericano (lo cual incluye Canadá) y con influencias de artistas como Kevin Morby, Patrick Watson y Devendra Banhart. Su flamante primer álbum, grabado en Nueva York (con producción y mezcla de Sam Cohen) da cuenta de esos elementos y los combina con bases rítmicas intensas y detalles electrónicos en un cóctel propio. El single “Tu te souviens” es una buena muestra de un grupo con grandes canciones, “en constante búsqueda de un frágil balance”.

Petite-Vallée

Sacha. En algún punto entre el David Bowie de los 90 y la Billie Eilish que por entonces aún no había nacido, Sacha es un músico de 24 años y diez de formación e introspección. El resultado es “Crocodile”, un single de electro-rock que suma pinceladas urbanas para narrar desde adentro los dolores del crecimiento.

Bruno Bisaro. Se podría pensar que el idioma francés se inventó para canciones como esta (que no está incluida en la playlist Nueva Música Ahora!, sino solo en el video embebido). Bruno Bisaro es un cantautor franco-italiano, además de activista LGBT, basado en París. “Le Tant Aimé” es parte de su tercer disco, Chansons por Will, aún inédito, compuesto entre la Bretaña e Italia, y producido por Camille Riey. Una canción tenue, emocional, con giros de una cierta épica a lo Leonard Cohen. “Sólo la creación artística y la acción política me permiten no desaparecer”, dice Bisaro, que no está interesado en asistir a la apertura oficial de los Juegos Olímpicos: “Como muchos de nosotros -aclara-, lo veré por televisión”.

Nueva Música Ahora! es la playlist de Rolling Stone Argentina con una selección de los mejores, los más interesantes y los más disruptivos temas de la semana. Escuchala y seguila para estar al tanto de cada actualización. En el playlist vas a encontrar canciones nuevas, junto con el acumulado de semanas anteriores, para sumar hasta seis horas de música ecléctica en tipos de artista, trayectoria, origen y género.

Fuente: Rolling Stone