El rascacielos en Malasia alcanza los 678,9 metros de altura y 118 pisos con los que se consolida como el segundo edificio más alto del mundo.
Singapur, Dubai, Nueva York y Londres son algunas de las ciudades con los edificios más altos del mundo. Los rascacielos son edificios de grandes alturas que parten de los 100 metros los más bajos y llegan hasta los 800 metros en algunos casos. Los gigantes de la arquitectura se popularizaron a fines del siglo XIX en las ciudades con mayores índices de población. La gran ventaja de estas estructuras es el aprovechamiento del terreno en el que está, ya que algunos llegan a tener aproximadamente 170 pisos.
La carrera humana por superar récords se extiende a todas las áreas. La arquitectura es una de ellas, en la que algunos profesionales buscan que sus proyectos sean los más cercanos al cielo y las nubes. La construcción más alta del mundo es el Burj Khalifa, ubicado en Dubái. Alcanzó su altura máxima de 829,8 metros el 17 de enero de 2009, después que la inversión inicial de US$4000 millones se complementara con otros US$20.000 millones que completaron el desarrollo del Downtown Burj Khalifa.
Después de dicho suceso, muchos proyectos intentaron elevarse al cielo para entrar en el ranking de los edificios más altos del mundo y disputar el segundo puesto. Actualmente, el edificio que se consagra con la medalla plateada de la altura es el Merdeka 118. Construido en Kuala Lumpur, Malasia, los 118 pisos se erigen en 678,9 metros de altura. La construcción se prolongó por cinco años, y hasta ahora requirió una inversión de casi US$1.182 millones financiado por Permodalan Nasional Berhad (PNB).
El proyecto divide sus futuros 400.000 m² en tres áreas funcionales repartidas en 100 plantas rentables: cinco residenciales, 83 de oficinas y 12 hoteleras, por lo que esta última define en la ciudad un nuevo punto turístico. También habrá una parte de su superficie destinada a instalaciones recreativas, de mantenimiento, y un estacionamiento con capacidad para hasta 8500 vehículos.
Su diseño está a cargo de la firma australiana Fender Katsalidis. La misma optó por darle una fachada triangular de vidrio facetado, que tomó inspiración en los patrones identificables en el arte oriundo del país. Ahora, el edificio complementa el área del parque lindero diseñado por Sasaki y le dan una nueva impronta a ese área de la ciudad.
Para los extranjeros que busquen tener una vista panorámica de la capital podrán subirse a un mirador de doble altura, el más alto del sudeste asiático. El mismo estará listo para la inauguración del Merdeka 118, que se estima que finalizará para finales del 2022.
Fuente: La Nación