El Mensú, es la denominación dada al peón yerbatero, un apodo entregado al obrero en la recolección de la infusión típica de esta región, hombre que era el verdadero cosechero de la yerba mate en la provincia de Misiones y otras, lugar donde se establecieron antiguamente las principales firmas industriales del noble producto de esta comarca.
Podemos decir que en tiempos pasados la infraestructura de las empresas era bien precaria, ya que el secado y almacenamiento de la hoja y los transportes del producto hasta los medios de comunicación, distaban mucho de lo que son en la actualidad.
La yerba mate era acopiada desde el norte misionero, Brasil y Paraguay y transportada en jangadas -balsas hechas de troncos-, que cursaban rio abajo.
En las riberas de Posadas -capital de Misiones-, se asentaban los principales comercios de yerba mate y se contactaba la mano de obra criolla, brasileños y paraguayos llamados: Mensú, estos peones no tenían un salario fijo, a ellos se les adelantaba dinero por su trabajo el que gastaban de manera permanente en reuniones, burdeles y bares, lo que los convertían en deudores permanentes.
Antes de partir campo adentro a comenzar sus labores, los comestibles, bebidas y otros elementos, eran adquiridos a valores exorbitantes en los almacenes que pertenecían a las mismas empresas propietarias de los campos donde se recogía la yerba mate. Eran productos necesarios para su estadía en los obrajes, es ahí donde venía el aprovechamiento de los comerciantes que les cobraban tres o cuatro veces más la mercadería que el precio normal en otras áreas de la ciudad.
En esa época era muy común el maltrato a los Mensú; estos llegaban a los campamentos en medio de las plantaciones y eran sometidos a condiciones de trabajo inhumanas, no tenían límites de horas de trabajo, eran vigilados constantemente por los capataces que rondaban y forzaban con órdenes a gritos exigiendo más de lo que el peón podía dar físicamente.
Estos sacrificados obreros que recibieron el nombre de Mensú, son parte del pasado no deseado, sustituidos en la actualidad por el tarefero, nombre dado al actual cosechero de la yerba mate. De todas maneras, los trabajadores están restringidos en sus salarios por los vaivenes del precio de la materia prima acordado en el Instituto Nacional de la Yerba Mate y en la Secretaría de Agricultura de la Nación.
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Alberto Antonio Curia es Periodista y Consultor Turístico