Pero la pandemia, en su caso, se transformó en el adversario más difícil de vencer. No debe haber hasta aquí un lanzamiento cinematográfico más golpeado por el Covid-19 que Sin tiempo para morir (No Time to Die), forzado a una nueva postergación por la emergencia sanitaria.
Toda la industria esperaba la llegada de la película número 25 de la larga historia de 007 en el cine para el mes que viene. Hasta ahora, el lanzamiento en la Argentina de Sin tiempo para morir estaba programado para el 19 de noviembre, un día antes que en Estados Unidos y una semana después de una eterna tradición en el caso de las películas de James Bond: el estreno mundial en Londres.
Pero hasta esa histórica costumbre debió ser alterada por el coronavirus. Los estudios MGM y Universal, que llevarán la película a todo el mundo, y la productora EON, dueña de la marca Bond a través de sus productores Michael G. Wilson y Barbara Broccoli, anunciaron que Sin tiempo para morir tendrá un estreno global y simultáneo en el fin de semana del 2 de abril de 2021. «Entendemos que la demora será decepcionante para nuestros fans, pero ahora esperamos compartir la película el año que viene», señaló el anuncio oficial.
Queda claro que la intención de los productores y de los estudios es sostener el lanzamiento global de la película en los cines y esperar todo el tiempo que sea necesario para concretar ese propósito. Hoy, buena parte de la actividad cinematográfica en cuanto a la proyección en salas logró recuperarse, pero no hay certeza alguna respecto a la reapertura de los cines en mercados clave como las ciudades de Nueva York y de Los Angeles. A la vez, el aumento de casos de Covid-19 registrado en Gran Bretaña en los últimos días hace temer por la posibilidad de un aumento de las restricciones.
En esas circunstancias sería impensado y hasta perjudicial un estreno de la magnitud de Sin tiempo para morir, una película que muestra a James Bond (el agente secreto por excelencia y todo un símbolo para los británicos) en el jubileo de una celebración redonda, la de su película número 25. Además de este festejo de bodas de plata, Sin tiempo para morir tiene otro significado muy poderoso: marcará la despedida del papel de Daniel Craig,el actor que personificó a 007 desde 2006, en Casino Royale. Luego protagonizó Quantum of Solace, Operación Skyfall y Spectre.
Con esta sucesión de postergaciones, Sin tiempo para morir terminará estrenándose un año después de la fecha original que había sido programada antes de la aparición del coronavirus. En su nueva aventura, filmada en Jamaica, Noruega, Italia y distintos lugares del Reino Unido, Bond se ve obligado a interrumpir un plácido retiro para salir al rescate de un científico secuestrado, detrás del cual aparece la amenaza de un villano que posee un misterioso armamento. El rodaje también tuvo varios momentos accidentadosy forzó más de una postergación respecto de los planes originales.
El adversario de turno de Bond será Rami Malek, el actor que personificó a Freddie Mercury en Bohemian Rhapsody y ganó el Oscar por ese papel. Junto a Craig y Malek regresan Ralph Fiennes (M), Christoph Waltz (Blofeld), Lea Seydoux (Madeleine Swann), Jeffrey Wright (Felix Leiter), Ben Whishaw (Q), Rory Kinnear (Bill Tanner) y Naomie Harris (Moneypenny). Ana de Armas y Lashana Lynch se sumarán en esta película a la galería de las chicas Bond. La dirección es de Cary Joji Fukunawa, primer estadounidense de la historia de las películas de James Bond en ocupar ese lugar, y el guion lleva la firma de Neal Purvis y Robert Wade, habituales autores de los films de 007, con aportes de Scott Z. Burns y Phoebe Waller Bridge, la creadora de Fleabag y Killing Eve.
Hace pocas horas, cuando todavía se daba por hecho el estreno inminente en noviembre, la producción aceleró la campaña promocional previa con la aparición de un nuevo video de Billie Eilish interpretando la canción original de Sin tiempo para morir, que incluyó escenas inéditas de la película. También empezó a difundirse la versión instrumental de ese tema, a cargo de la Royal Philharmonic Orchestra, como adelanto de un álbum que incluirá nuevas versiones sinfónicas de temas clásicos de las películas de James Bond. La música incidental de Sin tiempo para morir fue compuesta y arreglada por Hans Zimmer.
Fuente: Marcelo Stiletano