«Se llama misofonía, es una de las enfermedades consideradas raras, el 7% de la gente la tiene y no lo sabe, no es psicológica y no tiene cura», explicó Oreiro en una entrevista con Santiago Del Moro en Juntos podemos lograrlo (Telefé 22 hs).
Asimismo, la cantante precisó cuáles son los sonidos que más la afectan. «El chicle para mí es el punto máximo, la lapicera también. Hay un grupo en Argentina que tiene esta patología. Yo por ejemplo, me subo a un auto y si el señor que maneja está con un chicle me pongo directamente auriculares», ejemplificó.
La actriz uruguaya, además, describió «ansiedad, palpitación, sudor frío», entre los síntomas que la afectan cuando escucha algunos de los sonidos que le disparan su trastorno. También contó que cuando le tomaban exámenes en el colegio debía cambiarse de aula porque los ruidos le impedían concentrarse.
La misofonía también se conoce como Síndrome de Sensibilidad Selectiva al Sonido (SSS), que se refiera a la cuando esta hipersensibilidad responde solamente a sonidos por debajo de una conversación normal (de entre 40 y 50 decibelios).
Los síntomas suelen presentarse entre los 10 y los 12 años, los sonidos más molestos están vinculados con la respiración y la alimentación. En general, para quienes la padecen resulta más irritante cuanto más cercana a su círculo es la persona que produce el ruido.
Natalia Oreiro y su lucha contra el chicle
Fuente: La Nación