JK Rowling maneja la batuta (en este caso, la varita) del universo de Harry Potter. La autora británica siempre tiene la última palabra sobre todas las cuestiones relacionadas con la exitosa saga del niño mago: de las adaptaciones cinematográficas al merchandising y cualquier otro producto vinculado con sus personajes. Decide también sobre la estética de los libros y las ilustraciones. Ella fue quien eligió al ilustrador galés Jonny Duddle para crear el arte de las tapas de las nuevas ediciones en inglés que publicó Bloomsbury en 2014. Después de una larga espera, y en plena pandemia , los siete títulos de la colección con las ilustraciones de Duddle salen en español por primera vez en todo el mundo mañana.
¿Y quién es Duddle?, se preguntan los recién llegados al universo Potter. Los fans ya lo conocen por la edición en inglés y porque el ilustrador se ha vuelto casi una celebridad en el mundo editorial a partir de su trabajo con la saga mágica. En su sitio web se presenta así: «Jonny pasó su infancia en las colinas húmedas y ventosas del norte de Gales, explorando bosques, montando su bicicleta por millas y millas, fregando manzanas y construyendo casas en los árboles. Cuando no estaba afuera, estaba dibujando y creando mundos, esparcidos por el piso de su habitación, con papeles por todas partes». Antes de trabajar como ilustrador profesional, fue vendedor de enciclopedias, animador infantil, director de una galería y profesor de arte en Kang, un pequeño pueblo en medio del desierto de Kalahari. Y antes de publicar sus primeros libros diseñó personajes para juegos de computadora. Entre sus libros infantiles se destaca The Jolley Rogers , su saga de piratas integrada por ocho títulos, que es un éxito en Gran Bretaña. También publicó Gigantosaurus , un álbum sobre dinosaurios, y una historia de ciencia ficción que transcurre en el espacio.
Con la mira en las nuevas generaciones de lectores que se siguen sumando a los millones de fanáticos de Harry Potter, las portadas ilustradas por Duddle tienen un estilo más infantil que las originales de Dolores Avendaño . De hecho, Harry aparece con el flequillo más largo y ondulado, que le tapa la famosa cicatriz de la frente, un cambio que sorprendió a los fans.
«Decidimos cambiar las tapas para acercarnos a los lectores más jóvenes y elegimos otro ilustrador para que estas ediciones tengan su propio diseño y estilo. Las tapas de Duddle están dirigidas a una generación diferente. Pero más allá de este cambio de look, siguen siendo los Harrys de toda la vida y de los que tanto hemos disfrutado», comentó a LA NACION Eir Rovira, editora de Salamandra infantil y juvenil en España, el sello que publicó la saga en español en 1998 .
La convocatoria para ilustrar la saga completa sorprendió al ilustrador, ya que solo había hecho una prueba con el primer título, Harry Potter y la piedra filosofal . «Así que cuando me dijeron que J.K. Rowling y el equipo de Bloomsbury querían que ilustrara el resto de la serie, me quedé atónito. Me preocupaba no estar a la altura del trabajo, ya que había leído solamente el primer libro hacía varios años. Me sentía como un impostor, entre millones de fans de Harry Potter. Un verdadero Muggle, alguien que no cree en la magia. Pero después me di cuenta de que eso me daba una perspectiva original y empecé a abrirme camino a través de los maravillosos libros, leyendo cada uno mientras creaba obras de arte repletas de criaturas fantásticas y personajes inolvidables», contó Duddle.
Lector fervoroso de Maurice Sendak, Roald Dahl y Tolkien, al sumergirse en el universo Potter, Duddle se volvió fanático de Hagrid, el guardabosques y guardián de los terrenos del Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería, al que asisten Harry y sus amigos. «Amo a Hagrid. Me gusta su naturaleza torpe y bien intencionada y cómo las cosas a menudo le salen mal debido a algo que ha dicho o hecho o a su torpeza generalizada, a pesar de que tiene las mejores intenciones. En ese sentido, me recuerda a mí mismo. Cuando me pasaron el material para la primera portada, él fue el primer personaje que intenté dibujar. También me fascina Arthur Weasley porque le gusta jugar con autos viejos (como solía hacer mi padre) y porque es un poco travieso pero con buenos modales».
Para crear cada tapa, Duddle hizo muchos bocetos hasta llegar a la versión que le mandaba a Rowling y los editores. A partir de un ida y vuelta con comentarios y opiniones, corregía o volvía a dibujar hasta lograr la definitiva. Luego «pintaba» de manera digital con la computadora. «Las ilustraciones para Harry Potter son muy diferentes a las de mis libros ilustrados. En la computadora, trabajo de manera muy similar a mis técnicas con pintura real, pasando de un boceto a un dibujo terminado, colocando una pintura inferior y luego trabajando en una capa final de color. Me encanta la flexibilidad que me brinda la obra de arte digital para cambiar la dirección de una pintura y mover elementos en cualquier etapa. Crear una ilustración para la portada de un libro es muy diferente. Implica leer la historia de otra persona y tratar de comprender su visión, por lo que, en muchos sentidos, puede ser más difícil. Y con Harry Potter, las escenas que ilustré ya han sido ilustradas antes, diseccionadas, discutidas y analizadas por millones de fanáticos, y convertidas en películas increíblemente exitosas. No he sido parte de todo lo anterior, así que me propuse crear mi propia interpretación de las palabras de Rowling. Con suerte, mis ilustraciones encontrarán nuevos fans, los lectores las disfrutarán y se sentirán cautivados, y yo aportaré algo nuevo al universo de Harry Potter».
Lo nuevo de Rowling, gratis y en español
Mientras los lectores hispanos ya pueden conseguir las nuevas ediciones de Harry,Rowling sorprendió a sus fanáticos con el lanzamiento de una nueva historia, The Ickebog, que sube por capítulos a Internet de manera gratuita. Primero publicó los textos en inglés y, desde hoy y hasta el 17 de julio, están disponibles también en español.
Según reveló Rowling en su sitio web, empezó a trabajar en el relato «de manera intermitente» entre los libros de Harry Potter, pero lo dejó dormir durante casi diez años. Es «una historia sobre la verdad y el abuso de poder», que tiene planeado publicar en papel, e-book y audiolibro en noviembre y donar los derechos a víctimas de la pandemia de coronavirus.
Junto con la publicación gratuita online, Rowling invitó a los lectores a colaborar con las ilustraciones. «Sería muy lindo que los chicos que hacen cuarentena o necesitan distraerse en esta época difícil que estamos pasando pudieran ilustrar la historia», dijo la autora. La convocatoria para España y América latina está abierta hasta el 24 julio en el sitio www.theickabog.com
Fuente: Natalia Blanc, La Nación