Lucía Puenzo estrenó «Señorita 89», serie en la que desnuda el trasfondo criminal de los concursos de reinas

MIRÁ EL TRÁILER. La afamada directora argentina triunfa en los EEUU y México en series para TV. La nueva se titula «Señorita 89», sobre la elección de una Miss. Está disponible en Starzplay.

Lucía Puenzo, hija del presidente del INCAA y ganador del Oscar (1986) por “La historia oficial”, Luis Puenzo, se inició tempranamente en la literatura con títulos como “El niño pez”, “Nueve minutos”, y “La maldición de Jacinta Pichimahuida”. Su llegada al cine se produjo, primero, como colaboradora en algunos guiones de films de su padre (“La puta y la ballena”) o de Adrián Caetano (“Disputas”), pero su opera prima solista fue la comedia “XXY”, con Ricardo Darín y Valeria Bertuccelli, que tuvo un moderado éxito al igual que las siguientes, “Los invisibles” y “El niño pez”. Pero en 2013, con “Wakolda”, adaptación de una novela suya sobre la persecución del criminal de guerra Erich Priebke en la Patagonia, alcanza una auténtica repercusión, quizá más en el exterior que en su propio país.

Lucía Puenzo, a quien Variety le dedicó su portada, asegura que desde que se unió al director chileno Pablo Larraín, y a su hermano, Juan de Dios, en la producción “Fábula”, “pocos guionistas-directores latinoamericanos han sacudido tanto el panorama televisivo de la región como la argentina Lucía Puenzo”. Puenzo, quien trabaja ya desde hace varios años fuera del país, fue la responsable de “La jauría” (primera temporada, presentada en el Festival de Zurich de 2019), y en ella, afirma la publicación de Hollywood, “se destacó por primera vez el talento de Lucía y de su hermano Nicolás Puenzo en una serie que ahondó en múltiples manifestaciones de abuso sexual. La serie también fue el primer fruto de una alianza de producción y distribución entre Fabula y Fremantle”.

https://youtu.be/3_hqp0R2e_s

Presentada en 2020, “Señorita 89”, su última serie, marca la primera producción de Fabula en su sede de México y amplía sus socios a Los Ángeles. “La Jauría” fue vendida a Amazon y HBO Max para Estados Unidos, y Fremantle anunció el mes pasado que una tercera temporada de la serie y una segunda de “Señorita 89” ya estaban en desarrollo. La serie “Señorita 89”, que se emitirá en Estados Unidos a partir del 27 de febrero, anticipó en su trailer que la serie mostrará el glamour y el aparente paraíso de La Encantada, donde 32 concursantes se preparan para competir en el concurso de belleza de Miss México 1989, para revelar más tarde el infierno que se esconde detrás de su organización sus círculos del infierno. En la primera temporada aparecerán como personajes Dolores, Miss Guerrero, con un cuerpo perfecto y drogodependiente; Jocelyn, Miss Chihuahua, cuya hermana desaparece; Ángeles, Miss Oaxaca, madre soltera; Isabel, Miss Yucatán, culta y con grandes ambiciones empresariales; Concepción, codirectora de La Encantada; y Elena, profesora de cultura de La Encantada.

“Son las mujeres las que cuentan esta historia”, dijo Puenzo a Variety. “Un grupo de chicas anónimas, cuatro señoritas que vienen de diferentes rincones de México con el sueño de salir de sus pueblos para ganar ese pequeñísimo lugar. Chicas que apenas se miran y que en esos últimos meses de entrenamiento se transformarán en productos de exhibición, negociación e intercambio en los medios y la política. Esa será su transformación: salir del lugar de víctimas. Dejar de mirarse con desconfianza. Comprender el poder de la acción colectiva. Empezarán a sacudir un mundo hasta entonces dirigido por los hombres”.

En La Encantada se cocina algo más grande que el concurso de belleza anual que seduce a la audiencia mexicana. Allí también se gestan pactos políticos, alianzas económicas y negocios millonarios. Sin embargo, ninguna de las concursantes denuncia la vida paralela que está ocurriendo. Unos porque creen que para alcanzar la corona hay que entrar en el juego, y otras directamente por miedo.” Como muchas mujeres, empiezan a abrir los ojos sobre lo cómplices que han sido de un sistema patriarcal”, agrega Puenzo”. La Encantada forma parte de esta fábrica de reinas: médicos, nutricionistas, entrenadores y, en la cima, la guardiana del ideal de belleza en México, Concepción. Ella es un personaje inquietante, dulce y amoral que empujará a sus chicas a formar parte de esta siniestra red en la que los cuerpos son mercancías de intercambio. Porque en aquel México de 1989, el acoso y la explotación sexual se entendían como el precio a pagar por la posibilidad de convertirse en una Miss.”

Finalmente, añade: “La belleza es sin duda una excusa para hablar de otras cosas. La Encantada parece ser el campo de juego del poder. Esta primera temporada se desarrolla en un universo confinado: un cielo en la tierra que poco a poco irá mostrando su cara más oscura. Allí, el adoctrinamiento es directo y brutal. Poco a poco, todas descubrirán un oscuro submundo de abusos y maltratos que se convierte en un complejo y siniestro modus operandi del que es imposible salir indemne. Sabiéndose parte de una cadena que llega hasta las más altas esferas, son conscientes de que corren peligro si abren la boca.”

Fuente: Ámbito