Después de mucha espera, ilusión y de haber logrado numerosos premios en la industria del cine, finalmente el Oscar no llegó para Argentina, 1985. Pero lejos de la tristeza, sus protagonistas celebraron el camino recorrido y el éxito que cosechó el film desde su estreno. “Estamos muy orgullosos de nuestro trabajo y de la película y esto no lo quita, no lo menosprecia, al contrario”, afirmó Ricardo Darín tras la premiación.
Ricardo Darín, no escondió su decepción al no llevarse el ansiado premio –del cual sí disfrutó en 2010 con el Secreto de sus ojos-
Con un tono calmo y una ligera sonrisa el protagonista de la historia contada por Santiago Mitre llamó a valorar todo lo conseguido hasta ahora y detalló cómo vivieron la ceremonia: “Como lo vivimos todos, nos habíamos dado mucha manija, todos se dieron mucha manija y fue una especie de decepción, pero ganó una gran película. Todos estaban entre las posibilidades”.
La película ganadora resultó ser Sin novedad en el frente, un drama bélico del alemán Edward Berger. La misma relata la vida de los soldados en las trincheras durante la Primera Guerra Mundial, historia que se basó en el libro homónimo que fue escrito por Erich Maria Remarque, un veterano alemán de la Gran Guerra. El film se puede ver en Netflix y toma como punto de partida a Paul Baumer (Felix Kammerer) un soldado de apenas 17 años, quien envuelto en un patriotismo naif, decide unirse con entusiasmo a las primeras líneas de combate, falsificando su documento por ser menor de edad.
Ricardo Darín y Santiago Mitre hablaron de la importancia de «Argentina, 1985»
Más allá de saber que competían contra un gran film, al comienzo de la ceremonia un pequeño detalle avivó las esperanzas que en ese momento tenía Ricardo Darín. “Me confundió un poco la llegada de Antonio y de Salma, porque hasta ahí sabíamos que estábamos mal, pero cuando los vi a ellos dije: ‘¿será que…?’. Los que están invitados a presentar un premio están invitados desde hace mucho tiempo atrás. Esa alta dosis de latinidad me hizo dudar, pero enseguida miré hacia un costado y vi a un camarógrafo que estaba apuntando a Berger y dije ‘ah no’. La cámara ya estaba lista. Pero todo bien, es parte del juego, ganas o perdes”, sostuvo el actor en diálogo con TodoNoticias.
La película teutona ya había arrasado en febrero pasado en los BAFTA, la entrega de premios más prestigioso del Reino Unido. Allí se consagró como mejor película del año, la categoría más importante, y también cosechó otros seis premios más como mejor película de habla no inglesa (le ganó a Argentina, 1985), mejor director (Edward Berger), mejor guión adaptado, mejor fotografía y mejor banda sonora original. Por eso, ante este panorama, Darín valoriza aún más el éxito cosechado: “Hicimos más de lo que pudimos, hicimos un camino glorioso, nosotros ganamos el goya, el golden globe, ganamos premios por todos lados, la gente abrazo y adoró la película, esta es una instancia donde quedan cinco y la moneda cae para un lado o para el otro. Es así, hay que entenderlo, aceptarlo y felicitar a los ganadores”.
Finalmente el Oscar no llegó para Argentina, 1985 (REUTERS/Lauren Justice)