En su nueva comedia, Margot interpreta al famoso juguete de Mattel enamorado de todas las tonalidades del rosa.
Brad Pitt (59) lo predijo hace tres años. Frente a las cámaras y en medio de una entrevista, la estrella miró a Margot Robbie (33) y sentenció: “Sos como una Barbie”, entre risas, mientras promocionaban su primera película juntos, Érase una vez… en Hollywood, dirigida por Quentin Tarantino. Nadie imaginó entonces que esa observación, enunciada como un chiste, era premonitoria. Hace dos semanas se estrenó Barbie, la película que lleva el nombre de la famosa muñeca de Mattel, y es precisamente Margot quien interpreta a la rubia de juguete enamorada de todas las tonalidades del rosa.
La exitosa comedia no sólo ubicó a la artista entre las favoritas de Hollywood, también la convirtió en la actriz mejor paga de la industria: a poco más de diez años de haber iniciado su carrera, cobró 12,5 millones de dólares por su trabajo.
EL PRINCIPIO DE TODO
Quizá muy pocos recuerden que Margot desembarcó en 2014 en las calles de San Telmo para filmar Focus, Maestros de la estafa junto a Will Smith, porque los flashes se posaron casi exclusivamente sobre él, una estrella consagrada. Sin embargo, la actriz australiana ya había logrado captar la atención de críticos y medios gracias a su pequeño pero inolvidable papel en El lobo de Wall Street junto a Leonardo DiCaprio. Hoy, casi una década después, Margot es sinónimo de éxito. A quince días de su estreno mundial, Barbie lleva recaudados más de 300 millones de dólares.
“Siento que estoy viviendo uno de los mejores momentos de mi vida”, reveló ella. Si bien sus protagónicos en Yo, Tonya –papel que le valió una nominación al Oscar como Mejor Actriz–, La leyenda de Tarzán y la saga de Escuadrón Suicida la ubicaron entre las preferidas, Margot en algún momento llegó a confesar que los embates de fama le hicieron replantearse un futuro fuera de la actuación. “Algo estaba sucediendo en aquellos primeros momentos y todo fue bastante horrible. Recuerdo decirle a mi madre: ‘No creo que quiera dedicarme a esto’. Y ella se me quedó mirando, imperturbable, y me respondió: ‘Cariño, creo que es demasiado tarde como para no hacerlo’. Ahí fue cuando me di cuenta de que la única manera de lidiar con esto era seguir adelante”, reveló a la revista Vanity Fair en 2022.
Dispuesta a apostar fuerte por su carrera, fue detrás de proyectos aún más ambiciosos y no dudó en sumergirse en el mundo de la moda como embajadora de Chanel, Valentino y Bottega Veneta. También se convirtió en una de las princesas de las alfombras rojas gracias a sus fabulosos looks firmados por Armani, Versace y Schiaparelli, entre otras firmas.
EL AMOR, SU MEJOR SECRETO
Casada desde hace siete años con el productor británico Tom Ackerley (33), Margot vive su gran amor lejos de los flashes. Se conocieron en 2014 durante la filmación del drama bélico Suite Francesa, pero no fue hasta el año siguiente que tuvieron su primera cita.
“Lo nuestro nació como una amistad y con el tiempo se volvió algo más profundo. Siempre estuve enamorada de él, pero sinceramente no creía que me quisiera de la misma manera. Hasta que un día me dije: ‘No dejes que esto se convierta en algo raro entre los dos. No seas estúpida y decíselo’. Y lo hice”, contó en una entrevista en 2016. Ese mismo año la pareja dio el “sí, quiero”, en una íntima ceremonia celebrada en Australia y desde entonces no sólo comparten su vida sino también proyectos cinematográficos que los tienen como productores. “Es agradable estar en un negocio con gente con la que vas a compartir tu vida de todas formas”, sentenció.•
Fuente: La Nacion