Mission impossible 7. En septiembre retomará en Venecia la fotografía prinicipal, que fue suspendida en febrero.
Los expertos del sector dieron a conocer una serie de medidas de seguridad que adoptar para garantizar la integridad de quienes trabajan en el cine o la televisión, incluyendo la edición de la temperatura antes del ingreso al set y tests de Covid como condición contractual, el uso de barbijos y el lavado frecuente de manos.
La nueva era rechaza los buffet: las pausa para comer serán escalonadas y la comida empaquetada en porciones individuales con cubiertos descartables. También se evitarán los traslados y viajes mientras duren las filmaciones. El documento prevé la presencia en cada set de un “comisario Covid” a quien se confiará la vigilancia sobre todos los protocolos, incluyendo la desinfección.
El “libro blanco” de 22 páginas fue presentado al gobernador de California, Gavin Newson, y a su colega de Nueva York, Andrew Cuomo. Fue preparado por un grupo de expertos que incluyen miembros de los sindicatos de actores, realizadores y maestranza, representantes de estudios, compañías como Amazon y Netflix, y especialistas sanitarios. “El camino de la recuperación está tomando forma y somos razonablemente optimistas”, comentaron el presidente del sindicato de realizadores, Thomas Schlamme, y el director ejecutivo Russell Hollander. “Apreciamos la necesidad de volver a trabajar, hacerlo pronto es importante, pero hacerlo bien es obligatorio”, agregó. La presentación del documento coincidió con el anuncio de que “Mission Impossible: 7”, bloqueado a fines de febrero mientras Tom Cruise se aprestaba a filmar en Venecia, se reanudará en septiembre para las tomas en exteriores.
Según trascendidos publicados en los medios británicos, el actor está pensando construir “un pueblo Covid-free en una base abandonada de la fuerza aérea en Winnebago, Oxfordshire”. El film, con Ethan Hunt, Simon Pegg, Alec Baldwin, Vanessa Kirby y Rebecca Ferguson, debería estrenarse en noviembre de 2021.
Las directivas de Hollywood se dieron a conocer mientras la cadena de cines AMC, la mayor del mundo, expresó dudas sobre la posibilidad de seguir en el negocio debido a las pérdidas por el coronavirus. AMC Theatres, la mayor cadena de salas de cine en el mundo, expresó “sustanciales dudas” sobre la posibilidad de seguir funcionando, debido a las pérdidas provocadas por el cierre de más de un millar de cines debido al coronavirus.
El coloso de la exhibición, controlado por el conglomerado chino Dalian Wanda Group, anunció que sus balances trimestrales incluirán 2.400 millones de dólares de pérdidas debido al cierre por el coronavirus.
Fuente: Ámbito