La 81ª edición del Festival de Venecia vivió un gran espasmo al recibir Brad Pitt y George Clooney, quienes presentaron la comedia de acción Wolfs.
Esta realización está fuera de concurso, y se estrenará el 27 de septiembre por Apple TV. A propósito de plataformas de streaming: la dupla de actores defendió la convivencia de éstas con distribuidoras tradicionales en la industria del cine actual.
“Necesitamos el streaming, es parte de lo que hacemos, pero ellos también se benefician de la distribución tradicional, es una revolución la que estamos viviendo”, interpretó Clooney en una muy concurrida rueda de prensa.
“Siempre seremos románticos con la experiencia de la sala de cine, pero a mí encanta que existan las plataformas porque hay más historias y más talento que nunca. Es un equilibrio delicado el que hay que alcanzar, pero creo que se escribirá por sí mismo”, apuntaló Pitt a su turno.
Si bien Apple TV se garantizó el estreno de Wolfs, el filme tendrá un estreno limitado en salas.
Otra cosa que tendrá es una secuela, que Apple TV+ ya le ha encargado al director a Jon Watts, quien no ha viajado hasta Venecia por dar positivo de Covid.
La presencia de los dos galanes generó delirio en Venecia, como se aprecia en este video:
Ahora bien, ¿de qué se trata Wolfs?
Del encuentro de dos criminales profesionales, expertos en deshacerse de cadáveres, que rivalizan pero que no tienen más remedio que trabajar juntos.
Brad Pitt y George Clooney son los indicados para el trabajo, sin dudas.
Es que ambos ya habían tirado por la cabeza del espectador una picante buena química en la saga de Ocean’s y en Burn After Reading de los hermanos Coen.
De todos modos, la reincidencia estuvo atada a la aparición de un proyecto que valiera la pena. Y según dejaron en claro en Venecia, el de Wolfs lo fue.
Clooney: “Jon Watts es un director muy interesante, me encantó Cop Car (thriller protagonizado por Kevin Bacon)… Además, con Brad he estado haciendo este trabajo durante tanto tiempo; a medida que éste transcurría hemos encontrado un ritmo que funcionó muy bien para nosotros. Las bromas que intercambiamos durante la película se sintieron perfectas e hicieron todo más fácil”.
“Mientras leíamos el guión, Jon Watts no nos dijo cuál de los dos papeles era nuestro, así que hablamos por teléfono y decidimos juntos cuál elegir. Soy muy optimista sobre el futuro del cine y estoy muy agradecido de seguir trabajando en una industria que amo”, añadió el intérprete, que a su vez recordó que, de joven, tuvo trabajos duros como el de recolector de tabaco en una granja. “Así que esto es como coser y cantar”, concluyó.
“A medida que me hago mayor es más importante para mí trabajar con gente con la que me gusta compartir mi tiempo”, aseguró Pitt, mientras su compañero seguía con bromas tendientes a recrear la rivalidad expuesta por sus respectivos personajes en el filme.
“Soy mucho más joven que él, aunque sé que no lo parezco”, remató Clooney entre risas.
También lo hizo con la idea de referir a la química citada arriba, que ya les han valido comparaciones con parejas legendarias en la historia del cine como las que compusieron Paul Newman y Robert Redford; Jack Lemmon y Walter Matthau; y Katherine Hepburn y Spencer Tracy, entre otros.
“Lo que nos mueve es lo mismo, contar una buena historia, sea produciendo o actuando. Eso se puede hacer desde distintos lugares, delante o detrás de la cámara, pero lo que importa es contar historias universales y que lleguen a la gente”, planteó Pitt cuando algunos periodistas les sugirieron cómo han diversificado sus respectivas carreras.
En este punto, vale recordar que Pitt se ha convertido en productor, mientras que Clooney se ha aventurado incluso en la dirección.
George Clooney y su reconocimiento para Joe Biden
Teniendo en cuenta que el día anterior había pasado por Venencia Jude Law con The Order, y que este filme toca tangencialmente lo que se juega en las próximas elecciones de Estados Unidos, era lógico que Clooney hablará sobre la decisión de Joe Biden de abandonar la contienda electoral, algo que él le solicitó mediante una columna publicada en el New York Times.
“Lo que se recordará es ese acto desinteresado, es muy difícil dejar el poder, lo hemos visto en todo el mundo, que alguien sea capaz de reconocer que hay una mejor opción, eso es lo que cuenta y el resto no será recordado”, dijo al respecto.
Jude Law interpreta a un agente del FBI que investiga los crímenes violentos de un grupo de supremacía blanca en The Order, que se estrenó el sábado en Venecia.
En esta adaptación del libro de no ficción de Kevin Flynn y Gary Gerhardt, Nicholas Hoult fue elegido para interpretar a Robert Jay Mathews, el carismático líder del grupo, considerado el grupo de odio más radical desde el Ku Klux Klan.
Sus crímenes, incluidos robos a bancos y atracos a vehículos blindados que el grupo estaba utilizando para financiar una revolución armada, llevaron a una de las mayores cacerías humanas en la historia del FBI, en 1983.
“Lo que me sorprendió fue que era una historia de la que no había oído hablar antes”, dijo Law, quien también produjo.
“Es como una obra que necesitaba hacerse ahora. Siempre es interesante encontrar una obra del pasado relativo que tenga alguna relación con el presente”, consideró.
Law viajó a Italia con su director, Justin Kurzel, y sus coprotagonistas Hoult, Jurnee Smollett y Tye Sheridan para el estreno.
Su personaje, llamado Agente Huss, es un agente del FBI amalgama y no está basado en una persona específica. Esto, dijeron, fue importante para posicionarlo dentro de esta historia.
“Él representa a muchos de nosotros. Sentía que su trabajo más duro había quedado atrás y, de hecho, tenía su mayor batalla por delante”, sostuvo Law.
Kurzel, un cineasta australiano conocido por la adaptación de 2015 de Macbeth con Michael Fassbender, dijo que siempre había querido hacer una película estadounidense en la línea de los thrillers dramáticos de los años ‘70 como Contacto en Francia, Arde Mississippi y Todos los hombres del presidente. Intentó hacer esta película con la sencillez que admiraba en esos clásicos.
Hoult, por su parte, sintió que era una “historia difícil de contar y personajes difíciles de habitar”, pero elogió a su director por ayudar a crear un entorno seguro y creativo mientras exploraban la oscuridad de Mathews.
Y todos quedaron impresionados por los paralelismos con la actualidad. Aunque nadie quiso hacer comentarios directos sobre las próximas elecciones presidenciales de Estados Unidos, la película, esperan, habla por sí sola.
“La historia de Estados Unidos es muy compleja”, dijo Smollett.
“Este nivel de intolerancia no es nuevo y ha existido en nuestra nación desde su fundación. Como artistas, podemos poner un espejo frente a la sociedad… explorar los lados muy complejos de la humanidad, la fealdad, la oscuridad para que podamos aprender de ella y, con suerte, no repetirla”, completó.
Los intérpretes añadieron que The Order lleva al espectador a otras conclusiones contemporáneas.
Por ejemplo, que determinados líderes y doctrinas logran manipular a la gente, crear verdaderos ejércitos, aprovechándose de las cicatrices del sistema, por ejemplo culpando a la inmigración del desempleo o de la inseguridad en las ciudades.
“La película resalta el sentido de familia y de comunidad que hace que las personas puedan sentirse seguras y protegidas a pesar de la dirección que se tome políticamente”, interpretó Law.
Y si bien se sitúa en hechos de hace cuatro décadas, The Order llega en un momento en que se subraya la vigencia del supremacismo en la sociedad estadounidense, a dos meses antes de unas elecciones que tienen a Donald Trump como candidato a la presidencia de Estados Unidos.
Fue inevitable hablar de Trump en la presentación de este filme en Venecia, ya que se hallaron copias de Los diarios de Turner aquel 6 de enero de 2021, día en que hordas de seguidores del magnate y expresidente asaltaron el Capitolio de Washington en protesta por los resultados electorales.
Los diarios de Turner: novela de 1978 de William Luther Pierce, publicada bajo el seudónimo de Andrew Macdonald, que describe una violenta revolución en Estados Unidos que conduce al derrocamiento del gobierno federal de dicho país, a una guerra nuclear y, en última instancia, a una guerra santa racial que lleva al exterminio sistemático de los no blancos.