NUEVA YORK.- “¡Me hiciste llorar!”, exclamó uno de los compositores, directores y productores más reconocidos de Broadway sobre un escenario de Nueva York. Y no cualquiera hace emocionar Lin-Manuel Miranda, ganador de premios Pulitzer, Grammy, Emmy y Tony, un consagrado del mundo teatral internacional. Agustina San Martín, joven cineasta argentina, lo logró.
En el marco de la Iniciativa Artística Rolex para Mentores y Discípulos del ciclo 2020-2022, Agustina San Martín deslumbró en el Rolex Arts Weekend con su documental. Con el BAM Strong Harvey Theater colmado de espectadores, la directora y guionista proyectó la película Childhood echoes (Ecos de la infancia), emotiva recopilación de recuerdos de diferentes personas. “Lo único que quería era hacerte llorar”, le contestó entre risas argentina a Lin-Manuel Miranda, su mentor, quien la acompañó durante dos años, desde 2020 y hasta septiembre pasado, en este programa de mentorías.
Childhood echoes se vio en un espacio oscuro, junto a nubes y estrellas, fiel reflejo de lo que sería una noche típica en la infancia de Agustina San Martín. Sobre esa proyección, personas de distintas edades e identidades contaron sus memorias de la niñez. “La idea era explorar las conexiones entre diferentes recuerdos, estos fantasmas que viven dentro nuestro… los fantasmas del pasado”. Así, la flamante directora jugó a crear un universo único y lograr que “la gente sienta cosas”.
Durante el proceso de la obra, la realizadora exploró diferentes narrativas, buscó la forma de abordar el concepto de “recuerdo de la infancia” e hizo hincapié en lograr la conexión de sus entrevistados con sentimientos y emociones reales. “Es difícil sentarse frente a una cámara y contarle a un extraño cosas propias. Esa persona te está compartiendo parte de su alma”, reflexionó en diálogo con LA NACION. “Fue un trabajo muy duro lograr que los entrevistados confiaran en mí. Tratar de ser cálida, mirarlos a los ojos… creo que ayudó a que la gente se soltara”.
Música, nostalgia y magia
En un momento clave de la película, la directora acude al silencio como recurso: cuando los entrevistados responden sobre las canciones que marcaron su infancia, se quedan cantando a capela. “Entonces hubo algo tan puro, que me encontré rompiendo las reglas del documental”, explica. “Sentí que con el silencio, la oscuridad y el canto de los entrevistados íbamos a sentir que los teníamos en frente nuestro. Es por eso que necesitábamos silencio”, agregó.
El trabajo cuenta con el testimonio de 28 entrevistados. Durante el panel de discusión posterior a la obra, entre el mentor y la discípula, la argentina confesó que el BAM Strong Harvey Theater fue también una fuente de inspiración de Childhood echoes: a 120 años de su construcción y con su actual aspecto fantasmal, el edificio la retrotrajo al concepto de los “ecos y fantasmas del pasado”.
Una estrella de Broadway, una estrella en potencia
Agustina San Martín tiene 31 años. Estudió Diseño de Imagen y Sonido en la Universidad de Buenos Aires y tiene antecedentes muy interesantes, que la han llevado lejos: escribió el guion y dirigió La prima sueca, cortometraje cuya premiere fue en 2017 en el Festival Internacional de Cine de Berlín. Por ese trabajo ganó el premio a mejor cortometraje en el BAFICI. También dirigió Monstruo Dios, que obtuvo una mención especial del jurado en el Festival de Cine de Cannes.
En septiembre, en Nueva York, al término de la proyección de Childhood echoes, Lin-Manuel Miranda contó la trastienda de tantos meses de labor con la joven argentina. “Recuerdo que le dije que yo hacía teatro, que estaba empezando a hacer cine y que entonces seguramente terminara aprendiendo más yo de ella, que ella de mí”, reveló el productor.
Entre 2020 y 2022, Agustina San Martín acompañó a Manuel Lin-Miranda al set de grabación de la película Tick, Tick… Boom! Allí pudo aprender sobre los recursos musicales que aplicaría posteriormente a su documental. Durante el panel, la guionista contó como ejemplo: “Cuando me mostraste una canción de referencia de la película Encanto pude tomar lo de la generación de la tensión y la liberación de emociones. Fue difícil, pero aprendí mucho viéndote trabajar. Sos un maestro en la generación de estos cambios en las emociones. Sos como un director de orquestra”, lo halagó ella, agradecida.
Finalmente, el exitoso productor teatral expresó su visión sobre la mentoría en Rolex junto a la argentina: “Estoy muy orgulloso de vos y del trabajo que hicimos juntos -le dijo-. Y me conmueve que hayas encontrado la forma de introducirte naturalmente en un musical”. Su discípula, que calificó la experiencia como “hermosamente estresante”, respondió a una pregunta que para cerrar el encuentro le hizo su mentor: “¿Qué canción recuerda Agustina San Martín?”. Entonces ella cantó Los Castillos, de María Elena Walsh, como su mamá hacía cuando la llevaba a dormir. Un clásico argentino en un teatro de Nueva York.
“Perpetua” búsqueda de la excelencia
La reconocida marca de relojes a nivel mundial no solo simboliza el prestigio y la elegancia a través de sus productos, sino que representa la búsqueda incansable de la excelencia a través del arte y la cultura. A 20 años de la creación de la Iniciativa Artística de Rolex para Mentores y Discípulos, el Rolex Arts Weekend se desarrolló en Brooklyn, Nueva York, donde distintas generaciones de artistas se reunieron para acompañar el compromiso de Rolex en el mundo de la cultura. “La iniciativa refleja la búsqueda de perpetuar la excelencia en el arte y la cultura”, afirmó Jean-Frédéric Dufour, CEO de Rolex, en la celebración de inicio en el BAM Howard Gilman Opera House: “Creemos que inspirar, preservar y educar son la clave”.
En esta iniciativa, selectos artistas de diferentes generaciones comparten una experiencia de intercambio artístico en su correspondiente disciplina: el arte, el cine y la música, por ejemplo. En la edición de 2020-2022 -extendida a dos años a causa de la pandemia de coronavirus- las cuatro duplas de artistas desbordaron de talento: Spike Lee (mentor) y Kyle Bell (discípulo), en la categoría de Cine; Carrie Mae Weems (mentora) y Camila Rodríguez Triana (discípula), en Artes Visuales; Phyllida Lloyd (mentora) y Whitney White (discípula), en el rubro del Teatro; y Lin-Manuel Miranda (mentor) y la argentina Agustina San Martín (discípula) en Open Category.
En el cierre de la jornada de celebración, Rolex anunció a los nuevos participantes del programa de Mentorías para el ciclo 2023-2024: El Anatsui (mentor) y Bronwyn Katz (protegida) serán los elegidos para la categoría de Artes Visuales; Bernardine Evaristo (mentora) y Ayesha Harruna Attah (protegida) para Literatura; Jia Zhang-Ke (mentor) y Rafael Manuel (protegido), para la categoría de Cine; Anne Lacaton (mentora) y Arine Aprahamian (protegida), en el área de Arquitectura; y Dianne Reeves (mentora) junto a ong Yi Jeon, en la categoría de Música.
Fuente: María Sol Coliva, La Nación