Tal vez sea por eso que varias de estas arquitecturas escalonadas cobran protagonismo entre los trabajos que el festival VideoDanzaBA presenta a partir de hoy en el Cultural San Martín. ¿O será otro golpe de G uasón, que las puso de moda desde el Bronx y para todo el mundo? Sin Joaquin Phoenix para certificarlo (¡qué revelación como bailarín resultó el actor!), la tendencia encuentra aquí ejemplares mecánicos, de caracol y cemento, en por lo menos tres buenos ejemplos: están las Escaleras sin fin de Margarita Bali (un nombre con mayúsculas que este año tiene su lugar en la sección «Trayectorias»), el espiral blanco de Lava, de Anadón y Dreyer (se verá en el apartado «Lo personal es político») y el video Time Dilation (una de las participaciones que Alemania hace en la categoría «Videominuto» de este encuentro internacional).
Cuerpo, movimiento, tecnología. Eso es videodanza. Con dirección de Silvina Szperling, el festival pionero del género en la región celebra casi un cuarto de siglo de presencia en Buenos Aires, a través de diecisiete ediciones desde 1995. Con el impulso de un gran centenario para conmemorar, este año suma a la tradicional competencia oficial, proyecciones y talleres, una muestra extraordinaria: «Merce Cunningham: lo elemental, lo impredecible, lo inesperado», que incluye una instalación, documentales y charlas dedicadas a realzar la obra de una de las figuras más importantes que tuvo la danza. Por algo el mundo entero está cerrando un 2019 en su honor: con el sello Cunningham Centennial importantes compañías han incorporado a sus temporadas las obras de este coreógrafo norteamericano que en su prolífica producción realizó grandes «descubrimientos». Parte de su legado es una colección de cincuenta films que se están exhibiendo en los cinco continentes.
No cabe duda del carácter revolucionario de Merce Cunningham (1919-2009). Como dicen Isabelle Ginot y Marcelle Michel, autores del libro La danza en el siglo XX, hay un A. C y D. C, un antes y después de Cunningham, en la historia de la danza moderna. Con su compañero, John Cage, se alzó con la famosa y controvertida idea de que la danza y la música podían crearse de manera independiente. El uso de operaciones azarosas, su trabajo fílmico (es mucho más que el coreógrafo tras la cámara) y el software como herramienta para explorar el movimiento antes de trasladarlo al cuerpo de los bailarines jugó un póquer de ases sobre la mesa y cambió el juego. Decía: «En el escenario, casi siempre es lo mismo, pero con la cámara, tienes la oportunidad de cambiar todo el cuerpo en el espacio, todo el cuerpo sin espacio, en otras palabras, toda la forma, pero también todas las secciones, de la forma hasta los más pequeños detalles». Con esta frase, el festival podría ungirlo a partir de ahora en «santo patrono» del videodanza.
Los cien años de un genio vigente
Trevor Carlson es miembro del Cunningham Trust, organismo coproductor junto con VideoDanzaBA de la muestra homenaje, una institución que el propio Merce fundó en 2000, nueve años de su muerte, en 2009, a los 90 años, para que su obra se mantuviera viva (de eso se trata el «plan legado»). En palabras de Carlson se trata de «una organización joven y ágil con un tesoro vasto para ser ofrecido en una variedad de formas diferentes», lo que incluye la misión de educadores en técnica Cunningham, supervisores de una obra que aún puede presentarse en vivo al público y custodios administradores de una gran cantidad de material asociado al artista.
Carlson es, además, uno de los nombres clave para que las actividades por los cien años del genio, que están dando la vuelta mundo, lleguen hasta aquí: presentará personalmente esta tarde la exposición y su libro-catálogo homónimo («Merce Cunningham: lo elemental, lo impredecible, lo inesperado») mientras termina de dictar en Buenos Aires un taller sobre DanceForms, el software de escritura coreográfica creado por el artista.
¿Cómo acercarse a Cunningham después de Cunningham? «La clave para comprender o encontrarse con su trabajo no es diferente ahora de lo que fue en el curso de su vida. Merce pensaba que como seres humanos todos tenemos historias y puntos de vista diferentes, lo cual hace posible que podamos experimentar la misma cosa de modo diverso, y que pueden surgir distintos resultados o reacciones a partir de la misma experiencia», respondeN. Y da un ejemplo: «Cunningham desalentaba el uso de notas sobre sus obras en los programas de mano, creía que el público era necesario para completar la performance, que sin él no había necesidad de presentar el espectáculo. E incluso que si solo había tres personas en el público uno debía entregar el mejor espectáculo, del mismo modo que lo haría en una noche con 3000 espectadores».
Video Escaleras sin fin, de Margarita Bali, en «Trayectorias»
La muestra, que podrá verse hasta el sábado en el marco del festival, cruza la obra del coreógrafo en cinco «diagonales» de indudable atractivo para los fieles, y se abre como un extenso campo de exploración para nuevas generaciones. «Sobre la renovación de los fieles -sigue Carlson- citaré a Mikhail Baryshnikov, que en una de las películas que se exhiben esta semana dice: ‘Merce hacía lo que hacía mucho antes de su época, y luego nos esperó a nosotros para que llegáramos a reconocer su obra como el brillante trabajo que es.» Creo que su trabajo aún habla por sí mismo y no parece caduco, para nada. De hecho, veo algunas obras y pienso: wow, eso pudo haber sido hecho ayer y no hace 40 años».
Todos a votar: videominuto en el aire
De Finlandia a Grecia y de Suiza a Brasil, sin escalas, casi una veintena de piezas que rondan los 60 segundos de duración integran la selección final que este formato tiene en el festival VideoDanzaBA. Ágiles por definición, más poéticas, contemplativas o reflexivas según el caso, las 17 obras participantes están colgadas en YouTube a la vista de todos para votar la ganadora. Para darle el premio del público a uno de estos cortos basta con un Me Gusta en el favorito de la playlist. Hay tiempo hasta el sábado 7 de diciembre, a las 18.
PARA AGENDAR
XVII Festival Internacional VideoDanzaBA, del 5 al 7 de diciembre 2019, en el Centro Cultural San Martín, Sarmiento 1551. Entrada Gratuita.
Fuente: Constanza Bertolini, La Nación