Héroes y villanos, incondicionales y ridiculizados. El documental «The Last Dance» , que mostró la carrera de Michael Jordan con los Chicago Bulls, con la temporada 97/98 como epicentro, expuso de manera muy cruda la relación del astro con sus compañeros, sus entrenadores y sus jefes. Con la serie ya finalizada, un breve repaso de lo que fue de la vida de los coprotagonistas de MJ a lo largo de su carrera, tras aquella temporada gloriosa.
Michael Jordan: Tras retirarse como campeón, se convirtió en el gerente de operaciones de los Washington Wizards, donde volvió durante dos temporadas, con buen suceso, pero lejos de los años de gloria con Chicago. En 2006 comenzó a comprar acciones de los Charlotte Hornets, que tienen su sede en North Carolina, donde creció y jugó en la Universidad. A partir de 2010 se convirtió en su dueño, cargo que ejerce hasta hoy sin demasiado éxito, ya que el equipo sólo llegó dos veces a los playoffs bajo su mandato y nunca pasó una ronda de play offs. En términos de negocios , siguió facturando como en sus años dorados y su fortuna se estima en 2.100 millones de dólares
Scottie Pippen: Se fue de los Bulls tras el último título y, tras pasar por Houston y Portland, regresó en la temporada 2003/2004 para cerrar su carrera en Chicago de la mano de John Paxson, que ya era vicepresidente ejecutivo del equipo. Quiso regresar al básquetbol en 2008 y jugó, sin mucho éxito, unos partidos en Suecia. Cayó en bancarrota después de un desfalco de su ex asesor financiero, Robert Lunn. En 2010 lo sumaron a los Bulls, primero como embajador y luego como asesor del presidente de la franquicia, Michael Reinsdorf hasta este año. En paralelo, trabajó como comentarista en diversas cadenas televisivas.
Phil Jackson : Después de tomarse un año sabático tras el último título con los Bulls, el entrenador fue contratado por Los Angeles Lakers, donde celebró cinco campeonatos con Kobe Bryant como principal figura y, los primeros años, también con Shaquille O’Neal. En 2011 se despidió de su cargo y cerró su carrera como técnico. En 2014 regresó a New York Knicks, el equipo en el que había sido jugador, como presidente de operaciones, cargo en el que se mantuvo, sin éxito, hasta 2017.
Jerry Krause: Principal responsable de la ruptura de la dinastía, después de haberla creado, el manager general de los Bulls no tuvo éxito con la reconstrucción que intentó y, argumentando problemas de salud, renunció a su cargo en 2003. Los años posteriores se desempeñó como buscador de talentos para franquicias de béisbol, una tarea que ya había desarrollado antes de trabajar con el básquetbol. El 21 de marzo 2017, a los 77 años, falleció aquejado de osteomielitis y enfermedades asociadas a esa afección, que le había sido diagnosticada un año antes.
Jerry Reinsdorf: A los 84 años, el histórico dirigente sigue siendo dueño mayoritario de los Bulls, con alrededor del 40 por ciento de las acciones, mientras que mantiene un 19 por ciento de los White Sox, el equipo de béisbol de la ciudad. En 2010, creó el cargo de presidente y director de operaciones, para el cual nombró a su hijo Michael, mientras que él quedó como presidente de la Junta Directiva de la franquicia.
Dennis Rodman: Tras irse de los Bulls en 1998, apenas pudo jugar 35 partidos en las siguientes dos temporadas entre Los Angeles Lakers y Dallas Mavericks. Ya fuera de la NBA y con apariciones esporádicas en la lucha libre, jugó algunos encuentros en México, en ligas menores de Estados Unidos, en Finlandia, Gran Bretaña y hasta en Filipinas. En paralelo, a pesar de sus adicciones, tuvo numerosas actuaciones en series y películas, e incluso llegó a ponerle su voz a su propio personaje en un capítulo de los Simpsons. También fue protagonista de documentales, que incluso lo llevaron a Corea del Norte, donde trabó amistad con el líder norcoreano Kim Jong Un. Incluso, se ofreció a ser mediador en el conflicto entre ambas naciones.
Steve Kerr: Su salida de los Bulls en 1998 le permitió llegar a San Antonio Spurs, donde ganó dos títulos y, en el segundo de ellos, fue compañero de Manu Ginóbili. Tras su retiro, fue parte de Phoenix Suns como general manager y comentarista televisivo, hasta que se convirtió en un entrenador muy exitoso con Golden State Warriors, conjunto con el que ganó tres títulos y llegó a cinco finales de la NBA. Incluso, su equipo rompió el famoso récord de 72 victorias y 10 derrotas que habían marcado los Bulls de 1996, con él en sus filas.
John Paxson: El autor del lanzamiento que valió el título en 1993 ante Phoenix Suns se retiró de los Bulls al año siguiente, pero siguió ligado al equipo como asistente de Phil Jackson en los últimos campeonatos. A partir de 2003, tras la renuncia de Jerry Krause, fue nombrado como gerente general, cargo que ocupó hasta 2010, cuando fue ascendido a vicepresidente de operaciones de la franquicia. El mes pasado, los Bulls nombraron en su cargo al lituano Arturas Karnisovas, por lo que Paxson pasó a desempeñarse como asesor.
Horace Grant: Sindicado por Jordan como la fuente principal del libro «Las reglas de Jordan», donde se reveló la tiranía que ejercía el astro sobre sus compañeros, el «mellizo» fue clave en los tres primeros títulos y se marchó a Orlando durante el primer retiro de MJ. Luego ganó un título con los Lakers, ya veterano y con Jackson como entrenador. Retirado de la actividad, la NBA lo designó como Embajador de Buena Voluntad del organismo en 2010 y participa de diferentes eventos de la Liga en diferentes partes del mundo. Tiene seis hijos y dos de sus sobrinos llegaron a la NBA. También brinda charlas de motivación y liderazgo.
Toni Kukoc: Cuando se desarmó la dinastía, el croata quedó como el jugador más destacado, aunque los malos resultados del equipo opacaron su liderazgo. Luego pasó por Philadelphia, Atlanta y Milwaukee, hasta su retiro en 2006. De regreso en Chicago, se transformó en asesor del presidente Jerry Reinsdorf, además de convertirse en un muy buen golfista. «Soy mejor golfista que Jordan, es algo que se puede demostrar», dijo sobre sus habilidades sobre un campo de golf.
BJ Armstrong: Otro de los jugadores del primer tricampeonato, que luego pasó por Golden State, Charlotte y Orlando, para regresar a los Bulls para terminar su carrera en el mismo sitio donde la había comenzado. Tras su retiro se unió a Jerry Krause en las operaciones del equipo y, más tarde, pasó a desempeñarse como reclutador de talentos. Con los años prefirió la representación de jugadores y se convirtió en agente de varios miembros de la NBA.
Ron Harper: Tal vez el jugador más infravalorado del documental en relación a su importancia en el equipo. Tartamudo en su niñez, el escolta se fue más tarde a los Lakers, donde ganó otros dos títulos con Phil Jackson. Ya retirado, trabajó dos temporadas como asistente de Detroit Pistons, y en los últimos años participó de acciones promocionales de la NBA por el mundo. Su hijo, Ron Harper Jr. es uno de los mejores proyectos universitarios en Rutgers y se estima que será elegido en el draft de 2021.
Luc Longley: El gigante australiano también dejó Chicago tras el título del 98, para jugar en Phoenix y después en New York Knicks. Regresó a su país donde se convirtió en entrenador y, desde 2013, formó parte del cuerpo técnico de la selección australiana como asistente. En ese cargo estuvo en el último Mundial de China el año pasado, donde Argentina logró el subcampeonato, aunque anunció que no continuará después de que se confirmara de que Brett Brown reemplazará a Andrej Lemanis como entrenador principal.
Bill Wennington: El pivot canadiense, que jugó dos años más en Sacramento Kings, tiene mucho más protagonismo en la serie que el que tuvo en el equipo. Desde hace más de una década es el comentarista de la transmisión radial oficial de los partidos de los Bulls.
Scott Burrell: El jugador que sufrió las mayores deingraciones por parte de Jordan estuvo sólo una temporada en los Bulls, en coincidencia con «The Last Dance». Tras su paso por Chicago, estuvo con los Nets y los Hornets antes de convertirse en un trotamundo con experiencias en China, Filipinas, Japón y España, donde brilló en el Bilbao Basket. Ahora es el entrenador de Southern Connecticut State University, uno de los principales equipos universitarios de la NCAA.
Bill Cartwright: Pivot titular en el primer tricampeonato, no era de los preferidos por Jordan, que luego lo tuvo como asistente de Phil Jackson en la segunda tanda de titulos. Llegó a ser entrenador de los Bulls, pero sin éxito. Tras dirigir en Japón y a la selección mexicana, pasó a desempeñarse como Director de Iniciativas Universitarias en la Universidad de San Francisco, donde había iniciado su carrera antes de llegar a la NBA.
Jud Buechler: Como varios de sus compañeros, el tirador dejó el equipo después del segundo tricampeonato para fichar con Detroit Pistons. Luego pasó por Phoenix para retirarse en Orlando en 2002. A partir de 2016 se desempeñó como asistente técnico de Los Angeles Lakers y desde 2018 lo hace en New York Knicks, donde actualmente es asistente del técnico Mike Miller.
Doug Collins: El entrenador que le dio el rol de superestrella a Jordan dirigió otros tres equipos (Detroit, Washington y Philadelphia), pero nunca pudo llegar a una final de Conferencia. En paralelo, también fue comentarista televisivo. En 2013 dejó Philadelphia, donde dirigió a Andrés Nocioni, para pasar más tiempo con sus nietos. En 2017 lo anunciaron como asesor de operaciones basquetbolísticas de los Bulls.
Fuente: Página12