En 2025, Los Ángeles será el escenario de un hecho revolucionario para el mundo de la cultura, con la inauguración de Dataland, el primer museo dedicado al arte creado con inteligencia artificial (IA), bajo la dirección del artista especializado en nuevos medios y tecnologías Refik Anadol. Se trata de un espacio que “operará en la intersección de la imaginación humana y el potencial creativo de las máquinas, estableciendo un nuevo modelo para las instituciones culturales en la era digital”, según indica su sitio oficial.
Aún no hay un horizonte claro respecto al impacto que la tecnología tendrá sobre las actuales y futuras generaciones de artistas. En el caso de la música, plataformas de streaming como Apple Music y Spotify decidieron eliminar de sus catálogos cientos de canciones creadas con IA para mantener la calidad y autenticidad del contenido. Por su parte, Hollywood encendió sus alarmas el año pasado con la huelga de actores. Entonces, ¿es la IA una herramienta capaz de potenciar la creatividad y explorar nuevas experiencias y formatos, o un camino hacia la pérdida del factor humano?
“ChatGPT rechaza cualquier noción de lucha creativa, esa que hace que nuestros esfuerzos animen y nutran nuestras vidas, dándoles profundidad y significado. Rechaza que haya un espíritu humano colectivo, esencial e inconsciente que fundamenta nuestra existencia, conectándonos a todos a través de nuestro esfuerzo mutuo”, escribió el músico y escritor australiano Nick Cave, en una carta publicada en agosto de 2023.
Bajo esta línea, la Alianza para los Derechos de los Artistas (ARA, por sus siglas en inglés) señaló, a través de un comunicado firmado por más de 200 músicos -como Billie Eilish, Katy Perry, Jon Bon Jovi y Pearl Jam-, que la IA que devalúa la música y vulnera los derechos de los artistas humanos. “Hay que detener este asalto a la creatividad humana”, remarcó la organización.
Pero no todas las voces de la industria creativa apuntan hacia el mismo lado. En contraste, para el cineasta James Cameron, “la intersección de la IA generativa y la creación de imágenes CGI es la próxima ola”, y “abrirá nuevas vías para que los artistas cuenten historias de formas que nunca habríamos imaginado”. Por este motivo, el director de Terminator y Titanic se unió a la junta directiva de Stability AI, una de las principales plataformas de IA generativa.
El uso de IA en el proceso creativo
La creación de una obra artística implica un proceso no solo de introspección, sino también de prueba y error. Allí radica el sentido y propósito del arte, según explicó a LA NACION Ramiro San Honorio, realizador audiovisual, guionista y presidente del Consejo Asesor de Nuevas Tecnologías de Argentores.
“Hay ciertas cuestiones humanas, como la emocionalidad, que no hay que dejar de lado. En el proceso creativo se prueban nuevos caminos, se conectan experiencias vividas por uno e incluso por otros. Las máquinas carecen de todo esto y es necesario atravesar por ese proceso de riesgo”, detalló. San Honorio agregó que la IA no posee estas cualidades, y hasta el momento solo tiene la capacidad de replicarlas.
En este sentido, el psicoanalista José Eduardo Abadi advirtió sobre los peligros de delegar por completo esta tarea a la IA: “Pensar es siempre un proceso singular e implica pensar de nuevo. Creo que cualquier cosa que nos haga perder esa exploración va a restarle la singularidad que tiene la obra artística”.
Para los expertos en IA, la clave reside en cómo se utiliza esta tecnología. “La IA permite a los artistas explorar nuevas formas de creación y expresar ideas que antes eran técnicamente complejas o inalcanzables. Tiene que ser un complemento, no un sustituto de la creatividad”, indicó Nicolás Ferrero, CEO & socio de Bermuda, una agencia que fusiona la creatividad con la tecnología.
En este sentido, el programador Santiago Siri se refirió al “arte del prompt” ya que, si bien la IA resuelve pedidos en cuestión de segundos, eso no significa que automáticamente se obtenga una obra artística. “La conversación con una IA puede llevar días hasta que se obtiene un resultado satisfactorio. Donde antes se generaba una imagen, ahora se generan 20, entonces se multiplica la expresividad”, precisó.
Por su parte, Ferrero sumó que, mientras esta tecnología se utilice para transmitir un mensaje, las obras creadas con IA pueden considerarse como arte.
Democratización del arte
Solo en el primer trimestre de 2023 se subieron aproximadamente 120.000 nuevas canciones al día a plataformas como Spotify, hechas con IA, según un informe de la empresa Luminate. Para Siri, la combinación entre arte e IA es una “caja de Pandora” que puede abrir un camino hacia la democratización del arte. “Creo que habrá nuevas experiencias estéticas, formatos y estructuras. Va a ser una herramienta indispensable para ayudar a la humanidad a entenderse más allá de los límites del arte tradicional”, aseguró.
Sin embargo, los expertos también señalan que el ilimitado acceso a estas tecnologías puede llevar a la pérdida de calidad y autenticidad de las obras. Al respecto, Fernando Barbella, director general creativo, dijo a este medio que la clave en esta “nueva era” de la cultura será la originalidad: “La batalla se va a seguir librando en términos del punto de vista y detalles inimitables que solo pueden proceder de la experiencia personal”. A su vez, esa será razón por la que habrá una revalorización de las cualidades humanas.
Por su parte, San Honorio subrayó la importancia de regular la IA y trabajar en códigos de ética. “La herramienta es aquello que el humano utiliza y tiene todavía dominio, pero estamos a las puertas de no tener el dominio absoluto sobre esta tecnología. Su velocidad es imparable”, advirtió.
“Cada vez habrá más creadores y productores, quizás llegando a menos pero más focalizadas y específicas audiencias. Pero al final los que marquen camino serán aquellos que destaquen por su talento, compromiso, resiliencia y originalidad”, resumió Barbella.
Fuente: La Nación