Margot Robbie, Matt Damon y Jennifer Lopez son algunos famosos con talentos ocultos.
Entre película y película, los artistas de Hollywood dedican su tiempo libre a actividades en las que son tan buenos como en la actuación. Angelina Jolie tiene brevet de piloto desde hace veinte años y vuela su propio avión, un clásico Cirrus SR22, con motor de pistón. John Travolta es otro amante del aire: tiene licencia para pilotear grandes aviones (Boeing 737 y 747, los que se usan en vuelos comerciales) y posee varios en su hangar: un Bombardier Challenger 601, un Boeing 707-138B y un Eclipse 500. Geena Davis y Keanu Reeves se lucen con su puntería en la vida real. La protagonista de Thelma & Louise practica tiro con arco desde 1997 y fue finalista para ingresar al equipo olímpico de Estados Unidos en esa disciplina. En tanto, el intérprete de John Wick dispara rifles de asalto semiautomáticos con mira, pistolas y escopetas tan bien como en la ficción. La cocina es otra pasión que comparten algunas celebridades, como Jennifer Lopez, que suele publicar en sus redes sociales los platos que aprendió de su familia puertorriqueña, y Alejandro Sanz, que enseña a preparar menús vegetarianos. Últimos, pero no menos importantes, tres actores que tienen habilidades peculiares: Margot Robbie es una hábil tatuadora (tiene su propio aparato y lo usa con sus amigos), Matt Damon personificó a un jugador de póker en la película Apuesta final, en 1998, y se hizo tan fanático de ese juego que compite internacionalmente, y Mark Ruffalo ha demostrado su destreza con el monociclo. El protagonista de Avengers bromeó en alguna ocasión: “En el fondo quería ser payaso”.
Fuente: La Nación