El Chavo del 8 es una creación de Roberto Gómez Bolaños que ahora adquiere otra luz gracias a la inteligencia artificial El Tiempo/Colombia
Las personas que se pregunten cómo se vería el Chavo del 8 hoy si fuera un niño real pueden empezar a responder esta pregunta, a través de asistentes de inteligencia artificial.
Este querido personaje, creada e interpretada por el inolvidable actor Roberto Gómez Bolaños, o Chespirito, se dio a conocer al mundo en 1973 cuando se estrenó la historia de este niño huérfano. El joven Chavo, personificado por el actor a sus 44 años, llega a una humilde vecindad, donde es adoptado por sus habitantes, adultos y niños que pasaron a la historia como Don Ramón, la Chilindrina, Doña Florinda y Quico, entre muchos otros que dejaron su marca en la tira, hoy famosa a nivel mundial.
Por la enorme popularidad del Chavo del 8, más de uno querrá imaginar cómo se vería el protagonista de la serie si fuera un niño de verdad en los tiempos actuales. Los asistentes motorizados por inteligencia artificial, que recopilan información de la web y la cohesionan en respuestas textuales o de imágenes en segundos, son una buena manera de responder esta pregunta de manera parcial.
Una de las plataformas habilitadas para hacer esta actividad es Copilot, desarrollada por las empresas Microsoft y OpenAI. Esta app, que diseña imágenes en tiempo real y en pocos minutos, cuenta con tecnologías avanzadas de IA, generada por los últimos modelos de lenguaje de OpenAI, GPT-4 y DALL·E 3. A partir del prompt textual: “Cómo se vería el Chavo del 8 hoy en la vida real”, el asistente genera una serie de imágenes para pensar a estos personajes bajo otra luz.
Cómo se vería hoy el Chavo del 8, según la inteligencia artificial
La primera foto del Chavo del 8 hoy en la vida real creada por la inteligencia artificial lo muestra como una versión actualizada del conocido personaje de Chespirito: es un niño que contempla a los ojos del espectador con una mirada serena, al borde de la resignación. Detrás de él se adivinan las entradas de la humilde vecindad en la que vive, con casas de chapa pintadas en colores diversos. El Chavo del presente viste un gorro de pescador a cuadros verdes, blanco y gris que le ocultan los cabellos lacios castaños. Su camiseta abotonada tiene un patrón de rayas horizontales de color marrón, azul, celeste y blanco.
La segunda imagen que la IA crea del Chavo del 8 hoy lo muestra en una de sus posiciones típicas: oculto a medio cuerpo en un barril. En este caso, el barril es de metal y aparece algo percudido, lo que no se refleja en la expresión alegre del niño que lo ocupa. Detrás del Chavo del presente, aparece la vecindad, contaminada con basura y otros desechos que se acumulan contra las paredes sin pintar y las ventanas enrejadas. En su búsqueda por hacer lo mejor de esta miseria, el Chavo mira con ojos emocionados y llenos de esperanza a cámara, mientras sus manos se aferran al borde oxidado del tonel.
La última imagen para imaginar cómo se vería hoy el Chavo del 8 según la inteligencia artificial guarda similitudes con la primera: muestra al joven Chavo del presente parado en un pasillo de la vecindad. Además de su infaltable gorro verde, viste una camisa con franjas verticales blancas, celestes, marrones y negras. Su mirada profunda y expresión seria parecen conscientes de la postergación social que vive, la cual también se refleja en los techos de chapa y la estructura precaria de la calle, cuyo es de tierra o al menos está cubierta de polvo.
Fuente: La Nación