En las escuelas primarias de la ciudad de Buenos Aires cambiarán el método para enseñar a resolver problemas matemáticos y a leer y escribir

Empezará a regir el año próximo en todas las escuelas públicas y privadas de CABAl; buscan mejorar los niveles de aprendizaje de lectoescritura y de aritmética y geometría.

Se pasará de un modelo conocido como metodología de la espera, que no prescribe la corrección durante el proceso de aprendizaje, al explícito, estructurado y sistematizado, que sí lo hace.

A partir del próximo ciclo lectivo, todos los alumnos de las escuelas primarias de la ciudad de Buenos Aires estudiarán con un nuevo diseño curricular. Los establecimientos de gestión pública y privada deberán implementar una nueva currícula que tiene como principal objetivo mejorar el nivel de lectoescritura de los chicos y lograr que resuelvan problemas matemáticos vinculados con la vida cotidiana.

De acuerdo con los resultados de evaluaciones realizadas por el gobierno porteño, cuatro de cada 10 chicos de primer grado no reconoce las letras (Progresiones 2023) y seis de cada 10 alumnos de séptimo grado no puede resolver problemas matemáticos sencillos (FEPBA 2023). El nuevo diseño curricular planteado por el Ministerio de Educación de la ciudad, a cargo de Mercedes Miguel, busca enfrentar este problema transformando un plan que no se modificaba desde 2004.

Diagnóstico de los aprendizajes actuales

Los datos surgen de evaluaciones realizadas por el gobierno porteño

Diagnóstico de los aprendizajes actuales
Fuente: Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires / LA NACION

En lo que respecta a lengua, el área que verá uno de los cambios más importantes, se pasará de un modelo conocido como metodología de la espera, psicogénesis o método constructivista, que no prescribe la corrección durante el proceso de aprendizaje, al explícito, estructurado y sistematizado, que sí lo hace.

“El método que tenemos hoy se basa en que los niños, de acuerdo a su contexto, van encontrando la manera de alfabetizarse correctamente. Valora la intención de la escritura y no permite la interrupción del docente para lograr la escritura correcta. Es decir, no se corrige porque se entiende que es un proceso en el cual en algún momento el chico logra alfabetizarse”, dijo Miguel. De acuerdo con el Ministerio, un ejemplo de lo que sucede con este método es que a un estudiante que hoy escribe “cise” al querer escribir “quise” no se lo corrige ya que tuvo la intención de hacerlo bien.

“Con este nuevo diseño se prescribe la intervención y le devolvemos al docente la autoridad pedagógica para poder operar sobre la alfabetización de los chicos. Que corrijan, que intercedan, que acompañen para corregir en el momento y grado que corresponde para que no haya un arrastre en la falta de alfabetización correcta que hace que los chicos lleguen a secundaria con problemas de comprensión de textos”, explicó Miguel.

Enfoque

En matemática, el principal cambio no estará puesto en el contenido, sino en el enfoque de enseñanza: será uno más práctico y funcional en el que la geometría, la medida, el análisis del dato y la estadística cobrarán protagonismo. “La idea es que los alumnos puedan interactuar con una matemática ligada a la vida real”, describió Miguel.

Además, el nuevo diseño curricular establecerá metas e indicadores para saber exactamente cuáles son los aprendizajes esperados en cada grado.

Por ejemplo, se espera que un alumno finalice primer grado sabiendo, por el lado de lengua, leer palabras nuevas sin errores y escribir palabras sin omitir letras, y por el lado de matemática, reconocer y comparar números de hasta dos cifras de manera escrita y oral, entre otros objetivos. Del mismo modo, el nuevo diseño establece que un chico de séptimo grado debería finalizar el curso comprendiendo diferentes textos (cuentos, novelas, poemas, obras de teatro, prólogos e introducciones de obras literarias, artículos informativos, publicidades y noticias), pudiendo recuperar las ideas centrales y relacionarlas con las obras literarias y los textos que leen en otras áreas disciplinares, mientras que, en matemática, debería leer, escribir y ordenar números naturales y racionales, reconociendo sus diversas formas de representación y utilizando las regularidades de la serie numérica para trabajar con números grandes.

“Los indicadores son la gran diferencia con el sistema actual. Esto ordena el sistema educativo”, dijo Miguel.

Otra de las novedades que presenta el diseño curricular es que incorporará lo que desde la cartera educativa denominan “contenidos de áreas clave para el siglo XXI”: bienestar socioemocional, educación digital y financiera e inteligencia artificial. Y también contemplará el desarrollo de “capacidades clave” como la autonomía para aprender, pensamiento reflexivo y crítico, comunicación, compromiso y colaboración y resolución de problemas.

Por último, el nuevo diseño curricular establecerá la cantidad de horas fijas que deberá enseñarse de cada área, algo que, de acuerdo el Ministerio, no sucede con el diseño actual.

También se enseñará bienestar socioemocional, educación digital y financiera e inteligencia artificial
También se enseñará bienestar socioemocional, educación digital y financiera e inteligencia artificialGentileza del GCBA

La discusión

La presentación de esta nueva currícula enfocada en mejorar la alfabetización de los estudiantes se enmarca dentro del Plan Federal de Alfabetización, un acuerdo firmado en julio por las 24 jurisdicciones sobre la necesidad de tomar medidas urgentes para que los chicos no sigan egresando del colegio sin aprender cuestiones básicas como comprender un texto o resolver una operación matemática sencilla.

A la luz de este acuerdo, la discusión entre el método constructivista y el estructurado, que no es nueva, vuelve al centro del debate educativo.

Jorge Macri, jefe de Gobierno porteño, explicó que la adopción de la psicogénesis fue una tendencia global, pero que la mayoría de los países, a diferencia de la Argentina, la abandonaron rápidamente al analizar los resultados.

“En Reino Unido, por ejemplo, la soltaron a los cuatro años de haberla implementado, cuando cayeron del puesto 3 al veintipico y ahora volvieron al 7. Estamos haciendo lo que el mundo hace porque hace tiempo que desgraciadamente dejamos de ser líderes en aprendizaje y enseñanza. Hay un vuelta la modelo anterior, con abordajes distintos y conceptos nuevos, pero en el mundo hay una vuelta la modelo anterior”, dijo.

En la misma linea, Miguel agregó que hoy los países que tienen una mejor performance en alfabetización en las pruebas PISA tienen modelos estructurados como el que se implementará en la ciudad. “Francia, Canadá, estados de China, Nueva Zelanda, Australia, Chile, Brasil, México y Uruguay ya están en este modelo”, enumeró.

Aprendizajes fundacionales

Según la información proporcionada por el Ministerio, el nuevo diseño curricular está sostenido por un modelo de aprendizaje muy enfocado en reforzar aprendizajes fundacionales, en este caso lengua y matemática, durante una temprana edad para preparar a los chicos para emprender desafíos educativos más complejos.

“Esos saberes esenciales son como los primeros ladrillos de una construcción que deben ser sólidos para poder sostenerse a largo plazo. Si los chicos no aprenden a leer y escribir, no podrán adquirir el resto de los conocimientos para lograr construir su futuro ni continuar por un camino lleno de aprendizajes, habilidades y saberes, donde cada conocimiento impulse al siguiente”, planteó Miguel.

Desde el Ministerio de Educación dijeron que este cambio se viene trabajando desde hace dos años –cuando la titular de la cartera era Soledad Acuña– y que se elaboró de forma participativa con más de 15.000 miembros de la comunidad educativa.

Según Miguel, la modificación, que contempla también un ajuste en los institutos de formación docente para que los docentes sean capacitados según este nuevo enfoque, tuvo una “gran aceptación” por parte de los 28.000 maestros que se verán afectados. “Los gremios docentes están absolutamente de acuerdo con esto. Ellos ven lo que pasa adentro de las aulas. Hasta las escuelas más abrazadas al modelo actual están fascinadas con el nuevo enfoque”, concluyó Miguel.

Fuente: La Nación