Luego de una demora de aproximadamente una hora a causa de una tormenta eléctrica, y con una previa que tenía un fuerte aroma a festejos argentinos, Lionel Messi fue el gran protagonista de una noche en la que celebró su ingreso a Inter de Miami, el club que será la casa del campeón del mundo. La noche prometía ser auspiciosa a pesar de la lluvia, y fueron muchas las postales que dejó la fiesta que celebró la llegada del argentino.
Durante una lluvia que no daba tregua, los hinchas del club y muchos argentinos buscaron refugiarse del agua, a la espera de los festejos. Algunas caras muy famosas se dejaron ver, como fue el caso de Victoria Beckham, esposa de David Beckham, uno de los propietarios de Inter Miami. Poco a poco y a medida que el agua amainaba, todos los asistentes comenzaron a ocupar sus puestos, y el clima de entusiasmo fue en aumento. El “Chiqui” Tapia, Segui Agüero y Marc Anthony, entre otros, también dijeron presente en la jornada. En ese momento, Messi llegó al estadio junto a Antonella Roccuzzo y sus hijos, y saludó a todos sus seguidores. Cuando las primeras fotografías de ella comenzaron a circular, pronto fueron muchos los que subrayaron su look, un pantalón rosa en guiño a los colores de Inter Miami.
La noche empezaba a caer y David Beckham salió a la pasarela que servía de escenario para darle la bienvenida a Messi. Cuando tuvo la posibilidad de dirigirse a su público, el rosarino expresó con alegría: “Quiero dar las gracias a toda la gente de Miami por este recibimiento y el cariño que me demuestran desde que llegué a la ciudad. Estoy muy ilusionado de estar acá con ustedes. Para nosotros fue espectacular desde que llegamos. Tengo muchas ganas de entrenar, vengo con ganas de competir, quiero ganar y ayudar al club a que siga creciendo”.
Entre los aplausos de sus fans y un clima de verdadera fiesta en el DRV PNK Stadium, Messi concluyó: “Estoy muy feliz de haber elegido esta ciudad con mi familia, este proyecto. No tengo dudas de que la vamos a pasar muy bien”. Más adelante se sumó al escenario la familia del astro, y el pequeño Ciro llevó en su yeso un detalle muy argentino: un dibujo con la bandera nacional.
Entre algunos de los momentos más aplaudidos de la velada, se destacó un breve momento musical a cargo de Camilo, que interpretó una versión muy personal de “Muchachos”, el himno mundialista que musicalizó el gran triunfo de la selección argentina durante el 2022. En la vereda opuesta, la interpretación del himno argentino a cargo de Abel Pintos, no se pudo concretar.
Qué le espera a Messi en su nuevo club
Cuando Lionel Messi reveló de forma sorpresiva que su próximo club sería Inter Miami, aún faltaban muchas cosas por confirmarse para terminar de cerrar el acuerdo, pero más de un mes después de aquella entrevista con Marca y Mundo Deportivo, esas dudas ya fueron resueltas. El número 10 estará de nuevo bajo las órdenes de Gerardo “Tata” Martino, cobrará un salario que oscila entre los 50 y 60 millones de dólares al año que incluyen acciones en el club y será cubierto parcialmente por Adidas y Apple. Debutará el 21 de julio en la Leagues Cup, contra el conjunto mexicano Cruz Azul.
La MLS lleva intentando aumentar el interés por el fútbol en Miami desde hace al menos 25 años, cuando Miami Fusion se convirtió en la primera franquicia de expansión de la liga, pero a pesar de que contó con una estrella mundial como Carlos Valderrama en su plantel, la asistencia al estadio Lockhart fue siempre pobre, y desapareció en 2002, cuatro años después de su fundación.
Casi dos décadas pasaron hasta que se reavivara el interés por tener un club en la región. Al aprovechar su cláusula para fundar una nueva franquicia estadounidense por un precio reducido, David Beckham eligió ubicarla de vuelta en el sur de Florida, y en2020 Inter Miami salió a la cancha en el mismo lugar donde se había radicado Fusion, pero bajo el nombre de DRV PNK.
En lo futbolístico, el trabajo de Martino para revertir la situación en un plantel que hoy tiene como figuras a Leonardo Campana y Rodolfo Pizarro llevará tiempo, pero Jorge Mas, uno de los dueños de la franquicia, planea acelerarlo en este mercado de pases. Poco después de anunciar a Messi, el club oficializó la incorporación de Sergio Busquets, compañero del número 10 durante 13 años en Barcelona. Pero se espera que no sea la última; el viernes, el diario estadounidense Miami Herald confirmó que se llegó a un acuerdo para que otro ex culé, Jordi Alba, también finalice su llegada a Inter Miami. Su arribo tendrá una particularidad: no lo hará como Jugador Designado (DP), la figura que utilizaron sus predecesores para cobrar por fuera de los límites salariales asignados por la MLS, sino que ajustará su sueldo a estos límites, lo que significará una rebaja considerable de lo que percibía en Barcelona y podría otorgar espacio a más llegadas estelares.
El club al que llega Messi es uno que está muy lejos de sus dos anteriores en materia de gloria deportiva. Inter Miami no tiene la rica historia de Barcelona, ni la obligación de pelear por todos los frentes como en PSG, sino uno en su infancia, con mucha promesa, pero cuyos primeros años de existencia fueron dominados por el caos y la mediocridad.
Quienes conocen al capitán argentino, no obstante, saben que no arribará a Estados Unidos con la intención de descansar y bajar la guardia de cara a los últimos años de su carrera, sino que buscará mantener el nivel y el gen competitivo. El desafío será sacar a la franquicia de su actual estado y exprimir un potencial que, por ahora, apenas insinúa.
Fuente: La Nación