Hace unos meses, se dió a conocer el plan de Elon Musk para construir su propia ciudad en las afueras de Austin, Texas, para los trabajadores de SpaceX y The Boring Company, según un informe del The Wall Street Journal.
Según la publicación, el multimillonario y su equipo adquirieron al menos 1416 hectáreas de tierra en Bastrop, Texas, a más de 56 kilómetros de Austin. Un programador que vive en la zona de Texas comentó que los carteles de una ciudad llamada Snailbrook, en referencia a la mascota de The Boring Company, ya empezaron a aparecer en la zona.
Musk y sus colaboradores describieron la visión de la ciudad como una “especie de utopía de Texas a lo largo del río Colorado”, informa el medio estadounidense. La comunidad estará formada por casas prefabricadas y contará con una pileta, una zona deportiva al aire libre, un gimnasio y una escuela.
El CEO de Tesla también tiene planes para construir un complejo privado en las afueras de la ciudad, donde podría residir, según el informe.
Otros empresarios y líderes poderosos como Peter Thiel, Dan Gilbert, Kevin Plank, Marc Lore, Bill Gates y el príncipe heredero Mohammed bin Salman, también intentaron crear sus propias comunidades utópicas a lo largo de los años.
Una ciudad en el desierto
En 2021, el ex CEO de Walmart, Marc Lore, anunció planes para construir Telosa, una ciudad en el desierto que sería gobernada por el “equitismo” y funcionaría con energía renovable. El nombre proviene de una antigua palabra griega que significa “propósito más elevado”.
La página web de Telosa establece que la ciudad ofrecerá igualdad de acceso a la educación, atención médica y transporte a sus ciudadanos, y se moverán en vehículos autónomos. También estima que el proyecto costará alrededor de US$400.000 millones y que los ciudadanos probablemente serán seleccionados a través de un proceso de solicitud. Actualmente, no está claro dónde se encuentran los planes de Lore para la ciudad futurista.
Una ciudad flotante
En 2008, Peter Thiel lanzó una misión para desarrollar una ciudad flotante autónoma llamada Seastead que se encontraría en aguas internacionales. El concepto se originó en el movimiento seasteading, que busca establecer comunidades independientes en el mar.
La idea era crear una comunidad que pudiera resistir las olas, las tormentas y otros desafíos del mar, utilizando tecnología avanzada de construcción y energía renovable. Se espera que la ciudad se autofinancie a través de negocios y turismo, y que se rija por una constitución propia.
Por el momento, únicamente se desarrollaron algunos prototipos y se llevaron a cabo experimentos en alta mar. Sin embargo, el proyecto enfrenta desafíos legales y regulatorios, ya que no está claro bajo qué jurisdicción estaría la ciudad y cómo se regiría.
Una ciudad sostenible y vertical
Por otra lado, en Arabia Saudita, el príncipe heredero Mohammed bin Salman está construyendo The Line como parte de un desarrollo más grande llamado Neom. Se anunció en enero de 2021 y está diseñada para ser una ciudad completamente sostenible, libre de emisiones de carbono y autosuficiente en términos de energía.
Tendría 170 kilómetros y se construirá a lo largo de una línea recta con el objetivo de proporcionar un lugar para vivir y trabajar que sea respetuoso con el medio ambiente y que fomente un estilo de vida saludable. Sin embargo, aún es un proyecto en desarrollo y se espera que la construcción de la ciudad tome varios años.
Una ciudad inteligente
Bill Gates invirtió alrededor de US$80 millones en planes para una ciudad inteligente en las afueras de Phoenix, Arizona en 2017, conocida como Belmont. Con la intención de diseñar una superficie de más de 100 kilómetros cuadrados y con una población de hasta 182.000 habitantes, se espera que la ciudad cuente con tecnologías avanzadas y sea totalmente sostenible y conectada a internet de alta velocidad.
Entre las características que se anunciaron en su momento se mencionaron viviendas accesibles, infraestructura vial inteligente, tecnologías avanzadas de energía renovable, redes de transporte público eficientes, espacios verdes amplios y conectividad total a internet de alta velocidad. Actualmente, el proyecto aún está en sus etapas iniciales y no hay una fecha oficial para la construcción de la ciudad.
Una isla exclusiva
Quien podría haber hecho su sueño realidad es Larry Ellison, el cofundador de Oracle, quien compró alrededor del 98% de la isla hawaiana de Lanai por unos US$300 millones en el año 2012. Después de adquirir la propiedad, construyó un restaurante Nobu, desarrolló un resort con un centro de bienestar y llevó a cabo una renovación de los hoteles existentes en la isla.
Desde entonces, Lanai se convirtió en un destino elegido por los ultra ricos, y atrae a visitantes como Tom Cruise, Cindy Crawford y Will Smith. Ellison, por su parte, se mudó a la isla a tiempo completo en 2020. Actualmente, unos 3000 habitantes residen en la isla.
Fuente: La Nación