Durante los últimos 60 años, los científicos han discutido sobre si los huevos son malos para el corazón, dijo Walter Willett, profesor de nutrición en la Escuela de Salud Pública TH Chan de Harvard.
Y los nutricionistas han debatido si los altos niveles de colesterol que se encuentran en los huevos superan la cantidad de proteínas que ofrecen.
“Han sido menospreciados durante tanto tiempo”, dijo la Dra. Selvi Rajagopal, profesora asistente de medicina en la Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins. Las afirmaciones que flotan en las redes sociales de que los huevos pueden curar el covid o provocar coágulos de sangre “simplemente no tienen fundamento”, dijo.
Esto es lo que se sabe sobre los beneficios y riesgos de los huevos.
¿Por qué los huevos tienen mala reputación?
En las décadas de 1960 y 1970, dijo el Dr. Willett, los médicos expresaron su preocupación acerca de si los alimentos ricos en colesterol podrían elevar la cantidad de este en la sangre. Sospechaban que los altos niveles de ciertas lipoproteínas, que transportan el colesterol por todo el cuerpo, podrían formar placa en las paredes de los vasos sanguíneos.
Dado que los huevos son ricos en colesterol (una sola yema de huevo puede contener alrededor de 200 miligramos) y los niveles altos de lípidos se han relacionado con una mala salud cardiovascular, algunos señalaron como una solución dietética fácil el deshacerse de los huevos benedictinos y así proteger el corazón.
Pero durante la última década, dijo la Dra. Rajagopal, los investigadores han cuestionado si comer alimentos ricos en colesterol en realidad aumenta los niveles de lípidos. La evidencia existente no ha establecido que la persona promedio aumente definitivamente el colesterol “malo”, conocido como LDL-C, en función de su dieta.
La grasa saturada es un culpable mucho más apremiante de las enfermedades cardíacas, dijo Samantha Heller, nutricionista clínica sénior de NYU Langone Health, y aunque los huevos contienen altas cantidades de colesterol, “si comés una tortilla de queso hoy y no has comido una en un tiempo, sus arterias no se obstruirán de inmediato”, dijo.
Los huevos también tienen un alto contenido de proteínas, lo que los convierte en una alternativa a la carne, que tiende a tener un alto contenido de grasas saturadas.
En 1968, la American Heart Association recomendó que los estadounidenses no consumieran más de tres huevos por semana; para 2015, sin embargo, ese pensamiento cambió en gran medida. Las pautas dietéticas actuales de los EE.UU. ya no usan ese límite semanal y, en cambio, promueven los huevos como una fuente de proteína “rica en nutrientes”.
¿Qué vitaminas tienen los huevos?
Los huevos contienen vitaminas B, E y D, y son bajos en grasas saturadas. “Obtenés mucha proteína por pocas calorías”, dijo Bethany Doerfler, investigadora y dietista de la Facultad de Medicina Feinberg de la Universidad Northwestern. También contienen nutrientes que son beneficiosos para los ojos y los huesos, dijo la Sra. Heller.
“Realmente hay más ventajas que desventajas”, dijo Beth Czerwony, dietista registrada del Centro de Nutrición Humana de la Clínica Cleveland, y agregó que algunos huevos están enriquecidos con ácidos grasos omega-3, dependiendo de cómo se haya alimentado las gallinas.
Sin embargo, eso no convierte a los huevos en un superalimento intachable. Consumir un exceso de huevos aún conlleva algún riesgo de enfermedad cardiovascular, dijo la Sra. Doerfler.
Pero comerlos con moderación, como un huevo completo (incluida la yema) al día, es seguro para las personas que no tienen problemas cardiovasculares subyacentes, dijo. (También se puede “poner en pausa” a los huevos, agregó, omitiéndolos durante unos días y luego comiendo una tortilla/omelette de tres huevos de vez en cuando).
Si le preocupa el colesterol, también puede limitarse a las claras de huevo, pero la yema es también donde se encuentran la mayoría de las vitaminas de un huevo, por lo que los inconvenientes de omitir la yema pueden ser mayores que los beneficios.
Es importante examinar su ingesta nutricional general, en lugar de enfocarse en un componente u otro, dijo la Sra. Doerfler. Un desayuno que incluye un huevo con tostadas y fruta fresca, por ejemplo, es mucho mejor para la salud de su corazón que una dona y café endulzado. “Los huevos están recibiendo mucha atención”, dijo. “Pero son una pequeña parte de un patrón dietético”.
Y no hay evidencia sustancial de que los huevos protejan contra el covid o cualquier otra enfermedad, dijeron los expertos. “Estamos mirando la realidad y el equilibrio”, dijo Heller, “no infundir miedo ni asustar a la gente”.
Fuente: The New York Times, La Nación