Los hoteles marinos con habitaciones flotantes surgieron como una alternativa sustentable ya que están sostenidos 100% por energías limpias que no producen, a diferencia de los demás, «huella de carbono».
Antes, dormir en el vaivén de la marea era una realidad limitada para marineros, pasajeros de un crucero o un barco privado, pero ahora los hoteles flotantes surgieron como una alternativa más que interesante.
Se indicó que en este tipo de alojamientos se plantea que la energía provista para la habitación sea sostenible en lugar de contar con generadores de energía. Y la solar es una de las más elegidas. En caso de no haber sol para captar energía, cuentan con un generador de hidrógeno de celda combustible.
Al respecto, se encuentran las cápsulas flotantes del diseñador italiano Pierpaolo Lazzarini, dentro del proyecto Pearl Suite con plataformas redondas de siete metros de diámetro y 22 m² en el interior, por ahora en proceso de fabricación.
Las mismas cuentan con un techo esférico con paneles solares y una parte rebatible que se puede sacar cuando los huéspedes deseen tomar sol desde el interior.
Se detalló que esta fuente de energía alimenta totalmente el consumo de la unidad sin producir huella de carbono, desde la iluminación hasta el sistema de aire acondicionado para refrigerar el ambiente, como los electrodomésticos tales como la heladera y la televisión.
Energías alternativas y sustentables para los hoteles marinos
La compañía también incursionó en un nuevo sistema en caso de que no haya mucha luz solar disponible que garantice la electricidad a bordo: un generador de hidrógeno de celda combustible que permite la generación de energía.
Para no correr el riesgo de quedar a merced de la corriente, están diseñadas con un sistema estabilizador de giroscopio que las deja estáticas en el lugar elegido. Su motor eléctrico les permite autoposicionarse o navegar a cinco nudos de un punto a otro, en base a un sistema de posicionamiento GPS avanzado y funciones de piloto automático. Debajo de la base está el ancla y el motor para cuando se quiera transportar la habitación, además de una reserva de agua para usar en el baño y la cocina.
Pearl Suite no es el primer desarrollo arquitectónico en el agua que diseña Lazzarini. También muestra una suite flotante de 10×10 metros con una estética similar a una casa, dos tipos de cápsulas esféricas similares a las perlas llamadas “UFO” por su similitud con un plato volador, y una reversión de la suite flotante en forma de pirámide con varios pisos pensada para comunidades más grandes.
Fuente: Ámbito