Todo indicaba que la contienda entre Ricky Martin y su sobrino Dennis Yadiel Sánchez ya no tendría a la justicia como escenario, pero este miércoles se dio a conocer un nuevo capítulo que los posiciona otra vez frente al estrado: según documentos dados a conocer por New York Post, el artista portorriqueño presentó una demanda de 20 millones de dólares contra el hijo de su media hermana.
Según informó TMZ, el cantante hizo la presentación este mismo miércoles ante los tribunales de San Juan, Puerto Rico. La demanda se produce después de que quedara sin efecto la denuncia del joven contra la estrella del pop, en la que lo acusaba de haber mantenido una relación romántica con él y de haberlo acosado cuando aquel romance terminó.
Todo comenzó en julio, cuando el sobrino de Martin, de 21 años, afirmó ante la justicia que había sido víctima de abuso doméstico e incesto por parte de su tío y por eso consiguió una orden de restricción contra el cantante. A pesar del gran revuelo mediático y judicial, Sánchez terminó pidiendo que se desestimara el caso.
En julio, Martin explicó por qué no había abordado las acusaciones cuando salieron a la luz, a pesar de que su equipo de abogados las habían negado vehemente: “Durante dos semanas, no me permitieron defenderme porque estaba siguiendo un procedimiento, donde la ley me obligaba a no hablar hasta que estuviera frente al juez”.
En el video difundido por el sitio estadounidense TMZ.com se lo veía al cantante de traje, justificando el silencio que había mantenido hasta ese momento. “Estoy frente a las cámaras hoy porque realmente necesito hablar para poder empezar mi proceso de sanación”, dijo el cantante puertorriqueño al inicio de su descargo.
Luego, el cantante remarcó que su prioridad era sanar. “¿Cómo sano? Con música. No veo la hora de estar de vuelta en un escenario, frente a las cámaras y entretener, que es lo que mejor hago”, explicó. En aquel mensaje, el artista expresó su alivio por la desestimación del caso, pero destacó el impacto negativo que todo el asunto había tenido en la vida de sus seres queridos: “Gracias a Dios se demostró que estas afirmaciones eran falsas, pero les voy a decir la verdad, ha sido muy doloroso y devastador para mí, para mi familia y para mis amigos. No le deseo esto a nadie”.
Posteriormente, se dirigió a su sobrino, aunque sin nombrarlo. “A la persona que estaba diciendo estas tonterías le deseo lo mejor y que encuentre ayuda para que pueda empezar a vivir una nueva vida llena de amor, verdad y alegría, y [deseo] que no lastime a nadie más”.
Los letrados, en tanto, informaron que Sánchez “confirmó ante el tribunal que su decisión de desestimar el asunto fue solo suya, sin ninguna influencia o presión externa”, y que “el acusador confirmó que estaba satisfecho con su representación legal en el asunto”. A su vez, fueron ellos quienes aseguraron que el sobrino de Martin, además, padece de “problemas de salud mental”.
La historia no terminó allí. Según asegura el cantante de “La mordidita”, a un mes de haber retirado la orden de restricción, Sánchez, que es hijo de la media hermana de Ricky, Vanessa Martin, comenzó a enviarle mensajes de Instagram amenazándolo con “asesinar su reputación e integridad” si no le entregaba dinero en efectivo.
En consonancia con lo que habían dicho sus abogados, en su demanda, Martin afirma que Sánchez es un “individuo inadaptado”, asegura que se jactaba de ser su sobrino y que le enviaba hasta 10 mensajes al día durante un período de cuatro meses. El cantante también alega que Sánchez publicó su número de teléfono celular en Internet y creó una cuenta de Instagram para uno de sus hijos, algo que puso muy nerviosa a toda la familia.
El cantante de “Livin’ la vida loca” aseguró que, debido al escándalo, perdió oportunidades comerciales lucrativas. Y es por eso que pide que su sobrino pague 20 millones de dólares en concepto de daños. Además, el padre de Valentino, Matteo, Lucía y Renn dijo que él y su familia se sienten “inseguros” en Puerto Rico debido al supuesto comportamiento de Sánchez.
Fuente: La Nacion.