Desde Berlín
El año empezó mal para el circuito de festivales internacionales de cine, afectados una vez más por la pandemia y ahora revolcados por la ola de la variante Omicron. En enero, Sundance, en los Estados Unidos, y Rotterdam, en los Países Bajos, que inauguran la temporada a ambos lados del Atlántico, tuvieron que cancelar a último momentos sus respectivas ediciones presenciales y reconvertirse rápidamente al formato virtual, ahora al menos con la experiencia de sus ediciones previas online.
Pero para la Berlinale, un festival de dimensiones mucho mayores –en cantidad de películas, en el movimiento de la industria- esa ya no era una opción. La edición del año pasado terminó siendo virtual y, considerando el contexto, no le fue nada mal, tanto que varias de las películas que fueron consideradas por encuestas internacionales entre las mejores del 2021, como Sexo desafortunado o porno loco y ¿Qué vemos cuando miramos al cielo?, nacieron allí. Sin embargo, la edición número 72 que comienza hoy jueves vuelve a su formato presencial, con las delegaciones presentando in situ sus películas, y funciones abiertas al público y a la prensa.
No se trata tampoco, ni de cerca, de la vieja normalidad, imposible en este contexto en el invierno boreal. El aforo de las salas está reducido al 50 por ciento, el programa en su totalidad encogió un 20 por ciento y el festival concluirá su versión protocolar antes de lo originalmente previsto: la ceremonia de clausura y la entrega de premios será en la noche del miércoles 16, mientras el público berlinés podrá seguir recuperando películas hasta el domingo 20.
Pero no es sólo eso. En dos cuadras a la redonda del Berlinale Palast, en pleno Potsdamer Platz, se ha armado un vallado con una zona de seguridad a la que solamente es posible ingresar presentando todo tipo de salvoconductos: la acreditación correspondiente, por supuesto, pero también certificado de vacunación completa con dos dosis (la Sputnik no cuenta) y un test de antígenos que debe renovarse cada 24 horas, en postas estratégicamente ubicadas en los alrededores. Hay incluso un puesto fronterizo para ingresar a la zona que el ingenio popular ya denomina el nuevo “Check-point Charlie” de la ciudad, no tan lejos por cierto del original, que en tiempos de la vieja Guerra Fría (no hay que olvidar que ahora existe otra por el conflicto en Ucrania) dividía Berlín oriental de Berlín occidental.
«Somos conscientes de los desafíos que plantea el curso impredecible de la pandemia. Al mismo tiempo, creemos que la cultura juega un papel tan fundamental en la sociedad que no queremos perder de vista este aspecto”, afirmaron Mariette Rissenbeek y Carlo Chatrian, respectivamente directora general y director artístico de la Berlinale en un comunicado conjunto. “Con nuestro nuevo concepto, nos estamos centrando plenamente en la experiencia cinematográfica y reduciendo la formación de grupos. La clave es asegurar al público, a la prensa y en particular a los artistas una experiencia colectiva en las salas, al tiempo que se reduce el número de encuentros cara a cara en cumplimiento de la normativa del coronavirus”. Esto significa que no habrá este año reuniones sociales ni mucho menos fiestas de apertura y de clausura. Y se ha sacrificado al enorme European Film Market, al menos en su versión presencial, ya que la industria podrá seguir con sus transacciones e incluso sus visionados de forma virtual.
Todas estas limitaciones no le han impedido a la Berlinale armar, a priori, una programación que promete y mucho, al menos por los nombres involucrados. La película de apertura de la competencia oficial será este jueves Peter von Kant, que no es otra cosa que la versión masculina de Las lágrimas amargas de Petra von Kant (1972), el hoy clásico film de Rainer Werner Fassbinder que tuvo su lanzamiento internacional medio siglo atrás aquí mismo en la Berlinale. La nueva versión, que vuelve a contar entre sus actrices con Hanna Schygulla, ahora junto a Denis Ménochet e Isabelle Adjani, fue concebida y dirigida por el realizador francés François Ozon, un abonado a la competencia de la Berlinale, donde ya estuvo antes en cinco oportunidades, la primera en el año 2000 con Gotas de lluvia sobre rocas calientes, irreverente adaptación de una obra teatral de… Fassbinder. “Es un placer y un honor volver a Berlín, un festival del que solo tengo grandes recuerdos. Y la Berlinale es el lugar ideal para estrenar Peter von Kant, que celebra mi apego como director francés a la cultura alemana”, declaró Ozon.
De hecho, el cine francés tiene otro título fuerte en la competencia oficial: Avec amour et acharnement, de esa guerrera del cine que es Claire Denis, con un elenco encabezado nada menos que por Juliette Binoche, Vincent Lindon, Grégoire Colin, Mati Diop y Bulle Ogier. Otros directores de primera línea en busca del Oso de Oro serán el canadiense Denis Coté, el alemán Andreas Dresen, la suiza Ursula Meier, el camboyano Rithy Panh, el coreano Hong Sang-soo, la española Carla Simón, el austríaco Ulrich Seidel y el italiano Paolo Taviani, en su primera película en solitario desde la muerte de su hermano Vittorio, cuatro años atrás. De América latina, la única presencia en concurso es la de la mexicana Natalia López Gallardo con Manto de gemas, su debut como directora después de haber sido la montajista de Carlos Reygadas, Amat Escalante y Lisandro Alonso. Se trata de una coproducción con la Argentina, a través de la productora Rei Cine.
“Doce cineastas han estado anteriormente en el festival, ocho de ellos en competición y cinco ya han tenido un Oso en sus manos”, señaló Chatrian sobre la competencia. “Los lazos humanos y afectivos son un hilo común entre las obras. Más de la mitad eligió a la familia como núcleo de sus relatos, y más de la mitad transcurren en la actualidad. Casi todos ambientan sus historias fuera de las ciudades”, describió Chatrian.
La nueva competencia Encounters, que Chatrian creó a su llegada a la Berlinale tres años atrás para albergar un cine de alto riesgo artístico, incluye títulos del francés Bertrand Bonello, que presentará Coma (“una carta a su hija y una visión del mundo en el que vivimos”), hasta el británico Peter Strickland, que vuelve con una sangrienta aproximación a la comida en Flux Gourmet. En See You Friday, Robinson, el iraní Mitra Farahani mostrará conversaciones entre Ebrahim Golestan y Jean-Luc Godard. Este último también será homenajeado con la proyección de Notre musique (2004), dentro de Berlinale Classic y a través de una exposición que ya se pudo ver en el Festival de Mar del Plata, en noviembre pasado.
Por su parte, el Forum del Cine Joven tiene mucho para descubrir, con cineastas todavía desconocidos en el circuito de festivales internacionales, pero también con unos cuantos nombres destacados, como los del alemán Philip Scheffner, la colombiana Lina Rodríguez, y los brasileños Adirley Queiros y Gustavo Vinagre, por no mencionar a maestros veteranos, como el estadounidense James Benning, la portuguesa Rita Acevedo Gomes y el kazajo Darezhan Omirbayev. Porque para el Forum la juventud no es solamente una cuestión de edad, sino de actitud frente al cine.
Se estrena Terminal norte, de Lucrecia Martel
El cine argentino dice presente
Sin una participación tan nutrida como en ediciones anteriores, debido a la merma de producción que ha sufrido el país desde hace dos años, el cine argentino sin embargo se hará presente de distintas maneras en la Berlinale 2022. En el Forum del Cine Joven habrá dos películas nacionales a falta de una: La edad media, una producción de El Pampero Cine dirigida a cuatro manos por Alejo Moguillansky y Luciana Acuña, con la hija de ambos como protagonista, y Camuflaje, versión de la novela Campo de Mayo, de Felix Bruzzone, protagonizada por el propio Bruzzone, con producción de Pablo Chernov.
En la sección Encounters, estará Gastón Solnicki con A Little Love Package, filmada casi íntegramente en Viena, mientras que en Berlinale Special se producirá el esperado estreno internacional de Terminal norte, el mediometraje de Lucrecia Martel protagonizado por Julieta Laso que produjo la plataforma Contar en colaboración con Rei Cine. A su vez, en la sección Generation, dedicada al público infantil y juvenil, estará el corto Una aprendiz invisible, realizado por Emilia Herbst en 16mm, y el largo Sublime, opera prima de Mariano Biasin, producido por Juan Pablo Miller para Tarea Fina. En Berlinale Series tendrá su premiere Iosi, el espía arrepentido, producida por Amazon, protagonizada por Natalia Oreiro y con un viejo amigo del festival como showrunner y director, Daniel Burman.
Como ya se menciona en la nota central, la película mexicana en competencia oficial, Manto de gemas, de Natalia López Gallardo, tiene coproducción argentina a través de Rei Cine. Y en cuanto a películas en desarrollo, en el Talent Project Market estará La tierra prometida, con dirección de Emiliano Torres y producción de Gaman Cine, y en el Berlinale Co-Production Market se destaca Las corrientes, con dirección de Milagros Mumenthaler, una coproducción de Alina Film (Suiza) y Ruda Cine (Argentina). Finalmente, en la sección de formación denominada Berlinale Talents participarán el distribuidor Maximiliano Monzón, la directora Paola Buontempo, el editor y director Manuel Embalse y los diseñadores de sonido Paula Silencio y Lucas Larriera.
La competición oficial
Habrá 18 títulos en concurso por el Oso de Oro, con un jurado presidido por el cineasta estadounidense M. Night Shyamalan, a saber:
Peter Von Kant – François Ozon (Francia)
Nana (Before, Now & Then) – Kamila Andini (Indonesia)
Un été comme ça – Denis Côté (Canadá)
Avec amour et acharnement – Claire Denis (Francia)
Rabiye Kurnaz vs. George W. Bush – Andreas Dresen (Alemania/Francia)
Les Passagers de la nuit – Mikhaël Hers (Francia)
A Piece of Sky – Michael Koch (Suiza/Alemania)
A E I O U – A Quick Alphabet of Love – Nicolette Krebitz (Alemania/Francia)
Un año, una noche – Isaki Lacuesta (España/Francia)
Return to Dust – Li Ruijun (China)
Manto de gemas – Natalia López Gallardo (México/Argentina/EE.UU.)
La Ligne – Ursula Meier (Suiza/Francia/Bélgica)
Call Jane – Phyllis Nagy (Estados Unidos)
Everything Will Be OK – Rithy Panh (Francia/Camboya)
The Novelist’s Film – Hong Sang-soo (Corea del Sur)
Alcarràs – Carla Simón (España/Italia)
Rimini – Ulrich Seidl (Austria/Francia/Alemania)
Leonora Addio – Paolo Taviani (Italia)
Fuente: Página12.