Trenes: a dónde se puede viajar en la Argentina y cuánto cuestan los pasajes

Recorridos, horarios y tarifas de los principales servicios de larga distancia y turísticos del país. Además, los protocolos de viaje en tiempos de pandemia y los tramos que se proyecta inaugurar.

Desde enero pasado se puede volver a disfrutar de uno de los más lindos viajes en tren que se pueden hacer en la Argentina: casi 830 kilómetros del mar a la montaña a través de la inmensidad de la estepa rionegrina, siempre cerca de los sorprendentes paisajes de la meseta de Somuncurá.

Luego del parate por la pandemia, el Tren Patagónico volvió a unir la capital de Río NegroViedma, con Bariloche, deteniéndose en 10 estaciones intermedias y con la posibilidad de combinar, en Ingeniero Jacobacci, con un tramo de La Trochita, un verdadero museo sobre ruedas.

“Volvimos con un coche chico, para 106 pasajeros, y en plena temporada con el tren grande, de tres vagones clase Pullman y uno de Primera, con capacidad para 250 pasajeros aunque, por protocolos, sólo se utiliza el 80% del aforo”, destaca el presidente del Tren Patagónico, Néstor Bruno, y destaca que se trata del único tren de larga distancia administrado íntegramente por una provincia.

El Tren Patagónico a punto de partir de la estación Viedma. Foto: Gobierno de Río Negro.

El Tren Patagónico a punto de partir de la estación Viedma. Foto: Gobierno de Río Negro.

En estas épocas de apuros, ansiedades, low cost, rutas colapsadas y vías abandonadas, que se sostenga un servicio como el Patagónico es una gran noticia para los amantes de los trenes, en un país que en la década de 1950 llegó a tener el mayor sistema ferroviario de América Latina, con casi 47.000 kilómetros de vías.

Hoy, las vías que los trenes de pasajeros -de larga distancia y regionales- en el país apenas arañan los 4.000 km en nueve provincias.

Los servicios de larga distancia y regionales operados por Trenes Argentinos (www.trenesargentinos.gb.ar).

Los servicios de larga distancia y regionales operados por Trenes Argentinos (www.trenesargentinos.gb.ar).

Pero aún en este panorama bastante desolador, si hay ganas de viajar en tren, se puede. Y así como se anotan varios ítems en la columna del “debe” -fundamentalmente la lentitud, debido a la antigüedad y el estado de vías y locomotoras-, también los hay en la columna del “haber”, porque en general los vagones de larga distancia son razonablemente confortables, con calefacción y en la mayoría de los casos también aire acondicionado, aunque el Covid haya prohibido temporariamente los coches comedor y los camarotes (ver “Protocolos…”).

Además, “los trenes son cardioprotegidos, equipados con desfibrilador”, dice el presidente de Trenes Argentinos, Martín Marinucci, y agrega que actualmente se trabaja con el área de Tecnología “para contar con Intranet a bordo que permita acceder a contenido audiovisual, y en un acuerdo con la Biblioteca Nacional para que sus contenidos estén disponibles en forma digital”.

En tiempos de pandemia, el protocolo exige dejar asientos libres. Foto: Trenes Argentinos

En tiempos de pandemia, el protocolo exige dejar asientos libres. Foto: Trenes Argentinos

Entre los viajeros de tren, no son pocos los que agradecen el paso lento por paisajes y pueblos que de otro modo pasarían de largo; la posibilidad de caminar estirando las piernas y, cómo no, socializar con otros pasajeros -ahora, manteniendo la famosa distancia social- y, sobre todo, el alivio al bolsillo: los pasajes en tren son muy económicos comparados con los de colectivos y aviones.

Hoy desde Buenos Aires (Retiro, Constitución y Once) se puede llegar en tren a Mar del PlataPinamarBahía BlancaRosarioCórdobaTucumánJunínBragado y, con combinación en Córdoba, a Villa María y Cosquín. También hay servicios regionales -como el de Salta a Gral. Güemes, el internacional de Posadas Misiones– a Encarnación o el entrerriano, de Paraná a Colonia Avellaneda- y otros fundamentalmente turísticos. Unos u otros, éstos son los principales recorridos que se pueden experimentar -y disfrutar- en el país.

El Marplatense corriendo junto a la Ruta 2. Foto: Trenes Argentinos

El Marplatense corriendo junto a la Ruta 2. Foto: Trenes Argentinos

Desde Buenos Aires

El servicio de larga distancia con más demanda es, claro, el que une Plaza Constitución con Mar del Plata, con tres frecuencias diarias de lunes a jueves y cuatro de viernes a domingos. Tarda poco menos de 6 horas -dicen que ese tiempo se irá reduciendo- y el pasaje entre ambas cabeceras cuesta $ 660 en Primera y $ 795 en Pullman. La comparación con otros medios de transporte es contundente: un pasaje de ida en colectivo no cuesta menos de $ 2.600, y en avión, $ 7.300 ida y vuelta.

El tren que sale de Constitución a las 6.22 permite conectar con el que parte a las 10.20 desde Guido hacia Pinamar (estación Divisadero), todos los días. “El servicio a Pinamar llevaba cinco años sin funcionar, tenía las vías totalmente tapadas por malezas y árboles y alambrados de campos cruzándolas”, cuenta Marinucci sobre la vuelta del tren a uno de los principales destinos de la Costa Atlántica, servicio que se mantendrá todo el año ($ 570 ida).

El tren a Rosario, listo para partir. Foto: Trenes Argentinos

El tren a Rosario, listo para partir. Foto: Trenes Argentinos

Otro que parte de Constitución llega en 13 hs a Bahía Blanca, parando en San Miguel del Monte, Azul, Olavarría,Pigüé y Tornquist, entre otras estaciones. Sale lunes, miércoles y viernes y regresa martes, jueves y sábados (de punta a punta, $ 895 en Primera y $ 990 en Pullman).

De Once parte el tren a Bragado, en tanto los otros de larga distancia lo hacen desde Retiro: a Rosario hay un servicio diario que sale 16.55 y llega a Rosario Sur a las 22.24 y a Rosario Norte, a las 23.10. Para regresar hay que subirse en Rosario Norte a las 0.40, y en Rosario Sur, a la 1.26. Para casi 6 hs de viaje se paga $ 300 en Primera y $ 360 en Pullman.

El de Retiro-Tucumán es el más largo de los servicios de larga distancia: 19 horas y media para un tren que parte de Buenos Aires los miércoles y domingos a las 13.05 y llega a la estación Cevil Pozo a las 19.30 del día siguiente. Regresa a las 12.45, para llegar a las 19.10 del otro día. La tarifa: $ 775 en Primera, $ 925 en Pullman. El colectivo, es cierto, puede tardar unas horas menos (15h 29’ el servicio más rápido), pero a un costo que no baja de $ 6.500. En avión, 1h 45’ por $ 5.200 el tramo.

En 19 horas y media y por $ 775, el tren llega de Retiro a Tucumán. Foto: Trenes Argentinos

En 19 horas y media y por $ 775, el tren llega de Retiro a Tucumán. Foto: Trenes Argentinos

Cerca, casi 19 horas, tarda el tren a Córdoba, que parte de Retiro los lunes y los viernes a las 21.10 y regresa jueves y domingos a las 15.30. Cuesta $ 500 en Primera $ 600 en Pullman.

Paisajes por la ventanilla

Entre los trenes turísticos, otra buena nueva viene desde Córdoba: la recientemente anunciada extensión del servicio del Tren de las Sierras, que une Alta Córdoba con Cosquín y que está sumando 16 km más para llegar hasta Valle Hermoso, muy cerca de La Falda. “Proyectamos que hacia fines de mayo esté lista la ampliación, en una traza por la que el tren no pasa desde hace 24 años”, destaca Marinucci, y adelanta que una segunda etapa prevé llevar el servicio hasta La Cumbre, y una tercera, a Cruz el Eje.

El Tren de las Sierras tiene dos frecuencias diarias entre las estaciones Alta Córdoba y Cosquín. Foto: Trenes Argentinos

El Tren de las Sierras tiene dos frecuencias diarias entre las estaciones Alta Córdoba y Cosquín. Foto: Trenes Argentinos

Además de cumplir -como el Patagónico- una importante función social para los habitantes de la zona, el Tren de las Sierras es muy turístico, ya que recorre un bellísimo paisaje serrano por sólo $ 15, con dos frecuencias diarias: parte de Alta Córdoba a las 8.40 y a las 11 y en 2,5 hs llega a Cosquín, con 12 paradas intermedias. Regresa a las 6 y a las 14.

Y otra buena desde Salta, donde se prevé que el próximo 16 de abril inaugure el tramo entre la ciudad de Salta y Campo Quijano, ampliando en 47 km el actual servicio entre la capital provincial y Gral. Güemes. Inicialmente tendrá dos frecuencias diarias en cada sentido.

Otro tren “turístico-social” es el ya mencionado Patagónico, esencial para los pobladores de las 10 estaciones intermedias, como Valcheta, Ramos Mexía y Maquinchao, entre otras. Anote: sale de Viedma los viernes a las 18 y arriba a Bariloche a las 12 del día siguiente. Regresa los domingos a las 17 para llegar el lunes a las 11 a la capital rionegrina. Ida en Pullman, con calefacción y aire acondicionado, $ 2.440. En Primera, $ 1.860 (para residentes de Río Negro, $ 2.220 y $ 1.670, respectivamente).

La Trochita hace un viaje corto entre Ing. Jacobacci y Ojos de Agua. Desde Esquel actualmente no está saliendo.

La Trochita hace un viaje corto entre Ing. Jacobacci y Ojos de Agua. Desde Esquel actualmente no está saliendo.

Y aún quedan dos salidas turísticas del histórico Viejo Expreso Patagónico, más conocido como La Trochita, entre Ing. Jacobacci y el paraje Ojos de Agua, donde se detiene una hora para almorzar -hay al menos dos menús disponibles o puede uno llevarse la vianda- y regresa.

Esas salidas serán los sábados 20 de marzo y 3 de abril ($ 1.400 ida y vuelta). Luego entrará en descanso de temporada baja, y si la situación lo permite, podría regresar en invierno; si no, habrá que esperar al próximo diciembre (trenpatagonicosa.com.ar). En el otro extremo de la traza de La Trochita, en EsquelChubut, actualmente el servicio no está funcionando.

Otro de paisajes increíbles que volvió este verano, y parece que para quedarse, es el Tren a las Nubes, uno de los más altos del mundo, con un recorrido de 17 km (una hora) entre San Antonio de los Cobres y el viaducto La Polvorilla, una gran obra de ingeniería a 4.200 msnm.

El Tren a las Nubes sobre el viaducto La Polvorilla. Foto: Ramiro Villa/Ministerio Turismo de Salta.

El Tren a las Nubes sobre el viaducto La Polvorilla. Foto: Ramiro Villa/Ministerio Turismo de Salta.

Allí el tren se detiene durante media hora y luego regresa a San Antonio de los Cobres. Se puede hacer solo ese tramo o la excursión completa con bus desde Salta y paradas en Campo Quijano, el Viaducto del Toro, la formación Yacoraite, El Alfarcito y Santa Rosa de Tastil. Sale de Salta a las 7.05 y regresa cerca de medianoche. La excursión completa desde Salta (bus + tren) cuesta $ 6.750sólo el tren$ 4.350 (www.trenalasnubes.com.ar).

Unos 4.100 km al sur corre el ferrocarril más austral del planeta: el Tren del Fin del Mundo, un recorrido turístico que parte cerca de Ushuaia y se interna en los bosques de lengas del Parque Nacional Tierra del Fuego, siguiendo parte del recorrido del antiguo “tren de los presos”, que salía desde el presidio de Ushuaia hacia la ladera del Monte Susana en busca de madera y piedra.

El Tren del Fin del Mundo recorre parte del Parque Nacional Tierra del Fuego. Foto: Prensa Tren del Fin del Mundo.

El Tren del Fin del Mundo recorre parte del Parque Nacional Tierra del Fuego. Foto: Prensa Tren del Fin del Mundo.

En sus seis estaciones se va narrando aquella historia, mientras se disfruta de los paisajes surcados por el río Pipo y de sitios como Cascada La Macarena, donde se ve la reconstrucción de un típico asentamiento de los yámanas. Dos salidas diarias (9.30 y 12). Cuesta $ 3.200 en Turista; $ 6.400 en Primera Superior y $ 7.500 en clase Premium. Descuentos para jubilados, y menores (www.trendelfindelmundo.com.ar).

Protocolos sobre rieles

Desde que se fueron reactivando, entre noviembre y diciembre del año pasado, los trenes de larga distancia aplican los debidos protocolos de higiene y seguridad ante la pandemia de Covid-19.

Desinfección previa a un viaje: Foto: Trenes Argentinos

Desinfección previa a un viaje: Foto: Trenes Argentinos

Una de las medidas tomadas fue reducir el aforo al 80% de la capacidad, para dejar asientos libres. Además, no funcionan los coches-comedor -en algunos casos se convirtieron en coches de aislamiento preventivo, por si un pasajero muestra síntomas-; no están habilitados los camarotes ni hay venta de alimentos a bordo, todos los pasajeros deben usar tapabocas en todo momento y en las estaciones de cabecera se les toma la temperatura, igual que a conductores y guardas.

También se incrementaron los procesos de limpieza y sanitización, ya que no sólo se realiza una limpieza y desinfección completa antes de cada partida y luego de cada llegada, sino que las unidades cuentan con equipos de desinfección a bordo. Además, en servicios como el del Tren Patagónico, se sanitizan los apoya cabezas y se cambian los cortinados en cada viaje.

Fuente: Clarín