La compañía Sin Drama de Downnació en 2007 en el taller de teatro “Sin Drama” dirigido por Juan Laso con el objetivo de acercar al espectador a una nueva forma de expresión y conectarlo con el Síndrome y la discapacidad desde un lugar amplio y real. Entre sus producciones se encuentran ya varias obras de teatro, video clips musicales, algunas películas y recientemente, en el marco de la pandemia, divertidas improvisaciones por Zoom.
La gran noticia es que el film Escuelita de amor, la tercera película escrita y dirigida por Laso ganó el Premio a la Mejor Película en el XIII Festival Internacional de Cine sobre la Discapacidad de Collado Villalba, España.
Protagonizada por Hernán Criscione, Sebastián Gimeno, Juan Garzón, Mariano Garzón, Delfina Esquenazi, Soledad Sosa, Pablo Plorutti, Jonathan Páez, Gigi Stirparo, Daniel Bacigalupo, Cecilia Tucci, Tomy Roussos, Luis Despontin, Josefina Mendivil, Nadia Israel y Juliana Carcar, ahora se puede ver gratis por el Canal de YouTube del grupo: Sin drama de Down.
“Sin Drama de Down es un grupo de teatro con artistas con discapacidad intelectual, mayormente con síndrome de down, y también es un taller, un espacio de aprendizaje donde buscamos enseñar el oficio del actor. Por otro lado, si bien hacemos foco en lo artístico, es un espacio terapéutico, ya que estoy acompañado en el trabajo con una psicóloga y hay una contención. La tarea de por sí genera muchas cuestiones tanto en lo expresivo, como en la autonomía en el lenguaje, en el habla, en el cuerpo”, cuenta Laso, fundador del grupo junto a la terapista Andrea Doumanian. Además, desde 2019 el taller funciona dentro de la Escuela Teatral de Gustavo Garzón y Virginia Lombardo.
Actor, maestro de yoga, profesor de teatro, granjero permacultor y feliz padre de cuatro hijas, Laso se encuentra abocado hace 10 años al cultivo orgánico, la construcción en barro y la vida rural en el partido de Ezeiza, donde vive junto a su familia, dirige su centro de yoga y retiros: Las tierras de Avalon (www.lastierrasdeavalon.com.ar), el mismo lugar donde está filmada la película.
“Siempre trato de salirme un poco de las clasificaciones, porque si bien se las denomina personas con discapacidad, están dando algo, desde el arte, por ejemplo, están dando una película que puede ver todo el mundo, gente que nunca tuvo contacto con la discapacidad y puede ver que allí hay una gran capacidad más que otra cosa. Ellos están muy aquí y ahora, tienen una gran capacidad de integrar al otro y a lo diferente, hay un espíritu grupal muy importante. Y la presencia del humor, ese estado de gracia con el que trabajan, más allá de que muchas veces se viven cosas fuertes, intensas y muy dolorosas también, como la partida de algún compañero o algún familiar”, señala Laso.
Consultado sobre la modalidad del trabajo que realiza regularmente con el grupo, cuenta que desde hace 13 años se reúnen todos los jueves por la tarde para llevar adelante el taller, donde trabajan desde el reconocimiento del cuerpo físico y sus capacidades expresivas a través de juegos teatrales, con la música como elemento de expresión, de vínculo, de juego y exploración de los diferentes géneros como el terror, el humor, la tragedia, el drama o lo absurdo.
“Después hacemos muchas improvisaciones, donde trabajamos el oficio del actor, esto de asumir un rol, entender el conflicto teatral, los objetivos de los personajes, las fuerzas que se oponen y generan una tensión dramática que después se puede resolver de diferentes maneras. Si bien es un trabajo arduo, en un punto tienen mucha verdad, algo muy interesante para lo actoral, porque son buenos actores que trabajan con mucha sinceridad, en su palabra y en sus acciones, siempre muy cuidado”, explica el director, y aclara que al equipo docente de la compañía se sumó, en 2018, Daniela Santini, psicóloga y actriz, quien acompañó los procesos emocionales y colaboró en la resolución positiva de los conflictos.
Respecto de la continuidad del trabajo en tiempos pandémicos, Laso cuenta que enseguida comenzaron con las clases por Zoom y estuvieron todo el año trabajando de esa manera. “Al comienzo me daba un poco de vértigo porque yo no lo sabía manejar, y ellos empezaron a tener un buen manejo y se preparaban mucho para la clase”, sigue Laso. De esta forma se pudieron sumar algunos nuevos alumnos del interior y realizaron cuatro trabajos que circularon por redes y actualmente están disponibles en su canal de YouTube: Noticiero de las buenas noticias; Sin drama en el Bar Virtual; Sin drama Espiritual y Sin drama en el Mar del Zoom.
A su vez, la prolífica compañía dirigida por Laso confirmó para este año el estreno en el país de su cuarto film llamado Buena educación, rodado en la Escuela Rural N° 6 Perito Moreno, del Partido de Ezeiza.
Fuente: Alejandro Rapetti, La Nación